Fue presentado al mundo el año pasado, generando gran polémica debido a sus capacidades: un submarino nuclear ruso que podría generar tsunamis con olas de hasta 100 metros que anularían los sistemas de defensa de EE. UU.
Con la potencia de fuego nuclear capaz de destruir un portaaviones o incluso una ciudad entera, esta es un arma devastadora del arsenal de Vladimir Putin: el submarino más largo del mundo.
Submarino Belgorod 604ft
Se ha informado el submarino Belgorod 604ft está equipado con hasta seis torpedos con armas nucleares, cada uno capaz de transportar ojivas con un poder explosivo de dos megatones, equivalente a dos millones de toneladas de TNT, o más de 130 veces la potencia de la bomba de Hiroshima.
Los expertos temen que los torpedos de 24 metros de largo, denominados Poseidon o Kanyon, puedan detonarse bajo el agua para causar un tsunami radiactivo y amenazar las ciudades costeras con olas de hasta 100 metros de altura.
Incluso los nuevos portaaviones británicos HMS Queen Elizabeth y HMS Prince of Wales, los buques de guerra más grandes jamás construidos para la Royal Navy, no tendrían oportunidad alguna contra los torpedos nucleares, que tienen una velocidad máxima de 129 km/h y un alcance de miles de kilómetros.
Además, la temida arma rusa lleva ocho vehículos submarinos no tripulados (UUV) que pueden operar por varios kilómetros por debajo de las olas para mapear el fondo del océano utilizando un sistema de imágenes de sonar conocido como escaneo lateral, pero también pueden desplegarse para sabotear los cables de Internet y la energía submarina.
El submarino gigante también tiene un minisubmarino de 54 metros atracado debajo. La nave de 25 hombres se puede utilizar para investigación, rescate y operaciones militares especiales.
En lo que se considera un desarrollo siniestro, los comandantes del submarino informarán directamente al presidente Putin en lugar de a los altos mandos navales del país, lo que hará que Belgorod se parezca más a una agencia de inteligencia de aguas profundas que a un submarino convencional.
Torpedos «Poseidón»
Belgorod está bien equipado para operaciones clandestinas y de sabotaje. Sus torpedos nucleares Poseidon también podrían ser un medio muy eficaz para atacar un portaaviones en tiempo de guerra, uno contra el que actualmente no existe defensa.
El Dr. Sidharth Kaushal del Royal United Services Institute, dijo en un comunicado:
“El Belgorod no será parte de la Armada rusa per se, lo que significa que sus acciones encubiertas y agresivas serán efectivamente negables. El submarino parece estar preparado para una guerra de Fuerzas Especiales no atribuible con sus comandantes respondiendo directamente al liderazgo [político] y sin pasar por la estructura de mando naval rusa”.
Se espera que el Belgorod opere en el Ártico y el Atlántico Norte, áreas donde la actividad submarina rusa se ha multiplicado por diez en los últimos años. También ha habido un gran aumento en las aproximaciones rusas a las aguas territoriales del Reino Unido.
Una de sus características más terribles es el llamado «Poseidon», un gran torpedo que puede destruir puertos y ciudades costeras. Además de ello, recorre hasta 10.000 kilómetros a velocidades de entre 110 a 130 km / h.
EE. UU. calificó al nuevo submarino nuclear de Rusia como el «torpedo del apocalipsis».
Putin se refirió al submarino nuclear en su informe anual del 2018, resaltando que esta arma hace prácticamente inútiles al sistema de defensa de misiles del país norteamericano.
Tal como indicaron expertos, este submarino podría realizar operaciones no oficiales, lo que ha llevado a muchos a preguntarse si Belgorod 604ft ya ha sido utilizado en algún incidente ocurrido. No sorprendería saber que tanto Rusia, EE. UU. u otra potencia hayan desplegado armas «extraordinarias» en operaciones clandestinas.
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