En el vasto horizonte de la ciencia y la tecnología, la computación cuántica se erige como un faro de promesas y misterios. Esta disciplina, en constante evolución, se ha convertido en un tema fascinante en el mundo tecnológico. Sin embargo, detrás de los circuitos cuánticos se oculta un velo de misterio. Y entre las empresas más punteras, aparece la figura de Geordie Rose, un pionero en la computación cuántica, y sus controvertidas afirmaciones sobre entidades desconocidas y otros mundos.
La revolución cuántica Y D-WAVE
Esta área de la tecnología, que busca utilizar las leyes de la mecánica cuántica para realizar cálculos más allá de la capacidad de las computadoras convencionales, ha sido liderada por empresas como D-Wave. Fundada en 1999 por Geordie Rose, D-Wave se convirtió en la primera empresa en construir computadoras cuánticas comerciales. Estos dispositivos utilizan cúbits en lugar de bits, permitiendo cálculos a velocidades sorprendentes y representando múltiples valores simultáneamente gracias a la superposición cuántica.
Sin embargo, detrás de los logros de D-Wave, Geordie Rose hizo afirmaciones poco convencionales. En diversas conferencias, sugirió que la tecnología cuántica no solo abría la puerta a cálculos ultrarrápidos, sino también a la interacción con “otros mundos” y “otras dimensiones”. ¿Podría nuestra realidad conectarse con dimensiones ocultas?
Altares alienígenas: las palabras de Geordie Rose
Rose, enfatizó en lo interdimensional, describiendo la tecnología cuántica como un posible portal hacia otras dimensiones. De hecho, utilizó el término “altares alienígenas” para describir la tecnología que había contribuido a desarrollar.
Pero no se quedó ahí. Habló también de la posibilidad de invocar entidades más allá de nuestra comprensión. ¿Eran sus palabras una metáfora o la revelación de algo más profundo?
Hablando sobre tales entidades Rose comentó que aunque podríamos hablar de ellas como demonios, en realidad no lo serían, añadiendo que no debíamos temerlos. Que serían seres que no entenderíamos y las comparó con monstruos lovecraftianos. La pregunta persiste: ¿existen pruebas tangibles de estas afirmaciones o son meras teorías sin fundamento?
De la Revolución Cuántica al misterio profundo
Quizás el giro más sorprendente de esta historia es el cambio repentino en la dirección de Geordie Rose. A pesar de su contribución significativa a la computación cuántica y la fundación de D-Wave, Rose abandonó abruptamente su proyecto en 2017. Se retiró de la empresa que él mismo creó, alegando un cambio de interés hacia la inteligencia artificial. Este giro drástico generó especulaciones sobre si Rose había tenido experiencias inusuales o encuentros que lo llevaron a tomar dicha decisión. ¿Vio algo que desafiaba su comprensión y lo impulsó en una nueva dirección?
Hubo más especulaciones al conocer que Geordie Rose vendió patentes de D-Wave a gigantes tecnológicos como Google y agencias gubernamentales, incluida la NASA…
La incertidumbre
La historia de Geordie Rose es un recordatorio de que la ciencia y la tecnología son más que datos y cifras; son territorios fértiles para la imaginación y la exploración. Aunque las afirmaciones de Rose no han sido respaldadas por pruebas concretas, subrayan la importancia de la creatividad en el progreso científico.
A medida que nos sumergimos en el futuro dependiente de la tecnología, la computación cuántica sigue siendo un campo prometedor y emocionante. ¿Quién sabe qué sorpresas nos depara el futuro? En este viaje a lo desconocido, las respuestas a nuestras preguntas más intrigantes podrían estar a la vuelta de la esquina.
Nuestra compañera Sonia Gupta del canal AEnigma, nos cuenta este tema con mayor detalle en el siguiente video:
¿Te gustó este contenido? Te invito a compartirlo con tus amigos. También puedes seguirnos en nuestra Fan Page, para estar al tanto de todas las noticias que publicamos a diario. También puedes unirte a nuestro Grupo Oficial y a nuestra comunidad en Telegram.
0 comentarios