Son muchos los convencidos de que una ciudad intraterrena se ubicaría bajo el Monte Shasta, aquella enigmática montaña.

Una montaña que emerge de un volcán dormido, ubicada al norte de California, considerado como uno de los lugares más antiguos de América, el Monte Shasta sigue siendo un enigma para la arqueología, llenos de mística y espiritualidad.

Para el año 2500 a.C. el lado norte del Monte Shasta estuvo habitado por tribus que provenían del centro de California.

En esta frontera prevalecían las leyendas y para los Shastas, conocidos también como Sustikas, habitantes de la montaña y de donde viene su nombre, no solo la consideraron su lugar sagrado, sino que ellos creen que en ese punto se dio origen la formación de la Tierra.

De la misma forma, variedad de escuelas espirituales afirman que la montaña Shasta es un cruce de energías que sustentan el equilibrio planetario.

En la actualidad, centenares de personas visitan con frecuencia esta montaña en búsqueda de energía espiritual que les proporciona, paz, salud y consonancia.

Aunque estos acontecimientos causan descontento a las tribus de la región, ya que lo consideran una falta de respeto a sus ancestros y a su lugar sagrado.

La montaña de los Dioses

El Monte Shasta es conocido también como la Montaña de los dioses. Crédito: supercurioso.com

Gente de todo el mundo llega a la montaña en busca de la conexión espiritual, catalogando al lugar como el más poderoso en cuanto a energía se refiere.

Es considerada como un portal dimensional  a otro mundo, la entrada a un mundo bajo la Tierra, y el lugar de iniciación de la misteriosa hermandad blanca.

Para los que conocen la historia, es bueno recordar, que es este el lugar donde Sister Thedra, después de haber estado un tiempo en Perú y Bolivia con la Hermandad de los Siete Rayos, crea una asociación que llevó por nombre «Asociación Sanat Kumara», y fue en este mismo sitio donde  se concentraban para realizar las actividades que los maestros invisibles les indicaban.

Variedad de agrupaciones espirituales se congregan en la montaña y dicen que es el aposento de los maestros ascendidos, algunos dicen que existe una ciudad interna en la montaña que se le conoce como Telos.

Lo que sí es indudable son los constantes fenómenos que ocurren en esta montaña, se dice que se pueden observar luces brillantes a los alrededores, se forman extrañas nubes lenticulares en la cima de nieve, los habitantes del lugar han reportado infinidad de veces la presencia de hombres vestidos con túnicas que caminan secretamente por la nieve.

Es común escuchar a los nativos de la montaña hablar de estas historias desde hace mucho tiempo, así mismo cuentan de una ciudad con habitantes que viven bajo la montaña y que provienen de Mu, el mundo perdido.

Otras leyendas sorprendentes del monte Shasta

Desde extrañas luces y seres humanoides han sido vistos en el Monte Shasta. Crédito: Steve Baxter / Pexels

Son muchos los testimonios sobre avistamientos OVNIs que se presentan allí, siluetas brillantes o humanoides que aparecen inesperadamente y se desvanecen de un momento a otro.

Aurelia Louise Jones es una médium canadiense que afirma que en Shasta se oculta Telos, ya que canalizó la zona bajo la guía del maestro Adama. Otros creen que Telos no es más que una base extraterrestre escondida bajo el monte.

Durante una investigación realizada en el año 1972, por estudiantes de geología de la Universidad de Berkeley California a la cima de la montaña, pudieron constatar que se trata de un volcán inactivo.

Sin embargo, en su informe también aparece la observación por medio de binoculares de 5 hombres vestidos con ropas blancas muy altos de cabellera larga y ondulada que caminaban hasta desaparecer debajo del volcán dormido.

El profesor Edgar Lucin Larkin, quien fue director del observatorio del Monte Lowe de California Meridional, pudo distinguir por medio de telescopio en la parte alta de la montaña Shasta una cúpula brillante con construcciones a su alrededor. El astrónomo aseguraba lo visto y publicó artículos sobre el hecho en el Examiner San Francisco.

En 1984 el libro «A Dweller on Two Planets» de Frederick Oliver, explica sobre los seres que habitan en Monte Shasta, quienes lo invitaron a la ciudad subterránea para poder reseñarlos con detalle.

Según Oliver, estos seres son supervivientes de la Atlántida, tienen naves espaciales que se impulsan por magnetismo y explica además que esta gente puede producir bolas de fuego de colores.

Ciudad de luz en Shasta

Es posible que bajo el Monte Shasta, se encuentre la ciudad milenaria de Telos. Cortesía: Ufo-Spain.com

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Para la física cuántica, el estudio de la existencia de numerosas dimensiones cobra cada vez más fuerza, corroborando lo que se afirma en el esoterismo, solo que es distinto hablar de partículas y ondas que de seres propiamente dichos y que decir de ciudades energéticas.

Para el mundo del esoterismo la creencia de que existen maestros espirituales que por su gran avance, tanto en consciencia como en espiritualidad no mueren sino ascienden, y a su vez se convierten en energía al punto de poder comunicarse a nuestro plano físico, como fue el caso de Jesús.

Para esta teoría, no solo se menciona a un solo ser, sino que hasta una ciudad pudiese ser cambiada a otro plano o realidad por la vibración de sus habitantes o seres y esto es lo que se supone sucede en Shasta y en otros puntos del planeta donde ocurren los extraños avistamientos.

Por ahora, Shasta es uno de esos sitios que se pueden tomar como punto de referencia para entender la historia cósmica, y para poder recordar esas antiguas civilizaciones que no son aceptadas por la ciencia.

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