Una grave perturbación ha ocurrido en el campo magnético de la Tierra, luego que la tormenta geomagnética más fuerte en 6 años haya golpeado el planeta.

Hace unos días, el Sol liberó una enorme corriente de partículas directamente hacia la Tierra. Los expertos en meteorología espacial esperaban una tormenta geomagnética de gran magnitud tras el suceso, pero se han quedado un poco cortos. La tormenta es más fuerte de lo previsto. En realidad, es la más fuerte en seis años, lo que la convierte en la más fuerte de este ciclo solar -que comenzó en diciembre de 2019- hasta ahora.

Tormenta geomagnética G4

La National Oceanic And Atmospheric Agency tiene una unidad de pronóstico meteorológico espacial que vigila lo que sucede allá arriba, y las cosas definitivamente se están volviendo salvajes. La tormenta tiene una calificación G4, marcándola como severa – sólo un nivel por debajo del máximo, que es extremo.

No hay peligro para las personas, pero estas tormentas geomagnéticas pueden afectar a la tecnología. Se sabe que se producen problemas generalizados de control de voltaje, y las naves espaciales pueden experimentar la formación de carga eléctrica en su superficie y aumentar la resistencia.

En la órbita terrestre baja no hay aire suficiente para respirar, pero la atmósfera se extiende considerablemente, tanto que ralentiza los satélites con el tiempo. Los cambios en el campo magnético de un lado desplazan la atmósfera del otro, haciéndola más densa y ralentizando aún más los satélites. Estos corren el riesgo de ralentizarse tanto con el tiempo que caigan de nuevo a la Tierra.

La alerta de la NOAA para esta tormenta G4. Crédito de imagen: NOAA

Podría afectar la tecnología de satélites

Durante una tormenta geomagnética G4, es posible que la calidad de los Sistemas Globales de Navegación por Satélite se deteriore, dificultando la navegación por tierra, mar y aire.

Pero no todo es negativo. Hay un gran positivo importante cuando se trata de estos fuertes acontecimientos, y son las auroras. Se espera que las auroras boreales sean especialmente intensas esta noche y podrían ser visibles hasta en Missouri y Kentucky.

Así que, si vives en alguna de esas zonas, mira al cielo e intenta ver la aurora si estás en el lugar adecuado. Y si no lo estás, o las condiciones meteorológicas no son buenas, no te preocupes. Hay unas 100 tormentas de nivel G4 en cada ciclo solar, así que tendrás muchas oportunidades en los próximos siete años, sobre todo teniendo en cuenta que aún no estamos en el máximo de actividad solar. Eso llegará en 2025.

Crédito imagen de portada: depositphotos.com

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