¿Son los OVNIs atraídos por las explosiones nucleares? Según un informe de 1957 del Ejército, lo son.
Las detonaciones nucleares liberan enormes cantidades de energía. También desatan una lluvia de rayos gamma, que son muy difíciles de pasar desapercibidos. Los astrónomos ya tienen la tecnología para detectar explosiones nucleares distantes en nuestra galaxia. No hace falta decir que una civilización lo suficientemente avanzada como para dominar el viaje interestelar podría notar fácilmente si hacemos explotar una de estas armas de destrucción masiva.
Los ufólogos a menudo comparan el detonar armas nucleares con la colocación de un cartel que certifica que ahora tenemos la capacidad de destruirnos a nosotros mismos. Si hay extraterrestres manteniendo la paz por ahí, sin duda estarán dispuesto a investigar el asunto.
El 16 de julio de 1945, la humanidad puso en marcha su primer dispositivo nuclear. Teniendo el nombre clave Trinity, el asunto se llevó a cabo en el White Sands Proving Ground en Nuevo México. La operación fue considerada un éxito y el conocimiento adquirido se utilizó posteriormente para lo sucedido en Hiroshima y Nagasaki. La cifra de muertos se contaban por cientos de miles.
Doce años más tarde, el Chicago Tribune publicó un artículo titulado Object Hovers Near A-Bunkers en español: “Objeto se asoma cerca de A-Bunkers”, que describe un objeto luminoso descubierto cerca de los bunkers utilizados durante la primera explosión nuclear.
WHITE SANDS PROVING GROUND, 04 de noviembre, 1957- El Ejército informa hoy que un gran objeto ovalado ‘casi tan brillante como el sol’ fue visto el domingo flotando cerca de bunkers utilizados en la primera explosión de la bomba atómica.
Los avistamientos fueron realizados por dos patrullas de la policía militar con 17 horas de diferencia.
Aproximadamente a las 08.00 horas, uno de los miembros de la patrulla (compuesta por 2 hombres) reporta por radio a su comandante el avistamiento una luz brillante flotando por encima de uno de los bunkers abandonados de la bomba atómica. Los bunkers no contenían en ese momento equipo o municiones que podrían haber atraído la atención de aquel OVNI.
En sus declaraciones por escrito, los especialistas Forest R. Oakes y Charles A. Barlow dijeron que “la gran luz brillante despegó en un ángulo de 45 grados y se fue arriba en el cielo y comenzó a parpadear y luego se apagó.” Poco después, se desvaneció.
La patrulla describió el objeto no identificado como un óvalo aplanado con 200 a 300 pies de largo y además iluminaba toda el área directamente debajo de él. Por desgracia, en el equipamiento de la patrulla no había una cámara.
El nerviosismo de los Jefes de WHITE SANDS deben haber alcanzado un nuevo nivel, ya que este fue el segundo avistamiento en menos de 24 horas.
El incidente anterior había ocurrido a las 03:00 horas, pero esta vez el sitio de la detonación había sido visitado por un OVNI en forma de huevo de aproximadamente el mismo tamaño y características. Fue presenciado por el cabo Glenn H. Toy, soldado de primera clase Wilbanks.
[…] Se dieron cuenta de un objeto muy brillante en el cielo. El objeto descendió hasta estar a 50 yardas por encima de los bunkers de la bomba atómica.
Unos minutos más tarde, Toy, dijo, el objeto se hizo realmente brillante, como el sol, y luego cayó en un ángulo al suelo y salió”
De acuerdo con los dos observadores, el OVNI aterrizó cerca de los antiguos búnkeres cerca de tres millas de donde estaba estacionado el jeep MP. En el momento en que llegaron al lugar de aterrizaje, el objeto despegó y desapareció en el cielo nocturno.
Al día siguiente, el personal de campo de White Sands recorrió la zona en donde estuvo el OVNI en busca de pruebas físicas, pero sus esfuerzos fueron infructuosos.
Foto tomada el 16 de octubre de 1957, en las cercanías de White Sands
Una investigación posterior reveló que un objeto similar había sido visto y fotografiado cerca de White Sands un mes antes.
Y si pensabas que la zona ha perdido su atractivo para los visitantes extraterrestres, eche un vistazo a este vídeo de 1997 que muestra lo que parece ser otro objeto “casi tan brillante como el sol” estrellarse en algún lugar de los desiertos de Nuevo México.
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