Dan Aykroyd creador y protagonista de los Ghosbuster proviene de una autentica familia de cazafanstasmas
Pocos entusiastas de la mítica película Ghostbuster (1984) conocen que su creador y protagonista, el actor Dan Aykroyd es un gran aficionado a los temas ocultos y los OVNIS. De hecho, proviene de una auténtica familia de cazadores de fantasmas y estudiosos de lo paranormal desde finales del Siglo XIX. Codigo Oculto te descubre la increíble historia de médiums, fantasmas, platillos volantes y hombres de negro que existe tras uno de los films más emblemáticos de los ochenta.
Una familia atraída por lo paranormal y lo oculto
Todo comenzó con un antepasado de Dan Aykroyd, Samuel Augustus Aykroyd nacido en 1855 y bisabuelo que se interesó por el mundo de lo sobrenatural de una forma casi accidental a finales del siglo XIX. Como médico en cirugía dental a principios de la década de 1890, buscaba métodos efectivos para intentar paliar el dolor en sus pacientes. De esta forma llegó a estudiar la hipnosis y probablemente, a raíz de este interés, tuvo sus primeros contactos con el movimiento espiritista que estaba muy de moda desde las célebres experiencias de las hermanas Fox. Samuel estaba convencido que algunos individuos en estado de trance eran capaces de actuar como un conducto de comunicación entre los vivos y los muertos. Tal fue su creciente fascinación por esta intrigante cuestión que llegó incluso a intercambiar correspondencia con el conocido escritor Sir Arthur Conan Doyle, otro entusiasta seguidor y practicante del espiritismo en su tiempo.
En su granja cerca de Sydenham (Ontario. Canadá) Samuel organizaba sesiones de espiritismo en compañía de un médium llamado Walter Ashurst, que llegó a ser su huésped desde 1921 hasta 1933. Fruto de sus investigaciones recopiló en numerosos diarios, desde 1905 hasta 1933, los diferentes resultados de las sesiones. En las páginas de estos documentos se detallaban desde las manifestaciones de un espíritu que decía ser un antiguo miembro de la dinastía Ming, hasta las comunicaciones mantenidas con el propio bisabuelo de Samuel. Además, al parecer, durante una sesión realizada en la casa de Maurice Aykroyd, su hijo, y todos los asistentes escucharon el sonido de una trompeta fantasmal sobre sus cabezas. Nadie supo de dónde venía ese sonido.
En busca del ectoplasma
Aunque la gran obsesión de los estudios paranormales de Samuel fue que los espíritus consiguieran manifestarse de forma física, ya que quería probar, entre otras cosas la existencia del polémico ectoplasma. Mucho antes que los personajes de la película fueran tras esta etérea sustancia su antepasado ya se obsesionó con atrapar “restos” de fantasmas. Pero en todas las sesiones que mantenía para lograr este aporte físico, los espíritus le pedían paciencia y tiempo. Desgraciadamente, la muerte de Samuel en 1933 puso punto final a sus más que interesantes investigaciones. En esos momentos, su hijo Maurice decidió continuar con el legado paranormal de su padre. Siendo un ingeniero que trabajaba en la “Bell Telephone“, pensó de forma adelantada a su tiempo, que quizás, podría llegar a comunicarse con el más allá con la ayuda de la incipiente tecnología. Y por ello, intentó fabricar, con poco éxito, un dispositivo de radiofrecuencia para hablar directamente con los espíritus de forma fluida y sin la necesidad de un médium.
No obstante, el interés familiar por lo sobrenatural no decaía por estos contratiempos. A su vez, el hijo de Maurice, Peter Aykroyd, que, con tan solo 7 años, observaba oculto detrás de una puerta o un pasillo como Ashurst hablaba por boca de muchos espíritus desencarnados en casa de su abuelo, también comenzó a interesarse pronto por el mundo de los espíritus y realizó numerosas investigaciones, aunque de forma mucho más escéptica que sus predecesores.
Y como no podía ser de otra forma en esta saga familiar, su hijo Dan Aykroyd, que creció entre revistas y libros de espiritismo, también era un ferviente creyente en lo espiritual, añadiendo en su caso su atracción además por el tema de los platillos volantes y la vida extraterrestre tan en boga en los años de infancia y juventud del actor. De hecho, en su nacimiento ocurrió un hecho singular como el mismo Dan Aykroyd comentó en una entrevista: “Mi madre habla de un momento en que me estaba amamantando y observó una pareja de ancianos que apareció al final de la cama. La imagen se desvaneció. Sacó un álbum de fotografías y vio que era mi bisabuelo y su esposa, que venían a visitar al nuevo hijo”. Según cuenta cuando su madre llamó al padre de Aykroyd las apariciones se disiparon de la habitación.
