Aunque la Tierra, Marte y Titán, una luna de Saturno, se encuentran muy alejados entre sí, tienen una gran cantidad de características en común, y ahora una más puede ser agregada a la lista.

Mediante una colección de datos de la desaparecida nave espacial Cassini de la NASA, los científicos han descubierto gigantescas tormentas de polvo en la luna de Saturno. Esto comprueba que Titán es el tercer mundo de nuestro sistema solar en presentar estas características.

Sebastien Rodríguez de la Université Paris Diderot en Francia, dijo en un comunicado:

Ya sabemos eso sobre su geología y el ciclo de hidrocarburos exóticos. Ahora podemos agregar otra analogía con la Tierra y Marte: el ciclo de polvo activo, en el que el polvo orgánico puede elevarse desde grandes campos de dunas alrededor del ecuador de Titán.”

Mediante la observación de imágenes infrarrojas obtenidas por Cassini, los científicos detectaron tres eventos de iluminación inusuales a aproximadamente 10 kilómetros sobre la superficie del ecuador de la luna durante su equinoccio en 2009 y 2010, cuando el Sol atraviesa el ecuador. Los eventos aparecieron sobre las dunas de Titán, y tuvieron una duración de casi cinco semanas, lo que sugiere que se trataban de nubes de polvo.

A pesar de que existía la posibilidad de que se traten de nubes de metano, fueron descartadas debido a que encontraban a muy poca altitud como para relacionarlas. Las observaciones indicaron que los vientos fuertes en Titán levantaron polvo en la superficie.

Compilación de imágenes infrarrojas de Cassini de las presuntas tormentas de polvo. Crédito: NASA/JPL-Caltech/University of Arizona/University Paris Diderot/IPGP

Los fuertes vientos en Titán se verían impulsados por raras tormentas de metano. Estas crean corrientes descendientes produciendo grandes ráfagas.

Los investigadores escribieron en su artículo:

Las ráfagas tienen la mayor probabilidad de ocurrir durante el equinoccio en las regiones ecuatoriales, precisamente cuando y donde posiblemente podamos observar las tormentas de polvo”.

Justamente por esto ha sido difícil que veamos tormentas de polvo en Titán. La luna de Saturno tarda aproximadamente 29.5 años en orbitar el Sol, por lo que solo experimenta un equinoccio cada 14.7 años. Teniendo en cuenta que las tormentas de polvo tienen poca duración, como mínimo 11 horas y como máximo cinco semanas, esto brinda un periodo de tiempo realmente corto para verlas.

Esta animación, basada en imágenes capturadas por la misión Cassini de la NASA durante varios sobrevuelos de Titán en 2009 y 2010, muestra claros puntos brillantes que han sido interpretados como evidencia de tormentas de polvo. Crédito: NASA/JPL-Caltech/University of Arizona/University Paris Diderot/IPGP/S. Rodriguez

Marte ahora está recuperándose de una monstruosa tormenta de polvo que cubrió todo el planeta. La Tierra también experimenta estos fenómenos aunque a menor escala, y ahora Titán se une a la lista «selecta» de mundo activos y cambiantes en su superficie. Titán no es tan diferente de la Tierra como se pensaba.

El estudio científico ha sido publicado en la revista Nature Geoscience.

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