Uno de los mayores misterios que todavía en la actualidad sigue sin ser resuelto es sobre quienes fueron los primeros en llegar a América. La historia que todos conocemos afirma que Colón fue quien descubrió el “Nuevo Mundo”. Pero es posible que esta teoría no sea correcta, y hay evidencia que lo podría confirmar.
Un entierro prehispánico revela datos interesantes
Durante el año 1933 un grupo de arqueólogos se encontraban realizando excavaciones, bajo el mando del legendario Jose García Payón, quien era un reconocido investigador del municipio Chalchihuites, Zacatecas. Los arqueólogos encontraron un misterioso entierro que capturó su atención inmediatamente.
Había una asombrosa cabeza de terracota, se especula que esta figura esculpida era parte de un monumento más grande. Pero de lo que sí estaban seguros los estudiosos es que parecía la representación de un romano. La cabeza de terracota tenía la frente plana, barba y su gesto era rígido.
Artefactos encontrados en el entierro
Por otro lado, en el ajuar funerario que había sido fabricado con restos de cerámica, también encontraron otros objetos de gran valor. Entre ellos, había piezas de oro, hueso y cristales de roca.
Uno de los aspectos más llamativos es que todos estos elementos estaban “escondidos” bajo 3 capas de suelo de una pirámide. En el momento que iniciaron las excavaciones, el suelo todavía se encontraba en buen estado de conservación.
Datación de los objetos
José García Payón hizo la datación de los objetos encontrados en el antiguo yacimiento arqueológico que hoy día es conocido como “Toluca”. El arqueólogo mencionó que las piezas se remontan a los años 1476 y 1510 d. C. No obstante, la cabeza de terracota fue olvidada hasta el año 1960.
En el año 1961, un reconocido antropólogo llamado Robert von Heine–Geldern la examinó con detenimiento y lo que descubrió fue más asombroso todavía. Robert declaró que según sus estudios la figura del rostro romano fue esculpida en el año 200 a. C, es decir, es mucho más antigua de lo que creían.
Se llevan a cabo estudios
El arqueólogo llamado Bernard Andreae quien era director del Instituto Alemán de Roma dijo que claramente la cabeza de terracota era la representación de un romano. Pero eso no es todo, se llevaron a cabo una serie de estudios exhaustivos donde se descubrió que la figura era bastante antigua.
Además, el examen estilístico arrojó que el peinado y la forma de la barba eran estilos muy utilizados por los emperadores severianos. Es decir, esto era un tipo de moda en el tiempo en que esta cabeza fue esculpida, alrededor del siglo II.
Teoría sobre el descubrimiento de América ¿Qué tan acertada es?
Si en realidad esa cabeza la hicieron hace tantos años, entonces la historia de que Colón fue el primero en descubrir América es completamente errada. Por ende, la versión del contacto transoceánico entre los continentes ocurrió mucho tiempo antes de lo que mencionan los relatos históricos.
¿Cuál es el verdadero origen de la cabeza de terracota?
Por el momento, el origen de este artefacto que parece ser romano es un completo misterio, nadie sabe nada al respecto. Aunque hay varias conjeturas al respecto, ninguna de ellas ha podido ser comprobada y los investigadores no terminan de ponerse de acuerdo.
Sin embargo, algunos dicen que la cabeza llegó a ese lugar por importaciones que hacían las culturas europeas antiguas en México. Si esta teoría es correcta, entonces esta figura esculpida fue introducida en el país al inicio del periodo colonial o en la Edad Media.
Hipótesis planteadas por los arqueólogos
Durante años, los investigadores han tratado de darle respuesta a este misterioso hallazgo. Una de las hipótesis más aceptadas, afirma que la cabeza de terracota fue puesta en el interior de la pirámide de manera intencional. La hipótesis dice que Hugo Moedano, un compañero de José García Payón la colocó en el lugar para jugarle una broma.
Uno de los investigadores que estuvo durante la excavación afirma que Payón ni siquiera estaba en el lugar cuando se realizó el descubrimiento. Sin embargo, el hijo de Payón afirma que su padre sí estuvo durante aquella excursión. Pero lamentablemente, todos los involucrados en el hallazgo fallecieron.
Por esta razón, ninguna teoría ha sido comprobada pues no hay registros ni suficiente información. Incluso, hay quienes dicen que la figura esculpida en realidad tiene un gran parecido con los vikingos.
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