Por estos días se acaba de presentar un breve documental, Sechín: guerreros de piedra. El corto, auspiciado por el Ministerio de Cultura del Perú, celebra uno de los descubrimientos andinos más asombrosos, revelando por primera vez, secretos ocultos sobre las llamadas Estelas de Sechín. Propongo al lector ahondar en sus misterios.

Cerro Sechín ¿La Cultura más antigua de América?

“Cerro Sechín es parte de una temprana tradición arquitectónica de grandes edificios del Valle de Casma, una de las más antiguas del Perú, y hasta el momento de América”. Lizardo Tavera Vega. Cerro Sechín.

Fue el incasable arqueólogo peruano Julio Tello, quién en 1937 develó Sechín al mundo. El asombroso sitio se localiza en el departamento de Áncash, provincia de Casma, y a 5 kilómetros del sitio homónimo, y falda norte del Cerro Laguna, a 397 metros sobre el nivel del mar. La zona arqueológica comprende cinco hectáreas.

Uno de los impresionantes grabados descubiertos en Sechín. Cortesía: geschkult.fu-berlin.de

Allí Tello halló un monumental complejo arqueológico, que bautizara como Templo del Cerro Sechín, compuesto de siete estructuras, fabricadas en piedras, barros y adobes cónicas, material típico del llamado Período Precerámico Tardío (3000 a 1800 a.C.).

Para Tello gran defensor de Chavín de Huántar, postulada como la civilización andina más antigua, pensaba, Sechín, era una continuación posterior, aunque dataciones recientes demuestran una antigüedad aún mayor, poniendo en jaque la historia conocida. Pero regresemos a 1937.

Según se narra en Arqueología del Valle del Casma, Tello durante sus exploraciones por aquella región, interrogó a los pobladores si ellos conocían la existencia de piedras grabadas. Grande fue su sorpresa cuando un local de la zona refiriera al estudioso, en su hacienda se hallaban restos líticos pertenecientes a un antiguo mural, ahora abandonado.

Aquel bloque granítico descubría una cabeza humana adornada con cabellos «alborotados», acentuado por un estilizado perfil. Días más tarde de producirse este hallazgo, Tello decide realizar una exploración más profunda del área, encontrando una huaca (sitio sagrado), donde se hallaban más estelas grabadas.

El libro del estudioso peruano Paredes Ruiz, publicado en 1975, que propone a Sechín como epicentro de avanzados conocimientos médicos. Archivo Personal / Débora Goldstern

El importante momento se inmortalizó en estas líneas:

“Las piedras que encontró, estaban semienterradas y alineadas en una de las caras de lo que parecía ser una pequeña plataforma. Con el auxilio de quince obreros, Tello procedió a descubrir ese lado, dejando a la luz una pared formada íntegramente por piedras grabadas. En los días siguientes aparecieron al lado derecho e izquierdo sendos muros con litografía grabada. Alfonsina Barrionuevo. Perú. Una Escuela de Medicina Preincaica.

De ese modo se perfiló la forma del Templo de Cerro Sechín. Un edificio cuadrangular con un muro perimétrico de piedras (todas grabadas), y en el interior varios cuartos y estructuras en adobe, con las paredes pintadas en vivos colores, y representaciones de figuras mitológicas (también pintadas)”.

Con el tiempo casi cuatrocientas estelas serían descubiertas, reflejando escenas que muchos especialistas consideran combates de guerra.

Estela de los guerreros de Sechín, que guarda aún muchos secretos, en cuánta interpretación. Cortesía: andina.pe

Bajo esta visión los grabados más grandes representan guerreros-sacerdotes, y los más pequeños a los enemigos derrotados, cuyos cuerpos aparecen, horriblemente mutilados en señal de triunfo.

Pero existen otras hipótesis, acerca de este bautizado muestrario macabro. Veamos.

Secretos Olvidados de Medicina Preincaica

“Hace unos 2000 años médicos sechines penetraron en ese arcano que es el cuerpo humano. No se sabe qué hubiera pasado de no llegar los españoles, y de haber podido seguir con sus investigaciones”. Alfonsina Barrionuevo. Perú. Una Escuela de Medicina Preincaica, 1998.

En 2008 la misteriosa cultura Sechín conmocionó al mundo al revelarse su antigüedad, remontaba según nuevas dataciones, a 5.500 años, convertida en cifra récord.

Las estelas descubiertas por Julio C. Tello durante mediados del siglo pasado, llevaron a pensar estábamos en presencia de una cultura entregada a la guerra, e incluso la posibilidad de sacrificios humanos en un punto controversial, dividiendo a los historiadores.

Los instructores llegados de Sirio, que según hipótesis de la estudiosa polaca Jadwiga Pasenkiewicz habrían influenciado antiguos tanto de África como de Sudamérica. Cortesía: andina.pe

Existe, sin embargo, una vía alternativa adherida por muchos estudiosos, sugiriendo la cultura Sechín pudo haber desarrollado conocimientos avanzados en medicina anatómica.

En su libro de 1975, Sechín, posible centro de conocimientos anatómicos y de disección en el antiguo Perú, el escritor peruano Víctor M. Paredes Ruiz propone tras su extraordinaria investigación, que en Sechín se practicó la Medicina.

