Un vídeo viene circulando por Reddit, y muestra a un hombre que pone su mano en metal fundido sin sufrir daños. ¿Se trata de un «superhumano», un vídeo editado? No, ninguna de las anteriores.

En el vídeo (a continuación) se puede ver como un hombre se dirige hacia un vertedero de metal fundido, se acerca y extiende su mano hacia el chorro de metal líquido «al rojo vivo». Pone su mano en repetidas ocasiones, y luego la muestra, pero no ha sufrido quemadura alguna.

Por favor no vaya a intentar esto en casa, solo un experto podría realizarlo.

¿Cómo podemos explicar esto?

No, no son cosas del diablo, se trata probablemente de un efecto de la ciencia.

En el siguiente vídeo podemos apreciar cómo es que funciona el efecto Leidenfrost. Al echar gotas de agua encima de una plancha caliente, estas se mueven hacia los lados y se escapan de la ardiente superficie en lugar de evaporarse al instante. Algo similar ocurre con el vídeo del metal al rojo vivo.

Cuando se deja caer un líquido sobre una placa caliente, la capa inferior de líquido se evapora instantáneamente. Esto deja una capa protectora de gas entre la placa caliente y el resto de la gota de agua, lo que evita el contacto entre los dos y ralentiza la transferencia de calor.

Este mismo efecto es el que evita que el hombre del vídeo sufra quemaduras, al realizar golpes al metal fundido.

Como decíamos, no debe intentar esto en casa. Solo por unos cortos segundos la humedad en la piel hierve al instante, formando una capa protectora y evitando que toque el metal líquido directamente. Esto le permite pasar su mano sin quemarse. Sin embargo, si cometiera un pequeñísimo error y dejara la mano en contacto con el metal fundido por una fracción de segundo más, simplemente ahora estaríamos lamentándolo.

Como ven, no es cuestión de ser valiente, es cuestión de ser inteligente y conocer algunos secretos de la ciencia, secretos que nos hacen ver como «magos» frente a los demás. Después de todo la magia era la ciencia del pasado.