Escondida bajo milenios de tierra, esta obra no solo ha sorprendido a los expertos, sino que podría alterar la historia como la conocemos.

Aunque al principio solo parecía un pequeño pedazo de roca incrustada en una capa de piedra caliza, se trataba de una reliquia de bronce de 3.6 centímetros (1.4 pulgadas) de largo.

Esta pieza de arte antiguo fue encontrada en la Tumba de un Guerrero de la Edad de Bronce, es decir de hace 3.500 años, en Pylos en Grecia.

Luego de más de un año de trabajo, un grupo de investigadores lograron descubrir una gema intrincadamente tallada: una piedra de sellado de ágata, utilizada para estampar una imagen en arcilla o cera, que los investigadores han calificado como «una de las mejores obras de arte prehistórico griego jamás descubiertas».

Y tal es el asombro causado y la importancia de esta pieza que dicen, podría reescribir la historia del arte griego antiguo.

La reliquia muestra a un guerrero lanzando su espada victoriosamente contra un segundo enemigo, también aparece un primer enemigo, aunque ya derrotado y tirado en el suelo, a sus pies. Ha sido nombrada Pylos Combat Agate.

Esta es la obra de arte antiguo hallada y denominada: Pylos Combat Agate. Crédito: The Department of Classics, University of Cincinnati

El descubrimiento de esta tumba fue realizado en el año 2015, y se trató de un hallazgo espectacular. Se pudo encontrar en ella un esqueleto micénico notablemente intacto, al que llamaron Griffin Warrior debido a que junto a él se halló una placa de marfil tallada con la imagen de un grifo.

La tumba era como dicen «un cofre del tesoro». Se encontraron en ella al menos 1.500 objetos, anillos de oro, vasos de plata, con una espada de oro bordada en el pomo, más de 1.000 cuentas talladas en piedras preciosas, una armadura de bronce, peines de marfil, un collar de oro, y más de 50 sellos de piedra.

La mayoría de los bienes funerarios eran de origen minoico, lo que indica que el intercambio cultural entre los minoicos y los micénicos era más fuerte y más extenso de lo que se pensaba. Además, lo hallado reveló una rica cultura y un profundo conocimiento en arte en la antigüedad.

Los investigadores también recibieron pistas claves acerca de la religión, los valores y los ritos funerarios de la cultura. Por ejemplo, no se encontraron artefactos de arcilla en las tumbas, lo que indica que solo el metal y otros materiales preciosos como el marfil eran apropiados para los bienes funerarios de alto estatus.

A pesar de todos los tesoros hallados, el Pylos Combat Agate ha sido catalogado como un artefacto raro y trascendente, dijeron los investigadores.

Crédito: T. Ross/The Department of Classics, University of Cincinnati

«Lo que es fascinante es que la representación del cuerpo humano está en un nivel de detalle y musculatura que uno no encuentra hasta el período clásico del arte griego 1.000 años después», dijo el investigador Jack Davis de la Universidad de Cincinnati.

«Parece que los minoicos estaban produciendo arte del tipo que nadie nunca imaginó que fueran capaces de producir».

En declaraciones también comentaron: «Demuestra que su habilidad e interés en el arte representacional, en particular el movimiento y la anatomía humana, va más allá de lo que se suponía que era. Combinado con las características estilizadas, eso en sí mismo es simplemente extraordinario».

Crédito: The Department of Classics, University of Cincinnati

¿Por qué este artefacto podría cambiar la historia?

Y por qué decimos que esto podría alterar la historia conocida, pues, según los investigadores manifestaron, la destreza y sofisticación necesarias para realizar tal tallado no tiene comparación con nada de la época. Además, el trabajo es tan detallado que se necesita una fotomicroscopía para verlos correctamente (ver arriba).

Los expertos han determinado que tal destreza debió ser lograda tallando con la ayuda de una lupa, aunque hasta ahora los arqueólogos no han podido encontrar ningún dispositivo de aumento que date de esa época.

Otros misterio es lo que representa esta piedra, aunque es probable que sea una leyenda popular de la época, dijo la investigadora Shari Stocker de la Universidad de Cincinnati.

«Hubiera sido una posesión valiosa y apreciada, que ciertamente es representativa del papel del Griffin Warrior en la sociedad micénica», explicó. «Creo que ciertamente se habría identificado con el héroe representado en el sello».

Aún se desconoce quién era exactamente el Griffin Warrior (Guerrero Griffin), sin embargo será recordado por la contribución que su entierro hizo a la antropología, la arqueología y la historia del arte. El trabajo sobre los artefactos encontrados en su tumba quedarán para la posteridad, y según dijeron los investigadores, hay más sorpresas por delante.

«Este sello debería incluirse en todos los próximos textos de historia del arte, y cambiará la forma en que se ve el arte prehistórico», dijo Stocker.

El análisis completo del Pylos Combat Agate será publicado en la revista Hesperia.

Este artículo fue publicado por CodigoOculto.com