En la era moderna de hoy, el envío de información codificada en algo bastante habitual, especialmente en el mundo digital. Sin embargo, el uso de códigos para transmitir mensajes ocultos no es invención actual, ni mucho menos. Un ejemplo de ello lo tenemos en Gorgo, la reina de Esparta que descifró un código secreto que detuvo una invasión.
Gorgo, la primera mujer criptoanalista del mundo
Para entender por qué podemos llamar a Gorgo la primera mujer criptoanalista del mundo, tenemos que conocer un poco de su historia. El historiador griego antiguo Heródoto es la mejor fuente de información sobre esta extraordinaria mujer. Fue hija única del Rey Cleómenes I, y nació en algún momento entre los años 518 y 508 a.C.
Desde que era muy niña, demostró una inteligencia excepcional y una gran habilidad para leer a las personas. Heródoto cuenta que, cuando Gorgo era apenas una jovencita, a veces solía escuchar las conversaciones de su padre con personajes prominentes. De hecho, con solo nueve años de edad, le aconsejó a su padre Cleómenes no escuchar las palabras de Aristágoras, el tirano de Mileto.
Consejera real desde la niñez
Según los registros antiguos, la conversación entre Cleómenes y Aristágoras fue escuchada por los curiosos oídos de la pequeña. Aristágoras le pidió a Cleómenes que enviara fuera a la niña para poder proseguir, pero este le dijo que podía hablar en frente de la criatura.
Aristágoras comenzó con la promesa de diez talentos si el rey le concedía su pedido, a lo que el rey se negaba con la cabeza. El invitado comenzó a elevar la suma de dinero, hasta llegar a la jugosa cantidad de cincuenta talentos. Fue entonces cuando la pequeña Gorgo le dijo a su padre: «Padre, levántate y vete, o el extraño te corromperá».
Cleómenes, complacido por la sabia observación de su hija, se retiró y se fue a otra habitación, dejando a Aristágoras solo y avergonzado. Este último tuvo que abandonar la ciudad y nunca más regresó. Gorgo, por su parte, siguió creciendo y convirtiéndose en una mujer hermosa e inteligente.
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Pieza fundamental para impedir una invasión enemiga
Cuando Gorgo creció, se casó con un descendiente del semidiós Hércules, el legendario rey Leónidas, con quien tuvo un hijo llamado Pleistarchus. El ambiente político y social que se vivía en Grecia por aquellas épocas era todo menos estable. Particularmente, Esparta estaba bien preparada para la batalla, pues sus soldados recibían el mejor de los entrenamientos.
La gran hazaña que la reina Gorgo llevó a cabo fue producto de un mensaje oculto enviado por el rey espartano exiliado Demaratus. Este personaje sabía de la invasión que las hordas inmortales del Rey Jerjes llevarían a cabo. A fin de proteger a su pueblo, necesitaba enviar un mensaje secreto, que no fuese interceptado por el ejército enemigo.
Gorgo descubre el secreto y descifra el mensaje
El mensaje de advertencia que Demaratus envió a su nación iba oculto en unas tablillas de madera cubiertas de cera. Para hacerlo imperceptible al ejército de Jerjes, que custodiaba cada rincón de la región, Demaratus raspó la cera de unas tablillas de madera plegable. En ellas escribió el mensaje, y luego cubrió de nuevo la superficie con cera.
Nadie sospechó de la presencia de algún mensaje oculto en aquellas tablas de madera. Cuando por fin llegaron a su destino, fue igual de imposible que alguien adivinara el secreto. Ahora bien, la reina Gorgo fue mucho más inteligente, y se dio cuenta de que algo había escrito bajo la cera.
Los soldados griegos hicieron caso de su consejo, para entonces descubrir los planes secretos del rey Jerjes. Gracias a ello, el ejército local pudo prepararse y armar una estrategia para repeler la invasión, salvando una vez más a la nación. La mente brillante de su reina les permitió encontrar el mensaje y tomas así las debidas precauciones.
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Gorgo desaparece la historia clásica
En la batalla contra las hordas persas, el esposo de Gorgo, Leónidas, lamentablemente perdió la vida. Luego de su muerte, la reina de Esparta desaparece de la historia clásica. Pero sus hazañas quedaron plasmadas en la historia, llegando a ser quizá la primera mujer criptoanalista del mundo.
Imagen de portada: Escena de la película «300: Rise of an Empire». Crédito: Warner Bros. Pictures
Escrito originalmente por Luisa Lugo. Redactora de CodigoOculto.com
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