Un grupo de arqueólogos que se encontraban excavando en la península siberiana de Taimyr han hallado antiguos ornamentos corporales, de aproximadamente 5.000 años de antigüedad, consistentes en bezotes de piedra que se insertaban perforando la piel justo por debajo del labio inferior, tal como los piercings en la actualidad.

El descubrimiento ha sido realizado en la temporada de excavaciones de verano del 2016 en un yacimiento que se encuentra unos 600 kilómetros al norte del Círculo Ártico. Los investigadores creen que este emplazamiento, en la zona más septentrional de la región de Krasnoyarsk, se remonta a una época tan antigua como el tercer o cuarto milenio a. C.

Los bezotes son un tipo de adorno corporal que puede estar hecho con una concha, hueso o piedra y que se inserta bajo el labio inferior como ornamento en algunas culturas.

El descubrimiento ha sido realizado por arqueólogos de la compañía Krasnoyarsk Geoarkheologia («Geoarqueología de Krasnoyarsk«), cuyo portavoz Danil Lysenko ha comentado que «Encontramos estos bezotes en el yacimiento neolítico de Bolshaya II, situado en la ribera del río Novaya, un afluente del Katanga.». Tal como informa el Siberian Times.

Se encontraban a la vista sobre el terreno, junto con puntas de flechas de piedra. En algunas zonas de esta región, el viento arrastra la capa superior de tundra y la arena, por lo que estas antiguas piezas se encuentran ahí mismo, en el suelo, a la vista.”

A juzgar por las puntas de flecha de piedra, podemos datar el yacimiento provisionalmente entre el cuarto y el tercer milenio a. C.”

Ornamentos faciales de este tipo, similares a los modernos piercings, ya habían sido descubiertos por una expedición arqueológica de la época soviética encabezada por Leonid Khlobystin hace más de 40 años.

Según los arqueólogos, estos ornamentos faciales, dos de los cuales se encontraron este mismo verano en un yacimiento ártico, eran comunes entre los ancestros de los esquimales, aleutas e indios norteamericanos, pueblos que habitaban todos ellos regiones más occidentales.

Según los arqueólogos estos ornamentos faciales, dos de los cuales se encontraron este mismo verano en el yacimiento ártico ya mencionado, eran comunes entre los ancestros de los esquimales, aleutas e indios norteamericanos, pueblos que habitaban todos ellos regiones más occidentales.

Se cree que tanto hombres como mujeres lucían este tipo de ornamentos.

Fuente: Ancient Origins.es