Un condecorado ex oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos ha lanzado una advertencia aleccionadora sobre la amenaza real que representan los OVNIs.

Robert Salas, ahora de 84 años, afirma haber presenciado fenómenos aéreos no identificados (UAP / FANI) que inutilizaron 10 ojivas nucleares en la base aérea de Malmstrom, en Montana, en 1967, un escalofriante suceso que, según él, “no fue un acto de agresión”, sino una señal deliberada a la humanidad.

Salas dijo:

“En el transcurso de seis meses, hubo 30 misiles nucleares o misiles balísticos intercontinentales que fueron desactivados durante encuentros con OVNIs. No sufrieron daños, solo fueron desconectados temporalmente. Fue un mensaje, no un ataque”.

Salas, que testificó el año pasado ante la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (AARO) del Pentágono, afirmó que la mayor idea errónea del público era que los extraterrestres eran hostiles.

“En un periodo de seis meses, se desactivaron 30 misiles nucleares o misiles balísticos intercontinentales durante encuentros con OVNIs”, declaró Salas. “No sufrieron daños, solo se desactivaron temporalmente. Fue un mensaje, no un ataque”. (En la imagen: Base Aérea Malmstrom). Crédito de imagen: DoD Defense.

“No destruyeron nada. Solo estaban advirtiéndonos que no utilicemos esas armas”

Salas afirmó:

“El Departamento de Defensa parece sugerir que se trata de amenazas para la seguridad nacional. Pero no destruyeron nada. Si hubieran querido, podrían haberlo hecho. Lo que están haciendo es advertirnos: ‘Deshaceos de esas malditas armas'”.

A pesar de las repetidas negativas de los funcionarios, Salas afirmó que el Gobierno de EE. UU. conocía desde hacía tiempo estos incidentes.

Salas dijo:

“Mi testimonio, junto con el del [capitán retirado de la Fuerza Aérea] David Schindele y el [exteniente de la Fuerza Aérea] Robert Jacobs, forma ahora parte del registro histórico oficial del Departamento de Defensa. Pero al público todavía no se le ha dicho la verdad”.

El guionista de televisión y periodista Bryce Zabel, que se unió a Salas en una mesa redonda en la conferencia sobre OVNIs “Contact in the Desert” celebrada en Indian Wells, California, la semana pasada, afirmó que los incidentes no se limitaban a Estados Unidos.

Un condecorado ex oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos ha lanzado una advertencia aleccionadora sobre la amenaza real que representan los OVNIs, y no es lo que la mayoría de la gente podría pensar. En la imagen: Base Aérea Malmstrom, Montana. Crédito de imagen: U.S. Air Force

Zabel, coautor de A.D. After Disclosure: When the Government Finally Reveals the Truth About Alien Contact (A.D. Después de la revelación: cuando el Gobierno finalmente revela la verdad sobre el contacto extraterrestre), dijo en un comunicado:

“Se han producido apagones similares en Rusia, Francia, el Reino Unido, Chile, Japón e incluso Ucrania. En un caso ocurrido en 1982 en la Ucrania soviética, un objeto con forma de platillo flotó sobre una base de misiles y activó las secuencias de lanzamiento de varios misiles balísticos intercontinentales. Se apagaron segundos antes del lanzamiento”.

Un objetivo quirúrgico y selectivo, no una actividad aleatoria

Zabel cree que las repetidas interacciones sugieren “un interés quirúrgico y selectivo, no una actividad aleatoria”, y añade: “Si se tratara de un adversario extranjero, estaríamos en guerra”.

Pero, a diferencia de Salas, está abierto a interpretaciones más siniestras.

Zabel dijo:

“Una teoría es la comunicación indirecta. Otra es la vigilancia. Pero tenemos que considerar la posibilidad más oscura: la preparación del campo de batalla. La recopilación de información para un control futuro. Si nos estuviéramos preparando para intervenir en un conflicto extranjero, primero estudiaríamos sus armas nucleares. Quizás ellos estén haciendo lo mismo”.

Salas, sin embargo, rechaza la narrativa de la amenaza.

Salas dijo:

“No hay pruebas de que estos seres sean enemigos. El verdadero peligro somos nosotros: nuestro propio arsenal nuclear, nuestra falsa sensación de seguridad. La disuasión no es infalible. Si se utiliza incluso una pequeña bomba nuclear, la represalia está garantizada. No hay vuelta atrás”.

El oficial de lanzamiento de misiles balísticos intercontinentales de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, Robert Salas (en la foto de la izquierda, y de joven, a la derecha), testificó ante el Congreso y detalló su encuentro con un disco volador naranja que desactivó 10 ojivas en la base aérea de Malmstrom, Montana, en 1967. Crédito de imagen: Robert Salas

Con al menos nueve países que poseen armas nucleares y otros que podrían unirse a ellos, Salas advirtió:

“Incluso si se utiliza un arma nuclear pequeña, se escalará rápidamente a armas de mayor tamaño… no hay vuelta atrás. Habrá represalias”.

Señaló momentos históricos en los que altos mandos militares estadounidenses, entre ellos los generales MacArthur y Westmoreland, solicitaron permiso para desplegar armas nucleares en Corea y Vietnam.

Zabel se hizo eco de este sentimiento.

“Estamos viendo más filtraciones, más denunciantes, pero hasta que los gobiernos no levanten el velo por completo, seguiremos en la oscuridad”.

Aun así, Salas se mantuvo esperanzado. “He hablado ante el Congreso en México y Brasil”, dijo.

“Necesitamos cooperación global, un frente unido, si queremos entender lo que realmente está pasando”.

Esa sensación de urgencia se ve reforzada por un estudio de 2024 que analiza más de 500 casos bien documentados de ovnis de la Guerra Fría, que concluye:

“Esta inteligencia entiende la física atómica y entiende las armas atómicas”.

El guionista de televisión y periodista Bryce Zabel, que participó junto a Salas en una mesa redonda en la conferencia sobre OVNIs “Contact in the Desert”, afirma que los incidentes no se limitan a los Estados Unidos. Crédito de imagen: Linkedin

Registros históricos muestran patrones

Según los investigadores, estos patrones en los registros históricos de OVNIs también se acompañaron de otra tendencia clara, en la que las aparentes naves comenzaron a aparecer más por la noche que durante el día.

Dirigido por el sargento retirado de la Fuerza Aérea Larry Hancock y el afiliado al Proyecto Galileo de Harvard Ian Porritt, el equipo se centró en informes militares y policiales estadounidenses de entre 1945 y 1975, haciendo hincapié en los casos en los que había radar o múltiples testigos.

En un caso ocurrido el 21 de mayo de 1949, el personal del complejo de producción nuclear de Hanford, en el estado de Washington, avistó un OVNI “plateado y con forma de disco” que sobrevolaba la planta, cuyo reactor B había generado el plutonio utilizado en la primera prueba atómica en Trinity. “Los ovnis eran más rápidos que los aviones a reacción”, señalaron los investigadores de la Fuerza Aérea.

A modo de prueba, el equipo comparó los avistamientos en instalaciones nucleares con los de bases no nucleares y ciudades cercanas, lo que reforzó su hipótesis de que se trataba de una vigilancia deliberada.

“Esta inteligencia comprende el ciclo de desarrollo. Tienen cierto conocimiento contextual de lo que están viendo y de lo que están buscando”, declaró Hancock anteriormente.

[FT: DM]

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Por: CodigoOculto.com