John Forbes Kerry es un político, ex militar y ex secretario de estado que se desempeñó entre los años 2013 y 2017 durante la administración Obama. Kerry ha declarado una preocupante advertencia para la Tierra: «solo quedan 9 años para evitar una catástrofe climática».
El salvaje clima invernal de esta semana se ha calificado de histórico y sin precedentes, y John Kerry, enviado presidencial especial de EE. UU. para el clima, ha hablado al respecto.
Kerry dijo a CBS News:
“Obviamente, queremos evitar que esto se convierta en la nueva normalidad en la medida que podamos”.
Mucha gente cree erróneamente que el cambio climático solo se relaciona con el aumento de las temperaturas, no con la disminución. Según Kerry, la amenaza abarca a todos los patrones climáticos.
John Kerry (Wikimedia Commons)
Kerry dijo:
“Creo que es una forma muy apropiada de pensar en ello, por lo que está directamente relacionado con el calentamiento, aunque su instinto es decir, espere un minuto, esta es la nueva Edad de Hielo. Pero no lo es. Proviene del calentamiento global y amenaza todos los patrones climáticos normales”.
El planeta se está calentando en gran parte debido a las emisiones de gases de efecto invernadero que se bombean al cielo desde las centrales eléctricas, los automóviles, los aviones y la industria. Incluso proviene de la forma en que criamos y cultivamos nuestros alimentos. EE. UU. es el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero que están calentando el planeta, detrás de China.
Se cree que ese calentamiento hace que las tormentas sean más fuertes, las sequías más extremas y los océanos aumenten su nivel. Eso significa que ciertos lugares de la Tierra actualmente poblados se volverán inhabitables. De hecho, ya está sucediendo .
Kerry dijo que solo nos quedan unos pocos años para evitar una catástrofe climática.
Kerry dijo:
“Bueno, los científicos nos dijeron hace tres años que teníamos 12 años para evitar las peores consecuencias de la crisis climática. Ya pasamos tres años, así que nos quedan nueve”.
(Public domain)
Acuerdo de País
Ahí es donde entra en juego el Acuerdo de París, un tratado climático de 2015 dedicado a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en más de 180 países de todo el mundo. Contiene promesas hechas entonces por casi todos los países de la Tierra para reducir sus emisiones gases de efecto invernadero que calientan el planeta.
Kerry dijo:
“Incluso si hiciéramos todo lo que dijimos que íbamos a hacer cuando se realizó el Acuerdo de París, veríamos un aumento en la temperatura de la Tierra a alrededor de 3.7 grados o más, lo cual es catastrófico”.
(Public domain)
Cuando Kerry fue secretario de Estado en 2016, firmó el acuerdo climático de París. Un año después, vio cómo el entonces presidente Trump borraba su logro característico. En 2017, Trump anunció que se retiraba del acuerdo histórico. Su administración revocó más de 100 regulaciones ambientales.
Pero las energías renovables, como las turbinas eólicas y los paneles solares, son ahora mucho más baratas y están proporcionando cantidades récord de energía en los EE. UU., lo que ha provocado la quiebra de algunas plantas de carbón.
Fabricantes de automóviles como Tesla, que fabrican automóviles de lujo que funcionan con baterías, han inspirado a otras empresas de fabricación de automóviles a hacer lo mismo. General Motors anunció en enero que será principalmente eléctrico para 2035. Kerry dijo que es una gran noticia, pero el país necesitará hacer la transición a la energía limpia mucho más rápido y esto creará y eliminará empleos. También dijo que ha habido muy poca acción y demasiado aire caliente.
La administración Biden ahora se ha reincorporado al Acuerdo de París y se espera que anuncie un objetivo de emisiones mucho más ambicioso para el Día de la Tierra en abril. Luego, a finales de este año, todos los países que firmaron los acuerdos de París se reunirán nuevamente y formalizarán sus nuevos objetivos. El objetivo general es llegar a cero emisiones netas para 2050. De todos depende que lo logremos.
Es urgente que méxico de reversa a su intento RETRÓGRADA por mantener sus plantas contaminantes. Y QUE SE REINCORPORE A ESTA MEDIDA POR EL BIEN DEL PLANETA. no podemos permitir que un país se salga de las excelentes intenciones del acuerdo de París.
El mundo científico cree que la Vida se circunscribe sólo al universo material con sus elementos constitutivos.
Ignora u omite o es cerrado a que existan planos de existencias y, por ende, en cada uno de ellos naturalezas diversas con su propio sentido, roles y de interacción dinámica recíproca.
Es lo que explica que no perciba que la real naturaleza de la inteligencia es trascendente a la realidad material de este universo, ni ha accedido siquiera que es ésta quien integra al pensamiento, imaginación, memoria e intuición; que no es un producto del cerebro sino que interactúa con las capacidades y energías neurosinápticas electroquímicas y servomotoras del sistema cerebral, conforme ambas funcionan en simultáneo conectadas a la Vida a través de los sentidos y órganos sensoriales del cuerpo.
Por tanto, es también el preceso mediante el cual descubrimos y accedemos al conocimiento aprendiendo y comprendiendo la naturaleza de las cosas desde la época de las cavernas conforme además desarrollamos la conciencia desde que nacemos.
Sin este conocimiento previo, se explica entonces que aún no descubramos que todo y cada que existe es Vida y, por ende, no sólo tienen un “cómo” existen y/o funcionan sino también un “por qué y para qué”.
Cuando se supere esta barrera mental e intelecto cognitiva se descubrirá que tanto la Tierra como la Humanidad existen acorde a ciclos: de existencias y de fin de ciclos; cada una sujeta a su respectiva secuencia lógica de efectos determinados por sucesos naturales que genera la interacción dinámica terrestre y constante de evolucion e involución mental, intelecto cognitiva y psicosocial, respectivamente.
Significa que ya es extemporáneo cualquier convencimiento, interpretación y conclusión que se tenga del destino fatal del planeta, como también que se achaque toda culpa a la acción contaminante y demás conductas humanas negativas, las que, por lo demás sólo afectan e influyen en la proporción correspondiente en lo que es un fin de ciclo natural de la Tierra, acelerado por el propio fin de ciclo de la humanidad.
Como corolario de esta realidad, al final resulta una ventaja que como humanidad no accedamos a dicho conocimiento.