Desde el año 2014, tras diversos hallazgos, las autoridades de Egipto han prohibido las excavaciones en bajo las Pirámides de Giza y la Esfinge. Se sabe que allí se encontraron cámaras y habitaciones subterráneas anteriormente desconocidas.
Después de este descubrimiento, la entrada a este lugar quedó estrictamente prohibido y la autorización se emitió solo a tres investigadores extranjeros (coincidencia o no, pero los tres ingresaron al Instituto de Egiptología de El Cairo, es decir, apoyan plenamente la versión académica del origen de este complejo).
¿Hallazgos silenciados?
Sin embargo, hay varios expertos que informan que se encontraban en las mazmorras debajo de dichos edificios. Por ejemplo, el periodista y arqueólogo aficionado italiano Antonio Laprieno planteó la hipótesis de que las arenas tapaban varios pisos de las mazmorras modernas de Egipto. De hecho, la Esfinge y las Pirámides serían solo el pináculo de la creación y debajo de ellas estaría toda la ciudad.
Hay una parábola antigua de los Garamantes (personas que presumiblemente vivieron en Egipto antes que los egipcios) sobre un joven que terminó en una ciudad perdida. Esta historia nos remonta al milenio 14 antes de Cristo.
La historia dice:
“Entonces, el hombre se encontró en una habitación que estaba iluminada por serpientes eléctricas. La luz del Sol no penetró en el interior, pero decenas y cientos de lámparas misteriosas la emitieron. Dentro de cada uno de ellos había una “serpiente solar”. Quizás fueron ellos quienes fueron representados en bajorrelieves en el antiguo Egipto.
Además, ¡había bosques reales en los pisos inferiores de las estructuras! Alguien o algo ha creado un oasis subterráneo. Debajo del suelo había un lago y un río que desembocaba en él. No había un alma aquí, como si todos hubieran abandonado este lugar recientemente.
El joven escuchó un chirrido agudo y vio algo brillante por detrás. Con miedo, corrió a la calle y les dijo a todos que debajo de las pirámides había un verdadero paraíso, solo un monstruo terrible, brillante como una docena de soles, lo protegía”.
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Pirámides de Egipto: un origen diferente
De esta historia, podemos concluir que las Pirámides y la Esfinge no fueron erigidas por personas, al menos no por nuestra civilización. Se cree que los habitantes del desierto fueron los primeros en llegar a este territorio, y luego los egipcios se apropiaron de estos objetos culturales.
El famoso investigador Erich von Daniken cree que en el pasado hubo un paleocontacto entre humanos y extraterrestres. Probablemente, en nuestro planeta, de hecho, hace decenas de miles de años, hubo una civilización desarrollada. Si los humanos fueron sus representantes o no es difícil de responder, pero según la interpretación del especialista suizo, las Pirámides y la Esfinge fueron erigidas por extraterrestres y ese monstruo brillante es un “robot” que brilla con luz de lámparas misteriosas.
Si todo eso existió, ¿dónde está?
Si esto es cierto, y hay toda una ciudad debajo de las pirámides, ¿adónde fueron los habitantes? ¿Por qué, si habían robots vigilantes, fueron descubiertos por especialistas que han estado excavando los pisos inferiores durante más de 7 años?
Para ser honestos, existe un cierto escepticismo sobre las opiniones de varios psíquicos, pero Edgar Cayce predijo muchos eventos diferentes, por lo que se puede confiar en él. Informó que bajo la Esfinge y las Pirámides hay una red de mazmorras entre las que se esconde una Biblioteca de la humanidad antigua, escrita en láminas de oro.
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Lo llamó el “legacy of the Atlanteans and the gods in the North” (en español: “legado de los Atlantes y los dioses del Norte”) (algunos creen que estamos hablando de Atlántida e Hiperbórea). Entonces, bien puede resultar que bajo decenas de metros de arena haya un conocimiento secreto y gran tecnología de civilizaciones hundidas en el olvido.
El egiptólogo francés Jacques Christian dijo que en 1971 él y sus colegas acudieron a un médium en busca de ayuda. Habló de veintiséis guardias de hierro de las mazmorras de Egipto. Cuando se le preguntó más, exclamó que “vio robots reales hechos de hierro dorado“. Están ubicados debajo de la Esfinge a una profundidad de 230 metros, en el piso subterráneo 28, y protegen una nave interestelar de cristal.
En dicha nave, en el septuagésimo milenio antes de Cristo, llegaron a la Tierra los antepasados de la primera casta de dioses, que erigieron tan bellos pináculos culturales. Allí, según el medio, los cuerpos de los extraterrestres yacen en los sarcófagos.
Naturalmente, la mayoría de los egiptólogos y, en general, los científicos son escépticos y materialistas, por lo que nadie creyó en las palabras del médium. ¿Pero quién sabe? ¿Qué pasa si realmente hay robots y una nave espacial de una civilización perdida en nuestro planeta? ¿Es esto cuidadosamente ocultado por las autoridades egipcias ?
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La nota venía bién hasta que metieron en el medio al “medium” . Como es posible que no se halla encontrado ni un ápice de tecnología extraterrestre. como por ejemplo algún material que no se halle en la tabla períodica de los elementos o de alguna aleación que se pueda hacer solo en ausencia de gravedad, como decía Carl Sagan decía en su libro “El mundo y sus demonios”. Al momento solo hipótesis alocadas y sin fundamentos.
Lo unico que diré es que somo o nos hacemos, usteses creen qie si enxontraron tecnología, artefactos o momias que no lea conviene, la darían a conocer al público, ya vieron el video donde llegan unos soldados y abren una rumba y empiezan a morir, porque sale un gas, y despues regresan con trajes especiales y el video se una excavación donde descubren mucho oro con imagenes de Extraterrestres y sarcófagos y que dijieron, que eran falsos, por favor ocultan todo