Terraformar Marte ha estado presente en la ciencia ficción desde hace muchos años, hasta que la ciencia tradicional comenzó a sopesar la idea. Ahora, el apocalipsis climático en la Tierra podría acelerar este objetivo.
Desde hace algunos años existe un objetivo bastante real en las agencias espaciales; crear un «ambiente laboral» en la Luna. Convertirla en un lugar idóneo para que personas puedan vivir y trabajar sin ningún contratiempo.
Ahora, ese pensamiento está yendo mucho más allá, ya que algunos científicos han declarado que, si somos capaces de convertir a la Luna en un «centro de investigación y desarrollo» de la Tierra ¿Por qué no hacerlo con planetas cercanos?
Y, el punto de mira más idóneo es, sin duda alguna, Marte.
Terraformar Marte
La terraformación de Marte es un objetivo real de la ciencia. Crédito: Daein Ballard / Wikipedia Commons
A comienzos de la década, Elon Musk y SpaceX consiguieron algo que, en el pasado, parecía imposible; realizar un vuelo comercial fuera de la Tierra.
El cohete Falcon llegó a la Estación Espacial Internacional y aterrizó en la Tierra sin contratiempo alguno, convirtiendo el suceso en algo histórico.
Musk ha sido capaz de realizar proezas junto a sus ingenieros en materia espacial, por lo que la NASA comenzó a tomar en serio todos sus planes. ¿El más importante? enviar una misión tripulada a Marte en el 2024.
El problema es que el CEO de SpaceX no solo quiere enviar un cohete que pase a través de Marte y vuelva. Su idea principal es poder enviar personas que comenzarían la colonización del planeta rojo.
Esto podría sonar descabellado, pero no es el único que tiene esas intenciones. De hecho, la propia NASA tiene un proyecto aún más ambicioso, y es el de crear bases permanentes en Marte.
La idea principal es crear una Estación Espacial pequeña, algo similar a lo que se quiere hacer en la Luna. Su construcción comenzaría a en el 2023 y podría tener una duración de 3 años.
A su vez, la NASA también ha estado trabajando en la creación del cohete Transporte al Espacio Profundo, el cual podría llevar a los primeros humanos a Marte. Este vehículo aeroespacial tiene previsto realizar sus primeras pruebas en el 2029 para afinar los detalles para su primera misión tripulada a Marte.
Abandonar la Tierra es prioridad
Stephen Hawking creía que la única esperanza para sobrevivir como especie era abandonar la Tierra. Crédito: pxfuel.com
Cada año aparece un nuevo descubrimiento en Marte que nos lleva a pensar en las posibilidades de su terraformación.
Se sabe que en el planeta Rojo hay hielo que se pueden usar para extraer oxígeno e hidrógeno, algo esencial para los colonos. Los ingenieros y geólogos trabajan en encontrar los mejores refugios para protegerse de la radiación y las bajas temperaturas.
Sin embargo, todos estos esfuerzos no son un simple capricho para demostrar que nuestra especie está lo suficientemente avanzada como para conquistar otros planetas.
Así lo hace saber Robert Zubrin, ingeniero aeroespacial y fundador de Mars Society, uno de los principales defensores de la construcción de bases permanentes marcianas para evitar el apocalipsis climático en la Tierra.
Zubrin se ha convertido en el consejero de varios gobiernos y corporaciones espaciales en el tema de la colonización, alegando que las próximas misiones a Marte deben ser permanentes, a pesar de que algunos colonos puedan fallecer.
Cuando se le critica, asegura que este viaje es como la vida misma, habrá dificultades y pérdidas, pero de ellas se aprenderá y la experiencia quedará, como en todo. Esa es la única forma de evitar el desastre que se nos viene en las próximas décadas.
Apocalipsis climático
El apocalipsis climático parece inevitable. Crédito: Chris LeBoutillier / Pixabay
Stephen Hawking declaró, junto a Buzz Aldrin, Charlie Duke y Harrison Schmitt, al igual otros científicos de diferentes ramas, sobre el futuro de la humanidad y la Tierra.
La inmensa mayoría coincidió con Hawking, cuando este abogó por huir de la Tierra como único método de supervivencia a la crisis ecológica que se nos avecina.
Sus palabras textuales fueron las siguientes:
“No tenemos otra opción: emigrar o morir. No hay futuro para nosotros si no colonizamos el espacio. Debemos salir de la Tierra”.
La destrucción como un proceso natural
La destrucción del planeta es un proceso natural en el desarrollo de cualquier civilización. Crédito: Pete Linforth / Pixabay
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Hawking estaba convencido que el desarrollo de una civilización implicaba la destrucción del medio en el que se desarrollan.
Es por esa razón que aquellas civilizaciones que consiguen «emigrar» de su planeta terminarían sobreviviendo.
Para Hawking, el mundo poco a poco se va volviendo demasiado pequeño para la civilización, los recursos naturales se están explotando a un ritmo frenético, además, aseguró que el cambio climático y la extinción masiva de especies es evidencia de las capacidades destructivas innatas de cualquier civilización desarrollada.
Pero también estaba totalmente consciente de que llevar a la civilización a otro planeta no es una tarea sencilla y existen grandes posibilidades de que el fracaso sea seguro.
Es evidente que la humanidad, mientras más se desarrolle, más recursos consumirá del planeta, es por esa razón que, posiblemente, nuestra única forma de sobrevivir en el tiempo como especie sea colonizar otros mundos. ¿Marte será el primero?
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