Hace muchas décadas un incidente completamente extraordinario fue presenciado por centenares de testigos en Portugal. Un disco luminoso y en movimiento en el cielo dejó pasmados a los espectadores. Algo que puede catalogarse como el suceso paranormal más espectacular de la historia.

En las siguientes líneas, del autor Michael Grosso, podrás conocer mucho más del misterioso evento de Fátima, ocurrido en 1917.

Lo que voy a relatar es para mí definitivamente increíble. No puedo pensar en un misterio más convincente, pero tampoco en una historia con pruebas más contundentes.

Debemos remontarnos a Fátima, Portugal, 13 de octubre de 1917. Aquel día, en una cala de montaña, setenta mil personas se reunieron con la esperanza de presenciar algo milagroso, prometido por una niña que afirmaba comunicarse con la Virgen María. Otros dos niños vieron y se comunicaron con la invisible María. La Señora había prometido un milagro hacía meses y ese día era el día en que dijo que ocurriría. El milagro haría creer a todo el mundo, predijo. Gente de todas partes acudió a ver el espectáculo. Creyentes, curiosos y muchos enemigos hostiles; la prensa mayoritariamente escéptica, progresistas que creían en la ciencia y el materialismo, todos confiados en que no ocurriría nada digno de mención. De hecho, fue gente de kilómetros a la redonda de la sierra de Cova la que presenció lo que estaba a punto de suceder.

Milagro del Sol

Los muchos miles de personas se encontraban en la Cova da Iria, con el cielo lluvioso lloviznando y barro en el suelo, cerca del mediodía, mirando a su alrededor bajo sus paraguas cuando, de repente, la lluvia cesó y las nubes se abrieron al Sol. Fue entonces cuando ocurrió lo que se llamó el “Milagro del Sol“. El Sol pareció entonces empezar a girar y a emanar colores, amarillo, azul, violeta; una luz brillante que de repente se desprendió del cielo y empezó a descender en picado hacia la gente que estaba en el suelo, un espectáculo aterrador que hizo que los testigos lloraran, gritaran y cayeran de rodillas, creyendo que era el fin del mundo. Pero en realidad, esta “rueda de Catalina de fuegos artificiales de colores” (como la describió un testigo), se detuvo justo cuando estaba a punto de caer a tierra e, invirtiendo su trayectoria, salió disparada de nuevo hacia el cielo, pareciendo fundirse con el Sol.

Foto real de los testigos del Milagro del Sol.

De ahí que se hablara del “Milagro del Sol“. Pero toda la manifestación, presenciada por muchos miles de personas, no tenía nada que ver con el Sol. La caída del “Sol” que impresionó y aterrorizó a miles de testigos era una ilusión del Sol, obviamente no el Sol real. El “milagro” fue un espectáculo, una exhibición de algo absolutamente real y observado por miles de personas, inmediatamente perseguido por creyentes y niños para obligar a creer en Dios.

Pero la inferencia a Dios no está garantizada, aunque ciertamente hace posible la creencia. Podemos decir que este “Milagro del Sol” de Fátima es un misterio. El fenómeno puede calificarse ciertamente de milagroso en el sentido estrictamente paranormal de la palabra. Puede ser, diría yo, el fenómeno paranormal más espectacular y convincente de la historia.

Para empezar, la aparición de la Virgen María predice con varios meses de antelación que va a ocurrir algo que hará creer a todo el mundo. La hora y el lugar exactos son predichos por los niños. La luz que se vio en el cielo fue vista y descrita por personas a 50 kilómetros de distancia, casi tocaba el suelo y los árboles, estaba claramente diseñada para sorprender y aterrorizar a la masa de la humanidad en tierra, lo que implica inteligencia y un poder impresionante.

