Un físico de plasma ha lanzado una preocupante advertencia: los satélites de la compañía de Elon Musk podrían estar dañando el campo magnético terrestre. Restos de satélites muertos y otros desechos se queman constantemente al caer fuera de la órbita terrestre.

La sabiduría convencional dice que destruir toda esa basura espacial es bueno, porque mantiene la órbita menos abarrotada. Pero puede tener efectos nocivos en el campo magnético de nuestro planeta, como sostiene en un nuevo ensayo publicado en The Guardian la física del plasma y antigua investigadora científica de la Air Force, Sierra Solter, autora de un polémico artículo que aún no ha sido sometido a revisión por pares.

Empresas como SpaceX, de Elon Musk, están poniendo en órbita miles de satélites, a los que pronto seguirán decenas de miles más, a medida que crece el interés por la industria espacial privada y el turismo espacial.

Pero que los satélites retirados se quemen en la atmósfera terrestre podría tener efectos desastrosos para nuestro planeta, al alterar el plasma que forma una coraza protectora a su alrededor, protegiendo a la humanidad de radiaciones nocivas.

Solter escribió en su estudio:

“Después de estudiar el problema durante más de un año, no tengo ninguna duda de que la inmensidad de esta contaminación va a perturbar nuestro delicado entorno de plasma de una manera u otra. El gran dinero en “’empresas espaciales comerciales’ podría impedirnos ‘discutir esta crisis potencial'”.

¿Quemar la basura espacial es dañino para el campo magnético?

Empresas como SpaceX han argumentado durante mucho tiempo que los satélites se queman durante la reentrada en la atmósfera terrestre es un proceso inofensivo. Solter, sin embargo, cree que esta práctica libera enormes cantidades de ceniza metálica, más que “el valor de una Torre Eiffel” al año, directamente a la ionósfera.

Crédito de imagen: SpaceX

Estas cenizas, especialmente las partículas de aluminio, podrían causar estragos en la capa de ozono de la atmósfera, o incluso abrir nuevos agujeros en ella, dejando a la humanidad expuesta en tierra firme.

Solter argumenta en su artículo:

“Si todos estos materiales conductores se acumulan en una enorme capa de basura, podrían atrapar o desviar todo o parte de nuestro campo magnético. La Tierra es una bola imantada que estamos rodeando de basura metálica que se mueve rápidamente”.

Solter agregó:

“Gente como Elon Musk y Jeff Bezos afirman repetidamente que el espacio es la clave para la longevidad humana. Pero, ¿y si fuera lo contrario? Y si la industria espacial es el medio para la desaparición de nuestro pálido punto azul?.

Hasta que se estudie más a fondo esta contaminación, todos deberíamos reconsiderar el Internet por satélite”.

La Tierra en peligro por intereses multimillonarios

Nuestra magnetosfera nos mantiene vivos. Debería protegerse como entorno terrestre. En cambio, lo estamos llenando de desechos electrónicos para que los multimillonarios puedan intercambiar señales electromagnéticas por dólares que realmente no necesitan.

“Las empresas espaciales deben dejar de lanzar satélites si no pueden proporcionar estudios que demuestren que su contaminación no dañará la estratosfera y la magnetosfera. Hasta que se estudie más a fondo esta contaminación, todos deberíamos reconsiderar la conexión a Internet por satélite”, argumenta Solter.

Fuente: The Guardian

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