Según narra la investigadora argentina Alfonsina Barrionuevo, en un artículo que dedica a rememorar los estudios de Paredes Ruiz, Perú. Una Escuela de Medicina Preincaica:

“Sechín no sería un templo ni el monumento conmemorativo a una acción trágica -una batalla, por ejemplo-, sino un testimonio de la ciencia y del arte a que llegaron los grupos humanos de la zona en conocimientos anatómico y de disección. En los monolitos aparecen los guerreros triunfantes, orgullosos y marciales. Pero también los vencidos, que murieron en el campo o fueron sacrificados para investigar el interior de sus cuerpos. El investigador supone que actuaron tres grupos de sacerdotes médicos. Una especie de nakiq o degollador; de chaskiq, encargado de entregar el cuerpo o los órganos de las víctimas, y de rakiq o sea el cirujano que se ocupaba de abrirlo y dividirlo para analizar sus diferentes partes”.

Los guerreros de Sechín, y la conexión Dogón

“Amma había proyectado el Universo perfecto. Sin embargo, las empresas de Ogo/Viracocha, quién recorriendo el espacio introdujo un desequilibrio, obligaron al Señor a reorganizar su obra, lo que solo podía alcanzar con el sacrificio supremo del sufrimiento y de la vida. Puesto ante esta grave situación, Amma ordenó a Nommo Titiyayne, atar a la cruz a su hermano gemelo y matarlo. Después de la muerte del mártir, Dios seccionó su cuerpo, lanzando las partes al inmenso vacío donde éstas se transformaron en estrellas, mientras que de la sangre que goteaba se formó la Vía Láctea”. Jadwiga Pasenkiewicz. La Gran Época Olvidada de la Historia Americana, 1997.

Jadwiga Pasenkiewicz fue una antropóloga y destacada corresponsal de la Academia Polaca de Ciencias.

Cultura Sechín. (Wikimedia Commons)

Durante su vida Pasenkiewicz, se dedicó al estudio de las civilizaciones desaparecidas, desarrollando interesantes teorías sobre el pasado de la Tierra.

Escribió tres trabajos esenciales, Los Soberanos de los Mundos Perdidos. Las Civilizaciones Aeronáuticas del Pasado, 1992, No eran Extraterrestres, 1995, y un tercer libro que ahora vamos a comentar, publicado post mortem.

Se trata de La Gran Época Olvidada de la Historia Americana, 1997. Nos encontramos con una obra inacabada, debido al repentino fallecimiento de su autora. No obstante lectura atrapante.

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Pasenkiewicz plantea como hipótesis, la existencia de una ancestral conexión globalizadora, vinculando en ese proceso, a las culturas andinas y africanas.

Señala especialmente al Perú, como receptor de un legado que guarda inquietantes similitudes con la misteriosa tribu dogón.

Recordemos este pueblo originario de Malí, África, afirmó contar con registros orales de antiguos visitantes extraterrestres, que, en un pasado remoto, habrían descendido desde Sirio.

Representación festiva de Guerreros de Sechín. Cortesía: portaldeturismo.pe

Esta temprana colonización, derivó en el posterior desarrollo de sus conocimientos en astronomía, mitología, y edificación religiosa.

Los dogones llaman a estos viajeros sus instructores. Pasenkiewicz intuyó parte de esta correspondencia tenía a Sechín, como uno de sus puntos importantes, y donde estos mitos florecieron.

Escribe:

“Todo parece indicar que, en tiempos antiguos, en el territorio del Perú de hoy, fue edificado un gran santuario el de Sechín, dedicado a la difusión de la parte del culto de Amma, en el que se narra el seccionamiento del cuerpo de Nommo y de su dispersión. El templo, situado a 4 km al este de la confluencia de los ríos Casma y Sechín, no lejos del Océano Pacífico, actuaba también como escuela de anatomía y astrología, porque abundan la exposición de varios cuerpos cortados, y de sus órganos, para enseñar a los estudiantes su rol .y funcionamiento. Se debía igualmente pronosticar en el mismo lugar, la suerte de los enfermos y predecir su porvenir”.

Desde la lejana África los dogones supieron representar sus órganos en grabados aún existentes, como bien detalla Pasenkiewicz en su excepcional investigación, que demuestra civilizaciones pasadas fueron parte de un mismo proceso. Hasta Aquí.

Conclusión

Hace más de cinco mil años una maravillosa cultura llamada Sechín se elevó desde el Perú, poseedora de notables conocimientos, y cuyo estudio aún continúa. Continuará.

Bibliografía

Libros:

• Paredes Ruiz, Víctor M. Sechín, posible centro de conocimientos anatómicos y de disección en el antiguo Perú. Buenos Aires: Zorritos, 1975.
• Pasenkiewicz, Jadwiga. La Gran Época Olvidada de la Historia Americana. Buenos Aires: Almagesto, 1997.

Sitios web:

• ABC Internacional
  Jsutel, César. Perú-Sechín. Guerreros de una cultura desconocida.
  https://www.google.com/amp/s/www.abc.es/internacional/abci-peru-sechin-guerreros-cultura-desconocida-200812070300-911753203040_noticia_amp.html
• Arqueología del Perú
  Tavera Vega, Lizardo. Cerro Sechín.
  https://www.arqueologiadelperu.com.ar/cerrosechin.htm
• Gabriel Bernart
  Cultura Sechín.
  http://www.gabrielbernat.es/peru/preinca/cultpreincaicas/formativo/SECHIN/sechin.html
• La Nación
  Barrionuevo, Alfonsina. Perú. Una escuela de medicina preincaica.
  https://www.google.com/amp/s/www.lanacion.com.ar/turismo/viajes/una-escuela-de-medicina-preincaica-nid205797/%3foutputType=amp

Artículo escrito por: Débora Godstern, colaboradora de CodigoOculto.com