Nuestra concepción científica de la vida se ha visto alterada, gracias al descubrimiento de una nueva forma en que las bacterias absorben la luz infrarroja y la convierten en energía. Esto sin duda, tiene el potencial de cambiar la forma en que hemos buscado vida alienígena, hasta ahora.

Es sabido que las plantas utilizan el proceso de la fotosíntesis para producir azúcares mediante el dióxido de carbono y el agua que absorben, para utilizarlo como combustible. Los científicos creían que esto ocurría solamente mediante la luz roja; sin embargo una nuevo estudio realizado por investigadores del Imperial College London ha descubierto un totalmente nuevo proceso de fotosíntesis, que usa luz del espectro infrarrojo.

Bill Rutherford, bioquímico y coautor del estudio, dijo en un comunicado:

La nueva forma de fotosíntesis nos hizo reconsiderar lo que pensábamos que era posible. También cambia la forma en que entendemos los eventos clave en el corazón de la fotosíntesis estándar. Esto es un libro de texto que cambia las cosas”.

Este hallazgo fue posible mediante la investigación de un tipo de algas verdeazuladas que se pueden hallar en áreas sombreadas del Parque Nacional de Yellowstone (EE.UU.), y en rocas de playas de Australia.

La fotosíntesis ocurre debido a un pigmento de color verde, llamado «clorofila-a», y que brinda el color característico a las plantas. Además de las plantas, también algunas bacterias poseen este pigmento. Hasta ahora, los científicos pensaban que existía un «límite rojo» en la fotosíntesis.

Colonia de células donde los colores representan la fotosíntesis impulsada por la clorofila-a y -f. Crédito: Imperial College London

Ahora, con el nuevo estudio, los astrobiólogos han usado el «límite rojo» para evaluar si es posible que organismos biológicos complejos podrían haber prosperado en exoplanetas. Sin embargo, se toparon con algo inesperado.

Los investigadores descubrieron que otro pigmento, clorofila-f, podría ser utilizado por posibles organismos alienígenas para producir la fotosíntesis, incluso sin contar con luz roja.

En el experimento realizado, los científicos utilizaron cianobacterias centro de contenedores con luces infrarrojas.

Sección transversal de una roca de la playa en Heron Island, Australia, que muestra clorofila-f que contiene cianobacterias (banda verde) que crece en la roca, varios milímetros por debajo de la superficie. Crédito: Imperial College London

Andrea Fantuzzi, coautora del estudio, dijo en un comunicado:

Encontrar un tipo de fotosíntesis que funcione más allá del límite rojo cambia nuestra comprensión de los requisitos energéticos de la fotosíntesis”.

Pero este descubrimiento no solo aporta nuevos datos en la búsqueda de vida extraterrestre, también hace posible lograr importantes avances en la ingeniería genética de cultivos, que podrían contribuir en lograr que las plantas vivan en condiciones de poca luz.

Dennis Nürnberg, profesor de ciencias de la vida en el Imperial College de Londres y también coautor del estudio, dijo en un comunicado:

Es sorprendente lo que todavía hay en la naturaleza esperando a ser descubierto”.

El estudio científico ha sido publicado en Science.

Una publicación de CodigoOculto.com – Autor: Fernando T. – Todos los derechos reservados.