Observadores del cielo de todo el mundo se vieron sorprendidos el miércoles por la colisión con la atmósfera terrestre de un asteroide no detectado hasta entonces.
Se trataba de un asteroide, de un metro de ancho, y fue avistado sólo ocho horas antes de que ardiera sobre Filipinas en una espectacular bola de fuego.
Afortunadamente, el asteroide, llamado 2024 RW1, era demasiado pequeño para causar daños.
Científicos de todo el mundo se vieron sorprendidos el miércoles por la colisión de un asteroide con la atmósfera terrestre sobre Filipinas. Crédito de imagen: AP
Sin embargo, su repentina llegada es un duro recordatorio de los peligros que acechan en nuestro sistema solar.
Desde el llamado “asteroide de San Valentín” hasta las mortíferas rocas espaciales de casi un kilómetro de ancho, los expertos advierten de que varios asteroides corren el riesgo de estrellarse contra la Tierra.
La colisión de asteroides con la Tierra no es ni mucho menos un acontecimiento infrecuente.
Here’s how Asteroid RW1 looks like from Gonzaga, Cagayan, Philippines. Best shot so far!! 😍 pic.twitter.com/eYgQsHqxFP
— Raymon Dullana (@raymongdullana) September 4, 2024
Decenas de toneladas de material meteórico cae cada día
De hecho, la NASA calcula que cada día caen sobre la Tierra unas 48,5 toneladas de material meteórico.
Sin embargo, la gran mayoría de estos objetos simplemente se queman en la atmósfera para producir las luces parpadeantes que reconocemos como estrellas fugaces.
Los objetos lo suficientemente grandes como para atravesar la atmósfera y colisionar con la Tierra son mucho más raros y no suelen entrar en la órbita terrestre.
Por supuesto, que las colisiones de asteroides sean poco probables no significa que sean imposibles, y la Tierra ya lleva las cicatrices de varios sucesos de este tipo.
Hace 66 millones de años, un asteroide de 9.65 km de ancho se estrelló contra la península mexicana de Yucatán, aniquilando a los dinosaurios y dejando tras de sí un cráter de 185 km de ancho.
Incluso las rocas más pequeñas pueden tener un impacto devastador, como demostró el meteorito de Cheliábinsk, un asteroide de 18 m de ancho que explotó sobre Rusia en 2013.
A pesar de ser cientos de veces más pequeño que el meteorito que mató a los dinosaurios, la onda expansiva resultante hirió a 1.500 personas y dañó 7.300 edificios.
Debido a estos riesgos, la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA) operan programas destinados a identificar, categorizar y rastrear los llamados Objetos Cercanos a la Tierra (NEO).
En la actualidad, la ESA tiene 1.634 objetos cercanos a la Tierra en su “lista de riesgo”, lo que significa que existe una probabilidad no nula de que estos objetos impacten contra la Tierra.
𝗪𝗘𝗟𝗖𝗢𝗠𝗘 𝗧𝗢 𝗘𝗔𝗥𝗧𝗛, 𝗔𝗦𝗧𝗘𝗥𝗢𝗜𝗗 𝟮𝟬𝟮𝟰 𝗥𝗪𝟭! ☄️
Here’s a clear shot of the much-awaited small asteroid 2024 RW1 (#CAQTDL2) burning bright into a greenish ‘fireball’ over Lal-lo, Cagayan around 12:39 AM PhST, 05 September 2024. Did you see it too? 😊
— ScienceKonek (@sciencekonek) September 4, 2024
Escala de Torino
Sin embargo, actualmente ningún asteroide está clasificado por encima de uno en la Escala de Torino, una tabla que va de 0 (no chocará con la Tierra) a 10 (chocará con la Tierra y será catastrófico).
1. Bennu
Descubierto en septiembre de 1999, el asteroide Bennu se considera actualmente uno de los mayores riesgos para la Tierra.
Con 0.49 km de diámetro y 67 millones de toneladas de peso, Bennu es más ancho que el Empire State Building y pesa 200 veces más.
