El origen de la vida en la Tierra es un tema que siempre ha generado polémicas y opiniones encontradas entre distintas corrientes académicas. Al margen de esas diferentes teorías que intentan explicarlo, se encuentran los científicos que desde hace algunos años manejan un planteamiento muy interesante.
De acuerdo con un equipo de investigadores planetarios, la vida en nuestro planeta pudo haber sido sembrada. Así lo demuestran las más recientes evidencias encontradas en un asteroide, del cual se extrajeron unas muestras que fueron analizadas minuciosamente.
Algunos datos y detalles de la investigación en curso, fueron dados a conocer hace poco por los científicos japoneses, encargados del proyecto investigativo. Sin dudas, estamos en presencia de un descubrimiento fascinante que vale la pena destacar, pues podría ponerle fin a las discusiones sobre cómo surgió la vida.
El asteroide Ryugu: sus características
Se trata de un cuerpo celeste que tiene un diámetro de 900 metros que orbita alrededor del Sol, pero muy cerca de la Tierra y Marte. Los expertos lo han clasificado como un “asteroide carbonoso” debido a su composición química, misma que fue presentada después de varias pruebas.
Así mismo, consideran bastante probable que los materiales que conforman al asteroide Ryugu, pertenezcan a la nebulosa de donde se originaron los planetas y el Sol hace miles de millones de años. Los estudios realizados por los investigadores, sugieren que estos cuerpos contienen varias sustancias orgánicas, incluyendo los compuestos prebióticos.
Fotografía del asteroide Ryugu. Crédito: JAXA
Los primeros resultados obtenidos y publicados por el grupo de científicos indican que:
“Esta clase de asteroides del grupo C, pudieron en el pasado lejano depositar las moléculas orgánicas prebióticas que se requerían para originar la vida en la Tierra”.
Hayabusa-2: una impresionante misión espacial
La misión espacial para posarse sobre el asteroide Ryugu y recoger las muestras, comenzó en 2014 cuando se lanzó al espacio la nave espacial japonesa Hayabusa-2. Después de recorrer cientos de miles de kilómetros a lo largo de casi 4 años, finalmente en 2018 alcanzó su objetivo.
Una vez que la nave estuvo a 20 kilómetros de altitud del asteroide, desplegó dos pequeños robots para dar inicio al estudio de su superficie. Un acontecimiento digno de resaltar porque por primera vez en la historia de la ciencia aeroespacial se pudo efectuar esta maniobra exitosamente.
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El principal objetivo de este proyecto consistía en traer muestras del asteroide a la Tierra para analizarlas. Para conseguirlo, la nave disparó un impactador cinético para crear un cráter de aproximadamente 2 metros. De esa manera los robots recolectaron los materiales necesarios para ser estudiados posteriormente.
Además de las muestras y las fotografías, la Hayabusa-2 tuvo tiempo suficiente para observar con todos sus instrumentos – cámaras, sensores de temperatura y espectrómetros — al asteroide. El tiempo que duró la investigación espacial fue de año y medio, luego los materiales recogidos fueron enviados a la tierra el 2020.
¡Se desvelan los resultados del asteroide Ryugu!
Restos fotografiados en el asteroide: guijarros y cantos rodados en la superficie de Ryugu. Crédito: S. Tachibana / Science
Hiroshi Naraoka, miembro de la Universidad Kyushu con sede en Japón, estuvo dirigiendo la investigación acompañado por un equipo numeroso de científicos japoneses e internacionales. Después de realizar varios rigurosos análisis microscópicos, mineralógicos y químicos, se obtuvieron los resultados.
El asteroide Ryugu presenta una composición muy singular, pues las muestras contenían:
- 1.14 fracciones de masa de hidrógeno.
- 3.76 fracciones de masa de carbono.
- 0.16 fracciones de masa de nitrógeno.
En comparación con otros cuerpos celestes similares, Ryugu es más rico en estos elementos. Además se pudo determinar que contiene 10 diferentes clases de aminoácidos, diversos compuestos nitrogenados así como hidrocarburos aromáticos policíclicos.
Un estudio fundamental para comprender la formación de la vida
Imágenes microscópicas de partículas Ryugu enviadas a la Tierra. Crédito: S. Tachibana et al. / Science
La evidencia encontrada en el asteroide Ryugu arroja una luz bastante clara para comprender la formación del sistema solar. Los científicos también consideran que el estudio –que apenas va en su primera fase– puede aportar información determinante para entender el origen de la vida.
Esta afirmación se desprende tomando en cuenta que la mencionada roca espacial tiene un origen primigenio. Según las observaciones hechas por Habayusa-2, hace millones de años formó parte de un cuerpo principal, del cual se desprendió después de una catastrófica colisión. Tal como opina la prensa internacional, esta investigación es un lujo de la ciencia.
Pueden encontrar más detalles de los hallazgos científicos en el estudio publicado: SOLUBLE ORGANIC COMPOUNDS IN ASTEROID 162173 RYUGU. 53rd Lunar and Planetary Science Conference (2022) – Naraoka, H., Takano, Y., & Dworkin, J. P.
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Con respeto y con el ánimo de aportar en utilizar adecuadamente las magnitudes,me permito aclarar : En el segundo párrafo del subtitulo El asteroide Ryugu : sus características , se lee ” Así mismo,consideran bastante probable que los materiales que conforman al asteroide Ryugu pertenezcan a la nebulosa de donde se originaron los planetas y el sol hace milenios.”
Se estima que la formación del sistema solar comenzó hace 4600 millones de años,ese es el rango de millones.
Aprobecho de dar las gracias,por lo interesante de los arículos y por la oportunidad de aportar.Saludos.
Hola Arturo, muchas gracias por la corrección. Saludos.