Recientes informes dan cuenta que Corea del Norte ha lazando este jueves un proyectil no identificado hacia Japón, según informó el Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano.
El proyectil recorrió más de 1.000 km y cayó cerca de las aguas territoriales del norte de Japón, en la zona económica exclusiva del país.
Misil balístico intercontinental
El ministro de defensa japonés, Makoto Oniki, dijo que alcanzó una altitud máxima de 6.000 kilómetros y que podría ser un misil balístico intercontinental, el primero que lanza Corea del Norte desde el año 2017.
Corea del Sur reaccionó con simulacros de fuego real de sus propios misiles y amenazó con dirigirlos hacia los puntos de lanzamiento de misiles norcoreanos.
En Bruselas, durante la cumbre del G7, el primer ministro japonés condenó el lanzamiento y dijo que está considerando imponer nuevas sanciones a Pionyang.
La reacción de Japón
El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, describió el lanzamiento como “imprudente”, mientras que el ministro Makoto Oniki, aseguró que el misil había volado durante aproximadamente una hora antes de aterrizar dentro de la zona económica exclusiva (ZEE) de su país, a unos 144 km al oeste de la península de Oshima en Hokkaido, la isla principal más al norte de Japón. No hubo informes de daños a aeronaves o embarcaciones en el área.
Oniki dijo en un comunicado:
“En un momento en que el mundo está lidiando con la invasión rusa de Ucrania, Corea del Norte sigue adelante con lanzamientos que agravan unilateralmente las provocaciones contra la comunidad internacional, lo cual es absolutamente imperdonable”.
Pionyang marca así una cifra récord, de 12 pruebas balísticas lanzadas en lo corrido de 2022. Y el de este jueves 24 de marzo es el primer lanzamiento de capacidad total de los misiles más grandes que haya lanzado Corea del Norte desde 2017.
¿Busca Corea del Norte ser una potencia nuclear?
Esta sería además una señal de que el régimen de Kim Jong-Un ha logrado un progreso significativo en el desarrollo de eventuales armas capaces de lanzar ojivas nucleares hacia cualquier lugar del mundo, incluido EE. UU.
Moon Jae-in, presidente de Corea del Sur, dijo en un comunicado:
“Representa una grave amenaza para la península de Corea, la región y la comunidad internacional”.
Las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas han prohibido todas las pruebas nucleares y de misiles balísticos de Pyongyang y han impuesto sanciones a sus programas de armas.
Los analistas destacan que la frecuencia sin precedentes de las pruebas de misiles hechas por Pionyang este año es una señal clara de que Kim Jong-Un está decidido a consolidar el estatus de su país como potencia nuclear, lo que le permite al líder abordar cualquier futura conversación nuclear con EE. UU. desde una posición de poder.
Pionyang ha llevado a cabo tres pruebas completas de misiles balísticos intercontinentales y la más reciente, en noviembre de 2017, involucró un tipo de misil balístico denominado Hwasong-15. El régimen afirmó en ese momento que el proyectil podía alcanzar todo el territorio de Estados Unidos.
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