Finalmente la lava expulsada por el volcán de isla La Palma en Canarias ha llegado al mar, generando gran cantidad de gases tóxicos. Hasta ahora no hay certeza sobre cuánto tiempo durará la erupción, aunque se estima un abanico de entre 24 y 84 días.
Este martes ha alcanzado el mar la lava del volcán Cumbre Vieja, en la isla canaria de La Palma (España), después de que entrara en erupción la tarde del pasado domingo 19 de septiembre. Desde entonces, el volcán ha expulsado más de 46 millones de metros cúbicos de lava, que han avanzado poco a poco hacia el Atlántico a más de 1.000 grados centígrados.
A las 11:13 de la noche (hora local) del martes, el área de Seguridad y Emergencias del gobierno de Canarias confirmó que la lava había llegado a la costa de Tazacorte. Minutos después, el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) detalló que la colada de lava tocó el mar de Playa Nueva.
Las autoridades locales instaron a la población que vive en la zona de Tazacorte a resguardarse en el interior de sus viviendas.
La autoridades advirtieron:
“El contacto de la lava con el mar puede generar explosiones y gases nocivos para la salud”.
Se esperaba que los ríos de lava hubieran llegado al mar hace una semana, pero finalmente no lo hicieron debido a que las coladas ralentizaron su ritmo (primero de los 700 metros por hora a los 300) hasta quedar casi paralizadas.
Sin embargo, el aumento de la explosividad del volcán en los últimos días ha dado un nuevo impulso a las lenguas de fuego, debido a que desde entonces el fluido incandescente es más líquido y circula sobre coladas anteriores, es decir, sobre terreno más liso.
En el transcurso de este martes, la lava superó la carretera de La Costa, entró en Tazacorte y se acercó hasta alcanzar el mar poco antes de la medianoche.
La Capitanía Marítima de la #DGMM confirma que sobre las 00.00 horas peninsulares la lava de la #ErupciónLaPalma ha tocado el mar.
Como estaba previsto, el contacto se ha producido en la zona norte de la playa de Los Guirres. 🌋 🌊 pic.twitter.com/mbUXb6ouGG
— Ministerio Transportes, Movilidad y A. Urbana (@mitmagob) September 28, 2021
El Consejo de Ministros ha aprobado la declaración de zona catastrófica para la isla y ha anunciado un paquete de ayudas socioeconómicas, la primera de ellas se concreta en 10,5 millones de euros de ayudas para las familias palmeras que han perdido sus viviendas.
¿Qué sucede cuando la lava llega al mar?
Cuando el magma caliente entra en contacto con el agua del mar se produce un enfriamiento de la lava y comienza a emitirse una mezcla de vapor y gases a la superficie. Posteriormente se acabará sedimentando y formando parte de la propia tierra.
Se espera que el contacto de la lava con el agua del mar, a unos 25 grados centígrados, pueda producir fenómenos explosivos en estos primeros momentos, debido al rápido enfriamiento del fluido caliente. Igualmente, se espera que se generen gases tóxicos, lanzando a la atmósfera partículas muy finas de ácido clorhídrico y de vidrio. Estos gases son peligrosos para la salud, y pueden provocar irritación de ojos y piel y problemas respiratorios.
Es por ello que se recomienda a los vecinos de la zona que mantengan sus casas cerradas y eviten salir y, si no pueden hacerlo, que utilicen mascarillas y gafas. En este contexto, y ante la proximidad de la llegada de la lava al mar, las autoridades de la zona decretaron el confinamiento de varias localidades de la isla: San Borondón, Marina Alta, Marina Baja y La Condesa, ubicadas en la zona costera del municipio de Tazacorte.
De momento, la nube de óxido de azufre emitida por las bocas activas del volcán ya llegó a las costas africanas y a parte del continente europeo, aunque a distancias muy elevadas, lo que la hacen poco visible y prácticamente inocua para la salud de las personas y de la fauna y flora.
Se calcula que la emisión de este gas a la atmósfera es de entre 6.000 y 9.000 toneladas diarias, según la estimación del Instituto Volcanológico de Canarias.
Un millar de viviendas en peligro
El pasado sábado, el cono principal del volcán de Cumbre Vieja sufrió una rotura parcial. Según el geólogo del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), Carlos Lorenzo, se rompió “por la parte suroeste, dejando una colada enorme de bloques muy grandes, desplazándose por la ladera del cono en dirección al mar”, detalló el investigador, y agregó que se puede ver la fractura en imágenes captadas por drones. Es este episodio el que dio un nuevo impulso a las coladas, que desde entonces aumentaron su velocidad.
Nueve días después del inicio de la erupción, las edificaciones afectadas ya ascienden hasta casi 700, mientras se espera que el número todavía aumente sensiblemente, quizás hasta el millar, debido a que hay muchas casas que se encuentran en el cauce de otras de las coladas que se dirigen hacia el mar.
Entre las infraestructuras devoradas por la lengua de fuego se encuentra un colegio, un centro médico, una iglesia, la sede de la asociación de vecinos de Todoque y diversas carreteras e infraestructuras. En total, son ya más de 250 hectáreas las que han sido cubiertas por la lava, mientras que más de 1.300 se encuentran tapizadas por las cenizas del volcán.
En total, cerca de 6.000 personas, del total de 85.000 habitantes que tiene la isla, permanecen evacuadas de la zona circundante al volcán. El grueso fue desplazado el pasado lunes, pero desde entonces se ha producido un goteo de nuevos desalojos: el lunes por la noche los residentes de Tacande, tras la aparición de una nueva boca eruptiva en esa zona; el miércoles los del barrio de Jedey; y el viernes los de los núcleos de Tajuya, Tacande de Arriba y Tacande de Abajo. Otros vecinos, sin embargo, han regresado a sus hogares tras descartarse el peligro.
De acuerdo con el Gobierno de Canarias, el comité científico que le asesora ha recomendado un radio de exclusión de 2 kilómetros en torno a los centros de emisión para minimizar el impacto de piroclastos (los fragmentos sólidos de material volcánico expulsados al aire) y la exposición de gases, además de no acercase a la costa.
El Ilustre Colegio Oficial de Geólogos (ICOG) señaló que “es imposible predecir con exactitud cuánto durará la erupción”. De hecho, anteriores erupciones producidas en La Palma llegaron a durar hasta 84 días. Ahora, los expertos coinciden en que el actual episodio podría durar desde semanas a meses, aunque se estima un abanico de entre 24 y 84 días.
Como lector de CODIGO OCULTO, lo invitamos a unirse a nuestro foro oficial para debatir sobre enigmas, ciencia y actualidad con personas de ideas afines de todo el mundo. ¡Unirse es gratis, regístrese ahora!
0 comentarios