El origen de los cazafantasmas
Por eso, no es de extrañar, que cuando entre finales de los años setenta y principios de los ochenta, y siendo un comediante muy conocido en los Estados Unidos, Dan decidió escribir un guion para una película, pensó en unir su pasión por los fantasmas, los OVNIs y el humor en una increíble historia. Al parecer todo surgió después de leer un artículo sobre física cuántica y parapsicología. El guion original era muy diferente de lo que conocemos, se desarrollaba en el futuro, y los protagonistas eran cazafantasmas que se encargaban de luchar y atrapar tanto a entidades fantasmales como a seres procedentes de otros planetas e incluso viajando a través del tiempo. Posteriormente, como ocurre con casi cualquier guion cinematográfico de Hollywood la trama original de Dan sufrió varios y drásticos cambios (al menos 5), hasta que llegó a las pantallas de todos los cines del mundo con el nombre de “Ghostbusters” (1984).
Este éxito del film no hizo más que afianzar las creencias de Aykroyd por los fantasmas y demás asuntos sobrenaturales. El 29 de septiembre de 2009, Peter Aykroyd, el padre de Dan, publicó un libro titulado “Una historia de fantasmas: la verdadera historia de las sesiones espiritistas, médiums, fantasmas y Cazafantasmas” prologado por su hijo y donde recogía, entre otras cosas, la historia familiar en torno a la investigación del más allá. Por su parte, la pasión de Dan Aykroyd por el tema OVNI le llevó a ser miembro vitalicio y consultor oficial de Hollywood para la Mutual UFO Network, y en 2005, produjo el documental “Dan Aykroyd: Unplugged on UFOs“.
En una entrevista para la revista “Psychic News” (18 de abril de 2009), Dan Aykroyd dijo:
“Soy un espiritista, un orgulloso portador de la insignia espiritualista. Los médiums y la investigación psíquica han continuado durante muchos, muchos años … Muchas personas han visto espíritus, escuchado una voz o sentido un descenso en la temperatura. Creo que están entre el aquí y más allá, que existen entre la cuarta y la quinta dimensión, y que nos visitan con frecuencia”.
¿Visitado por los Hombres de Negro?
Dan Aykroyd también es un gran entusiasta de la ufología. En 2002, colaboró en un documental para el canal SciFi con varios investigadores como Linda Moulton Howe, Steven Greer y John Mack. En 2005 que aún más allá, y protagonizó su propio documental titulado “Dan Aykroyd Unplugged on UFOs”. Pero más recientemente en el tiempo en una entrevista concedida al “HuffPost Show” (17/04/2015), presentado por Roy Sekoff y Marc Lamont Hill, habló abiertamente sobre la cuestión.
El famoso actor confesó que su pasión por los platillos volantes se remonta a su juventud cuando vio la famosa fotografía de extrañas luces sobrevolando el edificio del Capitolio de los Estados Unidos en 1952. Además, la visión de la película “The Day the Earth Stood Still” afianzó su creencia en la existencia de los extraterrestres.
En la citada entrevista afirmó que:
“Si hay otra especie ahí fuera monitoreándonos, estarían observando cómo la humanidad está destruyendo el planeta y probablemente estarían preocupados”.
El actor confirmó que había visto OVNIs:
“Sí. He visto cuatro, y no puedo decir que sean naves alienígenas, pero tampoco que son de la Fuerza Aérea (…) Dos de ellos era específicamente construcciones aéreas de algún tipo (…) Uno de ellos tenía una luz, y otro tenía un color gris opaco, y eran aeronaves, una de ellas volaba muy lento, y la otra estaba flotando sobre mí”.
Incluso se atrevió a hablar del encubrimiento oficial:
“La Fuerza Aérea ha estado muy interesada en todo esto. No niegan la existencia de estas naves hiperdinámicas y súper aerodinámicas. No lo niegan (…) Su angustia viene porque no pueden decírtelo. Quieren decirte cualquier cosa menos que son extraterrestres. Cualquier excusa, incluso si son desconocidos o no están identificados. La Fuerza Aérea no puede simplemente salir y admitir que hay seres extraterrestres muy avanzados en nuestra sociedad y que son los que pilotan estas máquinas”.
Aykroyd también dice que piensa que, aunque hay un encubrimiento, la Fuerza Aérea realmente no sabe mucho más que el resto de nosotros.
Él dijo:
“Están muy interesados en lo que está sucediendo, pero como nosotros, no lo saben”.
El actor contó que en una ocasión también observó a varios “Hombres de Negro“.
Fue en la ciudad de Nueva York, durante su participación en el rodaje del documental OVNI de 2002, mientras fumaba un cigarro en un descanso y hablaba por teléfono con Britney Spears. En un momento dado se giró y observó un hombre alto vestido de negro mirándolo con cara de pocos amigos. Cuando el actor le dio la espalda y a los pocos segundos miró en esa dirección ni el siniestro personaje ni su coche estaban en el lugar. Simplemente habían desaparecido…
Y es que como se suele decir en Hollywood la realidad siempre supera a la ficción…
Un artículo de José Antonio Caravaca, colaborador de CodigoOculto.com
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