Se considera que el asteroide Bennu (en la imagen) representa la mayor amenaza para la Tierra y podría impactar contra nuestro planeta en los próximos 200 años. Crédito de imagen: NASA
2. 2023 DW – El asteroide de San Valentín
Olvidar los bombones y las flores el día de San Valentín de 2046 podría ser la menor de tus preocupaciones.
Se prevé que el asteroide 2023 DW tenga muchas posibilidades de colisionar con la Tierra el 14 de febrero de 2046, justo a tiempo para arruinar tus planes de citas.
Con 50 metros de diámetro, 2023 DW tiene aproximadamente el mismo tamaño que el asteroide que causó el devastador evento de Cheliábinsk en 2013.
3. 1950 DA
Para que la NASA lo considere un «objeto potencialmente peligroso», debe tener un tamaño de 140 metros y una órbita que lo acerque a 7.5 millones de kilómetros de la órbita de la Tierra alrededor del Sol.
Con 1.3 km de diámetro y 71 millones de toneladas de peso, el asteroide 1950 DA es más de 90 veces mayor.
Esto convierte a 1950 DA en el mayor asteroide con serias posibilidades de colisionar con nuestro planeta.
4. 2023 TL4
Otro asteroide que también tiene potencial destructor de la humanidad es el 2023 TL4.
Tras ser avistado el año pasado, los científicos reconocieron inmediatamente este enorme asteroide como una de las mayores amenazas para la Tierra.
La roca espacial mide 0.33 km de diámetro y se cree que pesa 43 millones de toneladas, más de 4.500 veces el peso de la Torre Eiffel.
5. 2007 FT3
Aunque las probabilidades de que el 2007 FT3 golpee la Tierra son bajas, tiene la desagradable distinción de ser el asteroide con más probabilidades de chocar pronto con la Tierra.
Si tenemos muy mala suerte, este asteroide de 0.34 km podría chocar con la Tierra el 5 de octubre de este año.
Sin embargo, las observaciones actuales de la trayectoria del 2007 FT3 sólo dan una posibilidad entre 11.5 millones.
Las probabilidades de que el asteroide choque con la Tierra el 3 de marzo de 2030 son ligeramente superiores, de una entre 10 millones.
6. 1979 XB
El último objeto con posibilidades de causar graves daños a la Tierra es un asteroide llamado 1979 XB.
Con un diámetro de 0.34 km y un peso de 49 millones de toneladas, si 1979 XB chocara contra la Tierra sería capaz de destruir una ciudad entera.
Avistado por primera vez en 1979, los científicos creen que este asteroide tiene actualmente una probabilidad entre 1.8 millones de chocar contra la Tierra.
¿Qué peligro corremos realmente?
A pesar de lo aterradoras que puedan parecer estas cifras, la mayoría de los científicos coinciden en que la Tierra está a salvo por ahora.
El Dr. Greg Brown, experto en astronomía pública del Royal Observatory Greenwich, dijo en un comunicado:
“A día de hoy, no se conoce ningún asteroide que sea lo suficientemente grande como para ser motivo de preocupación y que tenga una probabilidad considerable de impactar contra la Tierra”.
Si algún asteroide impacta contra la Tierra, es probable que caiga sobre el océano o sobre las regiones remotas que aún constituyen la mayor parte de la superficie del planeta.
Esto hace que el riesgo de que un impacto meteórico provoque una devastación grave sea extremadamente bajo. Sin embargo, esto no significa que la Tierra esté completamente a salvo.
Aunque los grandes impactos son muy raros, el Dr. Brown señala que “los impactos de asteroides son un caso de cuándo, no de si”.
Por ello, las agencias espaciales de todo el mundo invierten grandes sumas en proyectos de defensa planetaria.
Entre ellos, la misión DART de la ESA, que en 2022 consiguió desviar de su trayectoria a un asteroide con un satélite kamikaze.
El Dr. Brown añade:
“Es importante que sigamos mejorando nuestra capacidad para rastrear estos objetos y trabajemos en medidas para protegernos en caso de que se produzcan.”
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