Desde el año pasado, las redes sociales se han llenado de imágenes de enormes esculturas talladas en piedra en honor a las antiguas deidades. Apukunaq Tianan, mejor conocido como «La Morada de los Dioses» se ha convertido en un nuevo atractivo turístico en Cusco, lleno de leyendas y enigmas.
Elaborada por el artista Michael Monteagudo Mejía, esta colosal estructura fue tallada en las rocas de una montaña del distrito de Poroy, en Cusco.
Cada una de las inmensas esculturas alcanza alturas de hasta 17 metros y son la representación a los dioses y figuras andinas.
La Morada de los Dioses en Cusco
Michael Monteagudo Mejía y la construcción de Pachamama.
Ubicado a tan solo 30 minutos de la ciudad de Cusco, resalta un imponente templo dedicado a las antiguas deidades del Perú.
Esta obra de arte, la cual fue tallada y moldeada en piedra calipso consta con un total de seis esculturas. Su ubicación exacta es la comunidad de Senk’a, en el distrito de Poroy, en una montaña que jamás había sufrido alteraciones por el hombre.
Lo que más llama la atención de las esculturas son sus colosales dimensiones, que van de los 15 hasta los 17 metros de altura.
El recorrido a Apukunaq Tianan comienza con un enorme rostro que parece emerger desde el interior de las montañas. Esta escultura es una representación de la Madre Tierra, la Pachamama.
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Siguiendo la senda de la montaña, podemos encontrarnos con un intimidante puma que parece estar rugiendo, pues presume sus grandes colmillos. Este animal es considerado sagrado por la cultura cusqueña.
Seguidamente nos encontramos con Viracocha, el Dios Supremo. Después está un enorme y enigmático «portal dimensional» que llama poderosamente la atención a los turistas. Este lleva a los tres mundos en que basaban su cosmovisión los habitantes del antiguo Tawantinsuyo.
Rodeando la montaña, se encuentra un enorme Inca que, al igual que la Pachamama, parece estar surgiendo del interior de la Tierra.
El misterio de su construcción
Trabajadores del complejo han declarado que pequeñas entidades que llaman «Sunkies» se aparecieron ante Monteagudo para exigirle su representación en el monumento.
Muchas personas se cuestionan que solo la mano del hombre haya sido capaz de tallar tan imponentes esculturas. Por esta razón, han nacido diferentes teorías y leyendas alrededor de Apukunaq Tianan.
De hecho, los trabajadores del complejo estético han declarado que durante su construcción, mientras Monteagudo cincelaba y esculpía la roca viva en esta tierra virgen, aparecieron criaturas conocidas como Sunkies.
Estos seres, considerados los guardianes de la Madre Tierra, surgieron reclamando su derecho a formar parte de tan bondadoso proyecto:
“Artista ¿Por qué solo los gigantes están representados en tus esculturas? Nosotros, la gente pequeña, también queremos ser parte”.
De hecho, Monteagudo ha declarado que continuará el proyecto con monumentos dedicados específicamente a los protectores de la Pachamama, estas criaturas intraterrestres.
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Visitar Apunaq Tiana
El viaje a la Morada de los Dioses en Cusco puede servir tanto de esparcimiento, como de meditación. Crédito: inkayniperutours.com
La Morada de los Dioses es un lugar ideal si se quiere tener un contacto directo con la naturaleza, para observar estos maravillosos monumentos.
Sin embargo, también es perfecto para el esparcimiento. Muchos de sus visitantes son familias, grupos de amigos o parejas que suben la montaña para apreciar una obra de arte única.
Además, una vez en la cima, se puede ver gran parte de la ciudad de Cusco, adornada con sus hermosas montañas que hacen contraste con el urbanismo.
Sin duda alguna, es un lugar ideal para reflexionar, meditar y encontrarse con la naturaleza y uno mismo.
Pero si se va a visitar el monumento, es recomendable tomar ciertas precauciones para que la visita sea plena y satisfactoria:
- Usar bloqueador solar y llevar prendas que ayuden a protegerse del Sol.
- Tener todos los documentos de identidad a la mano.
- Llevar dinero extra, pues a los alrededores siempre hay tiendas de alimentos, juegos y recuerdos.
- Llevar botellas de agua y frutas, pues el recorrido de la montaña, como es obvio, no es una simple caminata y llegar a la cima puede cansar un poco.
- En caso de que haya pronóstico de lluvias, llevar ponchos, impermeables y sombrillas.
Saber si las leyendas son ciertas, si los Sunkies aparecieron realmente o no, es imposible. Sin embargo, no cabe duda que Apukunaq Tianan o la Morada de los Dioses, ha dado mucho de qué hablar. Michael Monteagudo Mejía realizó un magnífico trabajo representando a los dioses y figuras andinas.
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