La Amazonía está ardiendo y el incendio es tan grave que el abundante humo está bloqueando la luz del Sol y dejando en la oscuridad a algunas regiones.

Nuestro hogar está en llamas, esto es real, no es ningún invento. La selva amazónica está quemándose ante la mirada de políticos, naciones y residentes de países vecinos. La deforestación es la causa de esta desgracia y lamentablemente el gobierno de Brasil ignora por completo estos actos ilegales y hasta incluso parecen ampararlos.

Territorios que comprenden el noroeste de Brasil, Colombia, Perú, Bolivia y otros países de Sudamérica han sufrido una gran cantidad de incendios este año 2019, superando en un 83% a los desastres similares ocurridos en 2018.

Incesantes incendios están devorando terrenos repletos de árboles y con mucha vida animal en la Amazonía. La imagen satelital muestra los lugares donde se están produciendo incendios y además deja ver como la deforestación ha convertido los lugares verdes en desiertos.

De acuerdo a la agencia Reuters, el Instituto Nacional de Investigación Espacial (INPE) ha detectado aproximadamente 9.507 nuevos incendios forestales, concentrados principalmente en la Amazonía, desde el jueves 15 de agosto.

Las imágenes satelitales recientes lanzadas por la NASA también muestran que el humo sofoca las regiones de América del Sur, a medida que avanzan destruyendo árboles y matando animales.

Oscuridad en Sao Paulo

La localidad de Sao Paulo en Brasil se sumió en la oscuridad como resultado de los incendios, ya que el incesante humo que cubrió una distancia de 2.735 kilómetros convirtió el día en noche en la ciudad; según informa CNN.

Diversas imágenes muestran el terrible escenario causado por los incendios forestales en la ciudad de Sao Paulo.

Según el Instituto Nacional de Meteorología (INmet) dijo que la ciudad de Sao Paulo se encuentra envuelta «dentro de una nube».

Helena Balbino, una meteoróloga de Inmet, dijo:

Esto se debe a esta convergencia de masas tan diferentes. El frente frío de la capital, junto con las temperaturas suaves provenientes del océano y el cálido viento del interior, causan esta turbulencia y esto ha bajado el nivel de las nubes. Entonces estamos dentro de una nube”.

La ciudad de Sao Paulo se ha cubierto de humo producto de los incendios producidos en la Amazonía.

Josélia Pegorim, meteoróloga de Climatempo, le dijo a Globo:

El humo no provenía de incendios del estado de Sao Paulo, sino de incendios muy densos y amplios que han estado ocurriendo durante varios días en Rondônia y Bolivia. El frente frío cambió la dirección de los vientos y transportó este humo a Sao Paulo. Aquí en la región del Gran Sao Paulo tuvimos la combinación de este exceso de humedad con el humo, por lo que dio esta apariencia en el cielo”.

Incendios causados

Como resultado de los incendios, Amazonas declaró el estado de emergencia en el sur; además su capital Manaus y Acre, en la frontera con Perú, ha estado en alerta ambiental desde el viernes 16 de agosto.

La selva amazónica es un gran activo en la lucha contra el cambio climático: como una de las mayores reservas de carbono del mundo, ralentiza el ritmo del calentamiento global.

Los incendios solo causan un incremento en el dióxido de carbono en la atmósfera, causante del calentamiento global.

El área no ha sido prolífica para incendios forestales en el pasado, pero debido a un número creciente de sequías y actividades humanas, por ejemplo, los agricultores que deforestan ilegalmente tierras para la cría de ganado, ha provocado un aumento en el número de incendios.

Sin embargo, la estación seca no puede ser la única razón de los incendios forestales, según el investigador del INPE Alberto Setzer.

Según lo informado por Reuters, Setzer dijo:

No hay nada anormal sobre el clima este año o la lluvia en la región amazónica, que está un poco por debajo del promedio. La estación seca crea las condiciones favorables para el uso y la propagación del fuego, pero iniciar un incendio es el trabajo de los humanos, ya sea deliberadamente o por accidente”.

La Amazonía está en llamas y el gobierno de Brasil sigue alentando a la deforestación de dichas tierras. Cortesía: @_climate_crisis

El presidente Jair Bolsonaro despidió recientemente al jefe del INPE, Ricardo Galvao, por condenar los datos de deforestación, alegando que eran inexactos. Desde que asumió el cargo en enero pasado, Bolsonaro prometió desarrollar el Amazonas para la agricultura y la minería.

Bolsonaro además ha criticado los datos de la agencia gubernamental y dice que estos datos solo son «mentiras» que dañan la reputación de Brasil. Mencionando los números de deforestación, dijo en una conferencia de prensa:

Noticias como esta que no coinciden con la verdad causan un gran daño a la imagen de Brasil”.

Bolsonaro no solo es un negador del cambio climático, también alienta a que las industria deforesten la Amazonía y ha tratado de entregar las tierras amazónicas para que sean explotadas.

La alerta por el estado del Amazonas ha ido escalando y a través de Twitter las personas han lanzado una campaña con la etiqueta #PrayforAmazonas para poner el tema en el centro de la discusión y lograr que se adopten medidas para frenar la compleja situación.

Cosas como estas me agobian muchísimo, no estamos haciendo nada para que esto pare.#PrayforAmazonas pic.twitter.com/yIGxoffBN0

— Julia 💚 (@shipesjuls) August 21, 2019

Duele ver como nuestro hogar se quema, como miles de animales están muriendo devorados por las llamas y asfixiados por el humo en este mismo momento, como millones de árboles son aniquilados por los incendios que vienen ocurriendo en la Amazonía. Duele ver la inacción de los políticos ante este drama real, y como piensan en solo obtener un beneficio económico a costas de la muerte de la gran biodiversidad de este importante lugar. Pueden llamarnos catastrofistas e incluso pueden aplicar cualquier adjetivo deseado, pero la verdad es que uno de los últimos pulmones verdes del planeta está muriendo y sino hacemos algo urgente, la humanidad seguirá el mismo rumbo fatal. F.T.

Fuente: Reuters