De acuerdo con una carta nunca antes publicada, el primer hombre en la Luna, Neil Armstrong, invitó a un profesor que investigó avistamientos de OVNIs para que el gobierno de los EE.UU. lo acompañara en un crucero.

La carta revelada muestra al astronauta Neil Armstrong totalmente fascinado con la vida extraterrestre (pero en secreto), e incluso trató de proteger los nombres de los funcionarios del gobierno que habían divulgado secretos OVNI, según se ha afirmado.

Neil Armstrong fue el primer hombre en la Luna.

Armstrong, quien murió en 2012, nunca habló públicamente sobre su interés, pero algunos investigadores creen que vio OVNIs después de aterrizar en la Luna en julio de 1969.

Neil Armstrong y J. Allen Hynek

Una carta nunca antes publicada escrita por un profesor de primer nivel que investigó avistamientos de OVNIs para la Fuerza Aérea de los EE.UU. podría ser la evidencia que podría demostrar que Armstrong estaba interesado en la vida alienígena.

La carta es del profesor J. Allen Hynek, un consultor para el proyecto secreto Bluebook, una investigación oficial de la Fuerza Aérea de EE.UU. sobre avistamientos de OVNIs en la década de 1960, que ahora se ha convertido en una serie de éxito en History Channel.

El Dr. Hynek fue consultor en el programa del OVNI del gobierno de los EE.UU., Project Blue Book

La nota, obtenida por Sun Online, muestra que durante un crucero desde Nueva York a la costa oeste de África en 1973, J. Allen Hynek fue personalmente invitado a unirse a Armstrong y a su familia.

La pareja dio conferencias sobre el espacio y la astronomía a bordo del Canberra que navegó desde Nueva York hasta la costa de África occidental.

Más de 2,000 maestros, artistas, autores, actores, arquitectos, científicos y celebridades asistieron al mundialmente famoso crucero.

El crucero de dos semanas dio a los huéspedes la oportunidad de ver uno de los eclipses solares totales más largos de los tiempos modernos, y Hynek y Armstrong formaron parte de un panel llamado «La vida en el universo».

La carta que revela a Armstrong

La carta fue escrita por Hynek a Jennie Zeidman, quien trabajó con él en la Base de la Fuerza Aérea Wright Patterson, en Ohio, en el Proyecto Bluebook.

Esta carta nunca antes vista muestra cómo Armstrong invitó al investigador OVNI J. Allen Hynek a unirse a él para cenar. Crédito: Irena Scott

En la carta, fechada el 15 de junio de 1973, el Dr. Hynek escribió:

Querida Jennie. Una semana a partir de hoy, navegaremos … ¡El director del crucero me llamó para preguntar si a los Hyneks les importaría compartir una mesa con los Armstrongs! ¡Dígale a Barry que debería poder conseguirle un autógrafo!”

Armstrong ha sido relacionado a avistamientos OVNI, y una de las principales informaciones que se pueden encontrar es la que brindaron algunos ufólogos quienes afirman que Armstrong vio un OVNI después de aterrizar en la Luna en julio de 1969, pero la NASA cortó su alimentación.

En el 25 aniversario de los aterrizajes lunares en 1994, Armstrong hizo una rara aparición pública y dijo de manera críptica:

Hoy tenemos con nosotros un grupo de estudiantes, entre los mejores de EE.UU. Para ti, decimos que solo hemos completado un comienzo.

Queda mucho por hacer. Hay grandes ideas por descubrir. Hay avances disponibles para aquellos que pueden eliminar una de las capas protectoras de la verdad”.

La ex oficial de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA), Dra. Irena Scott, quien descubrió la carta, dijo:

Muchas personas se han preguntado si Armstrong estaba interesado en los fenómenos OVNI y esto podría proporcionarle un arma humeante.

Esta carta podría ser algo histórica porque en realidad podría confirmar que Armstrong tenía un interés en los OVNI. Muchas personas se han preguntado si Armstrong estaba interesado en los fenómenos OVNI”

La Dra. Scott ha escrito un libro sobre el tema OVNI. Crédito: Irena Scott

La Dra. Scott también descubrió que Armstrong se acercó a otro investigador de OVNIs llamado Leonard Stringfield cuando estaba en la junta directiva de un banco.

Scott añadió:

Stringfield conocía a más de 50 informantes conectados al gobierno que habían divulgado información sobre eventos OVNI.

Sin embargo, se negó a dar a conocer sus nombres, y sus críticos insistieron en que sin las identidades de las fuentes, las historias carecían de credibilidad.

Stringfield reconoció este problema, pero había prometido proteger las identidades de sus informantes, y sintió que si no lo hacía no obtendría más información de ellos ni de nadie más.

Stringfield dijo que hace varios años, cuando Armstrong estaba en la junta directiva de un banco de Cincinnati, Armstrong y Hynek se le acercaron con una propuesta para proteger los nombres de los informantes relacionados con el gobierno.

Armstrong dijo que Stringfield podría poner su lista de nombres en una caja de seguridad en el banco de Armstrong, a la que se suponía que Armstrong también tendría acceso.

La intención era que, en el caso de la muerte de Stringfield, los nombres no se perdieran, pero Stringfield rechazó la idea. No hay pruebas de que esto haya ocurrido; sin embargo, Armstrong y Hynek sí se comunicaron”.

La noticia llega una semana después de que Avi Loeb, Director del Departamento de Astronomía de Harvard, admitiera que el objeto interestelar ‘Oumuamua podría ser una sonda alienígena de la civilización espacial ahora extinta.