Cuando los tesoros mayas apenas estaban siendo descubiertos, un extraño documento cayó en manos de un millonario aficionado. El Códice Grolier, como sería bautizado tiempo después, considerado como el libro más antiguo de América.
En una época donde la arqueología no había tomado el control de las ruinas de las civilizaciones antiguas en América, un grupo de saqueadores había dado con muchos tesoros mayas.
Para venderlos, contactaron al millonario aficionado mexicano, el famoso coleccionista Josué Sáenz, y lo llevaron a la selva del sureste de México.
Una vez en el lugar se le entregaron seis piezas, donde resaltaba un extraño documento que inmediatamente llamó su atención. El extraño libro contaba con 10 páginas de ilustraciones mayas que mencionaban rituales y un calendario que indicaba la trayectoria de Venus, mejor conocida para ellos como «La estrella de la mañana».
El documento sería bautizado como el Códice Grolier y sus análisis llevarían a pensar a muchos expertos que se trata del libro más antiguo de América.
El Códice Grolier ¿El libro más antiguo de América?
El Códice se encontró, ya que lo compró el coleccionista millonario Josué Sáenz.
Durante muchos años se creyó que el libro era falso, dado que la historia de su descubrimiento, así como el club Grolier a donde fue llevado, sonaba muy «fantástico». Es gracias a este club con sede en Nueva York que obtiene su nombre.
La misma iconografía del códice ya levantaba sospechas, sin embargo, una gran investigación en la Universidad Brown, Harvard, Yale y California-Riverside, concluyeron en el 2016 que, no solo es auténtico, sino que tiene más de 750 años.
Así, el documento pasó a ser el más antiguo de los cuatro códices mayas, además de convertirse en el manuscrito nativo más antiguo de América, de acuerdo a Michael D. Coe, uno de los principales investigadores.
Este cuarto códice maya de 10 páginas, aunque se cree que originalmente eran 20, posee ilustraciones iconográficas de rituales y un calendario de Venus.
Se creó cuando grandes ciudades como Chichén Itzá y Tula se encontraban en sus últimos años. Su autor, según expertos, fue un escriba que estaba trabajando en tiempos complicados.
El códice cuenta sobre una época desconocida sobre los mayas, durante el siglo XIII, una época complicada y turbia para la civilización. Lo complicado que era para los sacerdotes o escribas, no encontraban en las grandes ciudades poder hacer su trabajo.
Como todos los códices, este manuscrito se creó con la intención de ayudar a los sacerdotes con la adivinación y explica las prácticas rituales que se debían emplear. De la misma forma, expone las decisiones correctas sobre las guerras.
Verdadero o falso
Aún existe escepticismo sobre la veracidad del códice.
Baltazar Brito, investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia Mexicana (INAH), asegura que las dudas sobre el Códice Grolier se centran especialmente en su antigüedad y la lógica de su escritura.
Brito cree que a pesar de que existe mucho interés por el documento, nadie ha podido decir a ciencia cierta si pertenece a la época antigua, prehispánica o no.
Sin embargo, la Universidad de Brown volvió a examinarlo con sumo cuidado para despejar duda, concluyendo que el papel usado es papel amate, el cual pertenece al siglo XIII, según las pruebas de carbono-14.
Hasta el momento continúa habiendo mucho escepticismo, especialmente en si ese es o no el papel original. Además, aseguran que la iconografía es «sospechosa».
Stephen Houston, líder de la investigación, cree que es prácticamente imposible falsificar ilustraciones hecha por los mayas, al menos, por estos tres motivos importantes:
- El falsificador tendría que ser un gran conocedor de la existencia de los dioses, los cuales no se descubrieron hasta 1964.
- Tendría que saber reproducir la técnica exacta para crear el azul maya, sintetizado en un laboratorio apenas en 1980.
- Y por último, debió tener a la mano una gran cantidad de recursos y conocimientos del mundo maya que se conocieron muchos años después.
Códice Grolier. Crédito: Enrico Ferorelli
Aun así, el arqueólogo Brito asegura que el escepticismo es válido, o al menos hasta que pueda realizarse una investigación propia.
Lo único cierto es que, hasta el momento, el Códice Grolier es considerado como uno de esos documentos «extraños», que deben resguardarse con toda la seguridad posible para evitar daños.
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El valor que podría tener para la cultura maya podría ser mucho mayor que el de ser el documento más antiguo de América para los expertos estadounidenses.
De ser cierto, podríamos estar en presencia de un documento sumamente antiguo y que nos revela sucesos desconocidos de la época maya. Un tesoro único y sin precedente alguno.
¿Se podrá conseguir este libro antiguo? ¿Donde y como?. Muchas gracias por respuesta. Saludos desde Lima Perú. Julio