No existe ninguna explicación científica concebible para la aparición, los colores y la trayectoria de este fenómeno luminoso. Llovía intensa y constantemente en la Fosa, donde se encontraban miles de personas; en cuestión de minutos toda la Fosa estaba seca. Se han documentado curaciones inexplicables como resultado de este fenómeno exactamente predicho. Por último, es correcto decir que hubo muchos miles de testigos de toda la serie de acontecimientos, personas de todas las variedades imaginables, desde científicos, escépticos y periodistas hasta simples creyentes y curiosos ordinarios. Todos quedaron boquiabiertos; la cosa ocurrió, fue real y, desde luego, parece un milagro religioso.

Pero resulta que ciertos rasgos de la historia no son sólo parapsicológicos, sino también ovnilógicos. En su libro “El Colegio Invisible“, el investigador de OVNIs Jacques Vallee señala ciertos rasgos de la historia mariana que son similares a los fenómenos OVNI.

Vallee describe con detalle otros fenómenos de visión mariana comúnmente asociados a los OVNIs:

“Los sucesos de Fátima incluyen esferas luminosas, luces de colores extraños, sensación de olas de calor, todas las características físicas comúnmente asociadas a los ovnis. Incluyen incluso la típica ‘hoja que cae’ del disco zigzagueando en el aire. Pero también abarcan curaciones y profecías…” (143)

Una intensa bola de fuego apareció

En 1960, John Haffert publicó un libro en el que describía lo que vieron y sintieron los testigos (“Meet the Witnesses of the Miracle of the Sun“). Cuando esta intensa bola de fuego descendió sobre la gente, cayeron de rodillas, confesando sus pecados, gritando que era el fin del mundo. Un testigo declaró “Veo como el Sol casi sobre mi hombro”, obviamente una ilusión del Sol. Otro testigo describe esta extraña observación:

“En cuanto el ‘Sol’ volvió a su lugar, el viento empezó a soplar muy fuerte, pero los árboles no se movieron” (p. 11).

El propio viento parece haber formado parte de la ilusión.

Fotografía de los testigos del Milagro del Sol de Fátima.

Debo mencionar que muchos testigos dijeron que podían mirar al Sol “sin que sus ojos se dañaran” (42), lo que se explica por el hecho de que no estaban mirando al Sol, o si lo estaban haciendo, era porque estaban mirando un “disco” parecido a un ovni que parecía emanar del Sol.

Un sacerdote, Lorenzo, dijo:

“Con el aspecto de una bola de nieve girando sobre sí misma, (el “Sol”) de repente parecía descender en zigzag, amenazando a la Tierra”.

Otro testigo, Mário Godinho, un ingeniero escéptico, declaró que consiguió ver el Sol:

“Era un disco de vidrio esmerilado iluminado por detrás, que giraba y giraba, y luego daba la impresión de caer.”(56)

Mario , también menciona el hecho de que de repente todo estaba seco. Otra persona describió el “Sol” como la “rueda de una bicicleta” descendiendo.

Un reportero escéptico de O Speculo declaró:

“El Sol nos pareció una placa de plata escarchada . . y entonces se estremeció e hizo un movimiento repentino e inaudible más allá de todas las leyes cósmicas; el Sol parecía bailar literalmente en el cielo”(74).

Huelga decir que no se trataba del Sol, sino de una ilusión del Sol diseñada para aterrorizar a los testigos y convencerles de que se había producido un milagro. Del fenómeno de Fátima se desprende un hecho importante y misterioso: un milagro relacionado con una visión de la Virgen María fue producido de principio a fin por la cosa familiar y conocida que ahora llamamos OVNIs, entidades asociadas a una tecnología que ahora se sabe que baila alrededor de nuestros mejores cazas multimillonarios. Todo este chocante fenómeno nos obliga a reflexionar sobre la conexión entre la religión y la realidad demostrada de la tecnología OVNI.

Michael Grosso, Doctor en Filosofía, es un académico independiente y forma parte de un creciente grupo de estudiosos y pensadores críticos con la visión materialista del mundo imperante. Ha enseñado humanidades y filosofía en el Marymount Manhattan College, la City University de Nueva York y la City University de Nueva Jersey.

Fuente: consciousnessunbound – Autor: Michael Grosso

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