Los incendios en Australia han causado que la calidad del aire en Sydney y otras localidades, se ubique en un estado preocupante: 12 veces por encima el nivel considerado «peligroso».
Hasta ahora se han quemado aproximadamente 2.7 millones de hectáreas de terrenos en los estados del este de Australia. Esto es tres veces más de lo que se perdió en los incendios de la Amazonía.
Sin embargo, no solo las llamas son el problema, el aire contaminado ha llegado a muchas localidades australianas, que ahora presentan una calidad de aire muy peligrosa.
El marte, se presenciaron nubes de humo gigantescas causadas por los incendios forestales sin control, aumentando la contaminación del aire en Sydney a más de 12 veces el nivel «peligroso».
La ciudad prácticamente se cubrió de una capa de gas tóxico, afectando a sus residentes y exponiéndolos a aire contaminado, como pocas veces se han visto.
Richard Broome, director de salud ambiental de New South Wales (NSW), dijo a The Guardian:
Ciertamente, en Sydney hemos experimentado episodios de calidad del aire muy pobres en el pasado y el que más conozco es el episodio de tormenta de polvo de 2009, donde tuvimos niveles extremadamente altos.
Pero, ciertamente, este período de humo que hemos estado experimentando durante el último mes, no tiene precedentes, por lo que estas condiciones son un riesgo para la salud de las personas”.
Incluso el agua del océano contiene restos de contaminación, como puede verse en el siguiente estado de Twitter.
The charCOAL coast. #NSWbushfires #ClimateChange #waterquality #sydneysmoke pic.twitter.com/1TMi0cBhK0
— Prof Emma L Johnston AO FTSE (@DrEmmaLJohnston) 8 de diciembre de 2019
Niveles peligrosos en la calidad del aire
De acuerdo al Air Quality Index (AQI), que brinda una medición de los niveles de contaminación del aire, establece que una medición de 200 o más se considera peligrosa para la salud.
Dicho esto, varias locaciones de Sydney han presentado niveles de más de 400, incluso algunas obtuvieron 1.000, y dos regiones rompieron todo récord alcanzado 2.000 AQI.
Uno de los lugares más afectados es el suburbio del oeste interior de Rozelle, a pocos kilómetros al oeste de la capital, que registró una lectura crítica de 2.552 AQI, aproximadamente 13 veces el nivel considerado peligroso para la salud.
Mark Taylor, científico ambiental de la Macquarie University, dijo a The Sydney Morning Herald:
Este fue un evento significativo”. Estas lecturas de calidad del aire solo se ven en lugares como India y China y están empujando los límites (de esos lugares).
No es un evento local, es enorme, exponiendo de 4 a 5 millones de personas (al humo de los incendios forestales), lo que sabemos que es cancerígeno. Es ineludible, estamos viviendo en un mar de humo y partículas”.
«Apocalipsis» aéreo
En las diversas regiones de Sydney se han incrementado las admisiones a los hospitales, el transporte público ha sido interrumpido, las alarmas de humo causaron caos y la evacuación de edificios. Muchos residentes llevan ahora máscaras faciales para protegerse de la niebla tóxica.
See the Sydney smoke haze go from bad to worse today, making it virtually impossible to see the Sydney Harbour Bridge. #SydneySmoke pic.twitter.com/Rzh0iV6C9i
— Nine.com.au (@Ninecomau) 10 de diciembre de 2019
Entre la controversia por la relación entre el cambio climático, los tóxicos niveles del aire y los incendios, se ha determinado que existe una conexión entre el aumento de las temperaturas y las sequías extremas.
Los incendios han causado la pérdida de aproximadamente 700 hogares y la muerte de innumerables animales salvajes, como los koalas que podrían ver su extinción muy de cerca.
El escenario es realmente terrorífico. Se puede ver gente usando máscaras antigases en las ciudades, en el transporte público. La gente se ahoga con el aire en su propia casa, y es imposible ver a algunos metros debido a la intensa bruma. lo peor de todo es que parece que es una nueva normalidad, y es terrible, tuiteó el periodista Andrew Tomas.
Fuente: The Guardian / The Sydney Morning Herald / Science Alert
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