Japón es un país enriquecido de leyendas espeluznantes que son protagonizadas por los famosos «Yokai», seres sobrenaturales. Sin embargo, entre las leyendas más reconocidas están la Kushisake-Onna (mujer de la boca cortada) y Teke Teke (la niña que camina con los codos), entre otros. Pero, hoy te mostraremos todo sobre la horrorosa leyenda del Jubokko.
La leyenda del Jubokko
Hay creencias que suelen atribuir ciertos poderes a los árboles. En la cultura japonesa, la leyenda del Jubokko cuenta que estos son criaturas espeluznantes que solo tienen sed de sangre humana y se les asocia a una especie vampírica mitológica en un mundo natural.
Los Jubokko tienen gran analogía con los árboles habituales, son de difícil distinción ante el resto de especies que abundan los verdes paisajes. Es necesario ser muy detallista para visualizar los rasgos distintivos que los hace terroríficos. Al parecer, un día fueron arboles ordinarios, pero la sangre que absorbieron por medio de sus raíces los transformó en yokai desarrollándoles una adicción.
Según la creencia japonesa cualquier árbol podría ser una de estas criaturas. La leyenda del Jubokko cuenta que este era un árbol ordinario y corriente que nació, creció y se desarrolló según la naturaleza. Luego, un atroz acontecimiento sucedió para convertirlo en una figura sedienta de sangre humana.
Por algún trágico motivo como una masacre, asesinato masivo u otro, la tierra en donde se encontraba este árbol permanecía empapada de sangre. Por lo tanto, el árbol la bebía por medio de sus raíces causando que se transformara en una criatura espantosa. Así el árbol se convirtió en un Jubokko, un toxicómano de la sangre, y a través de ella lograba obtener el sustento necesario.
Conocer para prevenir
Basándonos en la cultura japonesa se cree que el Jubokko aparece en lugares que fueron campos de guerra y que han dejado grandes cantidades de muertos. No obstante, cualquier árbol podría transformarse en un Jubokko, por lo tanto hay que ser muy cuidadosos.
La apariencia de estas criaturas es semejante a la de cualquier árbol. Por lo que sería difícil poder identificar a alguno de ellos. Sin embargo, existen ciertas características que nos permiten identificar a este espeluznante vampiro vegetal. Entre ellas están:
- Las ramas del árbol son similares a los brazos. Pareciesen tener garras que les ayuda a agarrar objetos.
- En la parte inferior del árbol se notan extravagantes formaciones. Estos son los huesos humanos pertenecientes a las personas que fueron interceptadas por él.
Así que si pasas por un lugar y alcanzas a ver en el paisaje estas peculiaridades, lo mejor es huir. Ya que se puede tratar de un Jubokko y probablemente seas su próxima víctima, dice la leyenda.
Ataque escalofriante a sus víctimas
La leyenda del Jubokko dice que estos con su aspecto ingenuo esperan a que los humanos despistados pasen por debajo de sus terroríficas ramas. Cuando la gente se acerca lo suficiente, estos atacarán atrapándolos con sus largos y dentados brazos. El Jubokko suele elevar a sus víctimas hasta la copa en donde les agujera la piel y absorbe toda la sangre de sus cuerpos.
Una vez que el Jubokko ha absorbido toda la sangre lo deja caer al suelo en donde es devorado por aves, insectos y otros animales. De esta forma, los huesos se amontonan en la tierra hasta secarse y convertirse en polvo. En el momento en que otras personas están cerca para notar las rumas de huesos secos será demasiado tarde para escapar.
Cuenta la leyenda del Jubokko que estas criaturas se mantienen vivas y frondosas gracias al sustento que les provee la sangre humana. Pero, si se logra cortar uno de estos árboles brotaran gotas de sangre en lugar de savia.
El fragmento de un “árbol maldito”
Algunos hierbateros de Japón dicen que un árbol maldito, sea un pino, un abeto o un cerezo, poseen grandes poderes curativos. Muy pocas personas se atreven a desafiar un Jubokko para obtener un fragmento de él ya que es necesario acercarse demasiado y usar el mayor camuflaje posible para lograrlo. Pero, con mucha cautela y suerte se logra salir ileso y con una rama mutilada.
Cualquier médico naturista pagaría una fortuna por esta rama. Aunque no es correcto robar los Jubokko, puesto que por más terroríficos que sean se consideran seres sagrados que merecen el respeto de los mortales.
Escrito por: Mibelis Ramos, redactora de CodigoOculto.com
0 comentarios