Los descubrimientos arqueológicos siempre son noticia de primera plana, sin importar el lugar donde se haya llevado a cabo. Porque es una forma de conocer el pasado de distintas civilizaciones, su cultura, economía, fortalezas y debilidades. Claro, en algunos casos se presentan excepciones.
Ha pasado que, en ocasiones cuando los arqueólogos realizan un hallazgo, no se obtienen las respuestas esperadas. Más bien surgen preguntas que no pueden responderse, convirtiéndose en enigmas misteriosos que la ciencia, aún con sus avances, no puede explicar.
Podría decirse que la estructura de anillos concéntricos, que datan de hace 4.600 años hallados en Sevilla, se ha convertido en uno de esos enigmas. Hay sobradas razones para considerarlo así, puesto que se desconocen muchos detalles acerca de la procedencia de esos materiales, herramientas y modo de vivir de los habitantes del lugar.
¿Qué representa la estructura de anillos concéntricos?
Arqueólogos pertenecientes a Tubinga, una prestigiosa Universidad alemana, fueron responsables de este interesante descubrimiento realizado hace pocos años muy cerca de Sevilla. Todo indica que estos anillos son de la época conocida como “La Cultura del Vaso Campaniforme” entre los años 2600 – 2000 a. C.
Estructura de anillos concentricos hallada. Data de la Cultura del Vaso Campaniforme, entre el 2600 y el 2200 a .C.
De acuerdo con los objetos que se localizaron en el lugar y por la forma como está conformado el complejo, el sitio era utilizado para celebrar ciertos tipos de rituales. Uno de los aspectos más interesante y por supuesto importante, del descubrimiento tiene que ver con su ubicación.
Se trata del primero de su clase situado en la parte sur de Europa, porque todos los conocidos anteriormente se encontraron hacia la zona más al norte del continente. Aunque en España, ya se había conocido en el siglo pasado de otro yacimiento similar y muy significativo para la arqueología y el mundo.
Yacimiento Valencina de la Concepción
Este lugar es muy parecido a la estructura de anillos concéntricos, solo que el yacimiento Valencina de la Concepción, pertenece al periodo de la Edad del Cobre. De hecho, se sabe que llegó a ser uno de los centros más importantes de aquel tiempo. Hay suficientes pruebas que corroboran esta afirmación.
Corredor del Dolmen de la Pastora, en el término municipal de Valencina. (Wikimedia Commons)
Una de ellas, es haber encontrado en el lugar “El Dolmen de la Pastora“, un impresionante mausoleo megalítico. Fue sin dudas el mayor hallazgo de la región, ubicado en las afueras de Sevilla en el año 1860. Los trabajos arqueológicos en la zona se extendieron por años, hasta recabar bastantes datos de esa época en particular.
De esa manera se logró establecer que, el asentamiento contaba de 400 hectáreas, los habitantes del lugar ya practicaban la agricultura. Además conocían la manera de criar animales. Así mismo hay pruebas que demuestran la existencia de un sistema de comercio agrícola entre poblaciones más distantes.
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Los investigadores llegan a esta conclusión porque se han hallado algunos artículos considerados de lujo para aquellas civilizaciones. Por ejemplo, colmillos de elefantes del Medio Oriente y África, también hallaron varias cuentas de ámbar que son propias del norte de Europa.
Características de la estructura de anillos concéntricos
Según los investigadores alemanes, la estructura de anillos concéntricos abarca una extensión de 6 hectáreas y está aproximadamente a 50 kilómetros del yacimiento Valencina de la Concepción. En los alrededores se logró rescatar algunas joyas y fragmentos de huesos que posteriormente fueron sometidos a pruebas de radiocarbono.
Primer plano de la estructura de anillos concéntricos encontrada.
Por medio de estas pruebas fue que se pudo obtener la datación del sitio, ubicándolo muy atrás en el tiempo, hace 4.600 años. Se destaca la presencia de ladrillos de arcillas muy grandes con evidentes rastros de quemaduras, algo que hace presumir que se trataba de un espacio para realizar rituales espirituales.
En conjunto, se pueden observar unos cuantos hoyos circulares con rendijas para entrar, pero muy irregulares. Justo en el medio, se podía ver un orificio bastante profundo con forma de círculo y alrededor de 19 metros de ancho.
Algunas dudas quedan por resolver
Los arqueólogos opinan que el sitio fue utilizado con intensidad, pero por un tiempo muy breve. Además, determinaron que no fue usado una vez terminado el periodo de la Edad del Cobre, incluso consideran su ubicación como “inusual”, pues en España no hay vestigios de otras estructuras circulares.
La mayoría de las que se han encontrado hasta ahora, son mil años más antiguas, y se localizan hacia el norte de los Alpes. Por eso, los arqueólogos continúan su arduo trabajo con el fin de aclarar las dudas que están pendientes y que todos esperamos puedan resolverse muy pronto.
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