En una sorprendente entrevista, el ex jefe de la oficina del Pentágono encargada de investigar los “fenómenos anómalos no identificados” o UAP ha admitido que muchos de los avistamientos de OVNIs son probablemente de esta Tierra – y de alto secreto.
Sean Kirkpatrick, antiguo director de la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (AARO) del Pentágono, dijo a Peter Bergen, de CNN:
“Hay muchas observaciones de programas estadounidenses reales y avanzados. Pero nada de eso es de naturaleza extraterrestre”.
Proyectos secretos militares
Como Kirkpatrick dijo durante su aparición en el podcast audible de Bergen “In The Room“, muchas de las naves inicialmente no identificadas que la gente ha visto históricamente, desde Roswell hasta esos extraños globos espía chinos, fueron el resultado de diversos proyectos secretos militares, de inteligencia o incluso comerciales.
El veterano funcionario del Departamento de Defensa, que se retiró del servicio gubernamental en diciembre, dijo a Bergen:
“Hay una serie de tecnologías avanzadas que se están comercializando y que la gente no reconoce”.
Hablaron de orbes
Durante mucho tiempo se ha especulado –y se ha confirmado oficialmente– que existen explicaciones militares para los avistamientos de ovnis, y las recientes entrevistas de Kirkpatrick tras dejar la AARO y el Pentágono no han hecho sino confirmar esas sospechas. En su conversación con Bergen, incluso explicó la dinámica de algunos de los avistamientos más extraños de los que tiene constancia.
Kirkpatrick dijo:
“Hay un gran número de personas, pilotos y otros, que usted sabe, han dicho: ‘Hey, vi esta esfera gigante. Tenía un cubo dentro, no lo entiendo, debe ser un extraterrestre’. Bueno, en realidad, no. La próxima generación de drones que se están construyendo son drones esféricos”.
Citando una investigación de la Universidad de Singapur, Kirkpatrick dijo que los extraños objetos con forma de orbe se fabrican colocando cubos dentro de inflables de unos dos metros, “y en todos los lugares donde la esquina del cubo toca la esfera, la funden, la recortan y le ponen, pequeños propulsores”.
Kirkpatrick dijo:
“Con ocho propulsores en una configuración de cubo, puedo maniobrar este avión no tripulado alrededor con mucha precisión, y han probado estos por todas partes”.
Como la mayoría de las revelaciones públicas de la AARO, estas entrevistas de salida muestran que el proyecto se centra mucho más en las amenazas a la seguridad nacional desde la Tierra que en las que pueden venir del espacio exterior, pero eso no hace que lo que hemos aprendido sea menos fascinante.
Fuente: CNN
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Crédito imagen de portada: depositphotos.com
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