Un futurólogo afirma que los dispositivos de realidad aumentada basados en inteligencia artificial (IA), como gafas innovadoras, darán a los seres humanos “superpoderes” para detectar mentiras y “leer” las emociones de sus interlocutores.

Devin Liddell, futurólogo principal de Teague, afirma que los sistemas de visión por ordenador integrados en auriculares o gafas captarán señales emocionales que los ojos e instintos humanos no aumentados no pueden ver.

La tecnología permitiría saber si una cita miente o está sexualmente excitada, así como detectar a un político mentiroso.

Liddell afirma que, a medida que la realidad aumentada se “fusione” con la inteligencia artificial, los seres humanos adquirirán superpoderes sensoriales que “transformarán el panorama social”.

Lo describió como “backchannel”, término utilizado normalmente para describir conversaciones que no se hacen públicas y que pueden dar ventaja a las personas en negociaciones, por ejemplo.

Liddell espera una “convergencia de las tecnologías de visión por ordenador con la inteligencia artificial y los wearables de consumo” en los próximos años.

Liddell afirma:

“Los usuarios podrán discernir todo tipo de datos fisiológicos y psicológicos sobre otras personas.

En combinación con la inteligencia artificial, se dispondrá de un canal de información constante sobre las personas con las que se interactúa en ese momento”.

¿Podría la realidad aumentada dar a las personas superpoderes mentales mediante el uso de la visión artificial para analizar las señales emocionales de otras personas?

Tecnología supondría una ventaja frente a otros grupos de personas

El futurólogo cree que las gafas podrían proporcionar silenciosamente información que supondría una ventaja para las personas en todos los ámbitos, desde la política hasta el mundo de las citas.

Liddell afirma:

“¿Está la otra persona nerviosa o tranquila, interesada o molesta, etc.? ¿Hay indicadores que sugieran que están faltando a la verdad? ¿Hay indicadores que sugieran que se sienten atraídos por el espectador?”.

Según Grand View Research, se prevé que el mercado mundial de la realidad aumentada alcance los 597.540 millones de dólares en 2030, con el lanzamiento de Vision Pro de Apple, de 3.499 dólares, a principios de 2024.

La IA ya promete “leer” las emociones de la gente, y empresas como Zoom han introducido el “análisis de sentimientos” en sus productos de prueba: las máquinas leen lo que siente la gente y lo que dice basándose en sus expresiones.

La tecnología es controvertida: Microsoft retiró una función de “lectura de emociones” de su software Azure Face debido a la “falta de consenso científico” y a la “preocupación por la privacidad”.

Tecnología daría superpoderes

Liddell cree que estos “superpoderes” perceptivos permitirán detectar desde enfermedades ocultas hasta problemas mentales, y que se aprovecharán al máximo.

Apple presentó recientemente sus auriculares AR, Vision Pro, que fusiona un mundo virtual con la realidad. Los expertos creen que los dispositivos como este podrán decirle lo que otras personas están pensando, con solo mirarlos.

En las negociaciones, por ejemplo, estos “superpoderes” darán ventaja a una de las partes, y en las citas podrían suponer una ventaja clave.

Liddel explica:

“Los seres humanos tienen muchas oportunidades y comportamientos ventajosos, y utilizarán estos superpoderes en todo tipo de ámbitos, desde complejas negociaciones políticas hasta una primera cita”.

En los primeros casos, sólo uno de los participantes tendrá superpoderes, lo que creará condiciones muy desiguales.

Liddell afirma que, en el futuro, las personas que salgan con alguien podrían ser capaces de calibrar el bienestar financiero de su pareja, e incluso su fertilidad, con solo mirarla.

Con sólo mirar a una cita, por ejemplo, los usuarios podrían saber si alguien dice la verdad o está interesado, además de otros datos como su fertilidad.

Liddell explica:

“Imagina un futuro en el que la inteligencia artificial y la visión por ordenador evalúen a tus citas”.

Devin Liddell, principal futurista de Teague, cree que AR y AI cambiarán la forma en que las personas interactúan (Teague).

La mejor ilustración podría ser una futura interfaz de citas vista a través de gafas o implantes de retina durante una cita.

Estás sentado frente a tu cita y, mientras habláis y os conocéis, recibes información en tiempo real sobre esa persona y cómo se siente.

Podría haber algo así como un índice de veracidad, tasas de fertilidad previstas, indicadores de solidez financiera -actual y proyectada-, métricas de salud y forma física, signos de abuso de sustancias actuales o anteriores, indicadores de excitación, inestabilidad emocional, etcétera.

Liddell explica:

“Y puede que sólo una de las personas de la cita pueda acceder a este tipo de tecnología, dejando que la otra confíe en la intuición a la antigua usanza”.

Según Liddell, el poder de esta tecnología dará lugar a prohibiciones.

Liddell dijo:

“Habrá intentos de prohibir su uso debido a casos graves de abuso: pensemos en funcionarios de aduanas que prohíben la entrada a viajeros con enfermedades mentales y en empresarios sin escrúpulos que eliminan de sus listas de seguro médico a los solicitantes de empleo menos sanos antes de poder contratarlos”.

Las parejas y las familias tratarán de dejar de lado el hogar como lugar libre de canales clandestinos.

Pero estos intentos de resistencia serán en vano, ya que los sistemas son cada vez más pequeños y baratos, y acabarán introduciéndose en nuestros cuerpos a través de implantes en la retina y en el canal auditivo.

[H/T: DM]

Crédito imagen de portada: depositphotos.com

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