El conocido escritor y conferencista de nacionalidad estadounidense Nicholas G. Carr, ganador de un betseller de The New York Times y nominado en el 2011 para un premio Pulitzer; ha sido protagonista de una polémica bastante controversial. En ella afirma que a través del tiempo, los humanos nos hemos convertido en menos inteligentes a causa del Internet y los avances de la tecnología.
En una entrevista otorgada a la cadena de noticias BBC Mundo, Carr dio su opinión acerca de cómo en la actualidad no solo se cumplieron sus predicciones; sino, que superó por mucho sus expectativas.
«The shallows: what the Internet is doing to our brains», fue el escrito que lo catapultó como uno de los principales adversarios del Internet; y al analizar luego de 10 años sus ideas, destacan varios puntos importantes. Estos confirman su predicción hecha tiempo atrás.
La tecnología nos vuelve menos inteligentes con el paso del tiempo ¿Por qué?
El no mantener ejercitado nuestro cerebro, hace que seamos menos inteligentes perdiendo habilidades. El empleo excesivo de la tecnología, para cualquier necesidad, hace del ser humano una persona menos capaz mentalmente. Afirma que el empleo de tecnologías afecta la memoria, el desarrollo para procesar la información y la concentración.
En el tiempo que Carr evaluó los aspectos negativos de la tecnología en las personas, no habían tantos estudios como en la actualidad. Considera que en cosas tan sencillas como la capacidad de reaccionar o mantener un diálogo inteligente, es complicado si se lleva un teléfono todo el tiempo.
La mente se dispersa constantemente pensando en el teléfono. Nos distrae de nuestras tareas diarias. Nuestro mundo empieza a girar en torno a la tecnología, dejándonos envueltos en una red.
Al navegar por Internet la información nos llega fracturada, incompleta y por porciones. El bombardeo llega con imágenes, videos, audios, gif y textos. En el momento de adquirir la información, se generan interrupciones constantes de publicidad, alertas, y notificaciones.
Los humanos se habitúan, adaptándose a su entorno
Este tipo de recopilación de información nos acostumbra a eso, a tomar los datos por pedazos y no nos permite concentrarnos y enfocarnos en el tema. Para Carr este punto es muy delicado y de gravedad; ya que sin darnos cuenta estamos perdiendo la capacidad de análisis y de desarrollar pensamientos profundos, que vienen inherentes en cada individuo.
Este problema no solo ha sido percibido por Carr, si bien es de los pioneros en levantar la voz. Hace una década muchos lo vieron exagerado y lo cuestionaron. Ahora son más los que están de acuerdo con su preocupación. Sin embargo, aunque nos percatemos del problema, es difícil salir de esa dependencia tecnológica.
Redes sociales e Internet, hacen que seamos menos inteligentes
La manipulación de las gigantescas corporaciones tecnológicas, para que veamos exactamente lo que ellos nos quieran proporcionar, tienen muy pocos límites. Nos estudia y nos proporciona lo que deseamos ver, creándonos adicciones.
Las social networks han demostrado ser perjudiciales hasta cierto punto. En el área informativa son muy peligrosas, pues está llena de información falsa. Además, nos hace pensar de una forma más emocional que racional.
La pandemia reforzó la dependencia tecnológica. Y aunque es real que ha representado un gran aporte para la comunicación, información y para conectarnos con nuestros familiares, trabajos y escuelas; también es real que nos han hecho más dependientes.
¿Seremos menos inteligentes en el futuro?
Cuando explotó la era de Internet se esperaba que el grado de agudeza intelectual sería paulatinamente más alta; no obstante, los indicadores han demostrado una baja inteligencia en la población a través de los años.
Estamos tomando otra dirección, sin darnos cuenta. Nos estamos limitando intelectualmente para pensar y por ende menos inteligentes en nuestras capacidades. Aunque es notable que seamos más conscientes de este hecho, y eso resulta esperanzador, no parece que el escenario cambie en un futuro cercano.
Por: Mibelis Ramos, redactora de CodigoOculto.com
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