A diferencia de otros desiertos, el que se encuentra en Alaska es totalmente gélido, y esconde muchos enigmas en su extenso terreno. Algunos expertos aseguran que, incluso, en lo más profundo se encuentra la Pirámide Negra, la cual sería mucho más grande que la Gran Pirámide de Giza.
Algunos investigadores creen que el encubrimiento de este hallazgo existe desde el siglo XX. Algunos expertos sugieren que es para ocultar lo que podría ser una civilización desconocida, e incluso, de origen extraterrestre. Por ello, el misterio de la Pirámide Negra de Alaska es uno de los más investigados.
El enigma de la Pirámide de Alaska
Su descubrimiento data del 22 de mayo de 1992. En esa época, China realizaba una prueba nuclear subterránea en LonPor, el desierto del norte de China.
En un principio, se pensó que se trató de un gran terremoto, lo que llevó a los científicos a usar sismógrafos para analizar la corteza terrestre, descubriendo una estructura piramidal cerca del Monte McKinley, mucho más grande que la que se encuentra en Egipto.
A pesar de su posible origen antiguo, la confirmación de su existencia se dio a conocer apenas el 26 de julio del 2012. La veterana periodista e investigadora independiente, Linda Moulton Howe, fue la encargada de difundir su existencia en el popular programa radial Coast to Coast.
Moulton entregó un estudio en el que confirmó la existencia del Triángulo de Alaska; una zona que contaba con desapariciones de personas y vehículos de todo tipo. Mostrando unos 18.000 casos confirmados de 1988.
La periodista transmitió una entrevista pregrabada con Doug Mutschler, ex oficial de contrainteligencia del Ejército de Estados Unidos. Explicó las circunstancias que rodearon el hallazgo de la Pirámide, además de un vínculo con el Ejército.
Mutschler fue trasladado de Alaska a Fort Meade, sede de la Agencia de Seguridad Nacional. Ahí corroboró que los datos confidenciales verificaban la historia de la pirámide.
“No descubrí nada sobre las pirámides, pero obtuve información sobre Alaska de dos bóvedas separadas. Apenas me había sentado cuando dos personas se acercaron y me dijeron: ‘Oye, no necesitas saber estas cosas'”.
Un secreto bien oculto
También afirmó que una filial local de la NBC emitió un informe 6 meses después de la explosión que propició el hallazgo de la pirámide. Sin embargo, cuando intentó contactarlos para obtener una copia del artículo, negaron haber publicado algo al respecto.
Las cosas se tornaron extrañas después de la conversación de Moulton con Mutschler. El hijo de un ex ingeniero de Western Electric contactó a la periodista para validar las declaraciones del ex oficial. Además, agregó datos adicionales.
La nueva fuente de Moulton dijo que entre 1959 y 1961, su padre trabajó en un fuerte sistema eléctrico que provenía de una inmensa pirámide subterránea en Alaska, de la cual no sabían su origen.
El hombre explicó que el mismo Ejército lo escogió para unirse a un grupo de expertos que estudiarían y operarían en un edificio subterráneo al que llamaban Pirámide Negra.
Recalcó la seriedad con la que el gobierno consideró esta iniciativa y las precauciones que tomaron para ocultarla. En un principio se pensó en una base militar, pero explicó que era un proyecto de investigación sobre distribución de energía.
Según Moulton Howe, la pirámide está a unos 80 kilómetros al suroeste del monte McKinley, y se cree que es sumamente antigua, posiblemente construida y enterrada por una civilización desconocida.
Actualmente es resguardada celosamente por el gobierno estadounidense, con equipo militar que controla el sitio. Aún así, la verdad ha ido conociéndose poco a poco y cada vez falta menos para que el mundo la conozca.
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