Un equipo de científicos ha revelado que los planetas muertos podrían estar enviando señales a través del espacio que podemos recepcionar en la Tierra.

Un fenómeno inusual significa que los mundos podrían disparar explosiones intensas a través del espacio, lo que podría ser sintonizado por científicos aquí.

Los científicos ahora esperan escucharlos, con la esperanza de poder determinar la composición de los núcleos de los planetas y aprender más sobre el universo.

Planetas destruidos por sus estrellas

Los investigadores observaron los planetas que orbitan estrellas que los han destruido: a medida que el sol quema todo su combustible y arroja sus capas externas, destruye los objetos cercanos y quema sus capas externas.

Los núcleos que quedan podrían verse a través del universo y permanecer durante el tiempo suficiente para ser detectados desde la Tierra.

La técnica utilizada para observar el planeta se basa en una técnica similar que los investigadores utilizaron para encontrar el primer exoplaneta confirmado. Para detectarlo, los científicos detectaron ondas de radio que fueron lanzadas por su estrella, y esperan que ahora puedan ver enanas blancas al observar explosiones de energía similares.

Una enana blanca y su núcleo planetario despojado juntos pueden crear un circuito. Ayuda a amplificar la señal y hacerla explotar a través del espacio, lo que significa que podría ser captada por radiotelescopios en la Tierra.

Los científicos necesitaban investigar más para saber cuánto tiempo pueden vivir los núcleos después de que se les haya arrancado la capa externa, y si seguirían transmitiendo a través del espacio. Descubrieron que esos núcleos pueden sobrevivir hasta mil millones de años, lo que significa que los mensajes podrían durar lo suficiente como para que sea posible detectarlos desde la Tierra.

Observación a gran escala

Los investigadores ahora esperan convertir los observatorios en candidatos potenciales y detectar los mensajes.

El Dr. Dimitri Veras, de la University of Warwick, dijo en un comunicado:

Hay un punto óptimo para detectar estos núcleos planetarios: un núcleo demasiado cerca de la enana blanca sería destruido por las fuerzas de marea, y un núcleo demasiado lejos no sería detectable. Además, si el campo magnético es demasiado fuerte, empujaría el núcleo hacia la enana blanca, destruyéndolo. Por lo tanto, solo deberíamos buscar planetas alrededor de esas enanas blancas con campos magnéticos más débiles en una separación entre aproximadamente 3 radios solares y la Distancia Mercurio-Sol. Nadie ha encontrado antes el núcleo desnudo de un planeta importante, ni un planeta importante solo mediante el monitoreo de firmas magnéticas, ni un planeta importante alrededor de una enana blanca. Por lo tanto, un descubrimiento aquí representaría ‘primicias’ en tres sentidos diferentes para los sistemas de planetas”.

El telescopio Robert C. Byrd Green Bank, un radiotelescopio de 100 metros de diámetro ubicado en Green Bank, Virginia Occidental, EE.UU. (Wikimedia Commons)

La investigación podría ayudar a revelar el futuro de nuestro sistema solar.

El Profesor Alexander Wolszczan de la Pennsylvania State University, dijo en un comunicado:

Utilizaremos los resultados de este trabajo como pautas para los diseños de búsquedas de radio para núcleos planetarios alrededor de enanas blancas. Dada la evidencia existente de la presencia de desechos planetarios alrededor de muchos de ellos, creemos que nuestras posibilidades de descubrimientos emocionantes son bastante buenas”.

El Dr. Veras agregó:

Un descubrimiento también ayudaría a revelar la historia de estos sistemas estelares, porque para que un núcleo haya llegado a esa etapa, habría sido despojado violentamente de su atmósfera y manto en algún momento y luego arrojado hacia la enana blanca. Un núcleo también podría proporcionar un vistazo a nuestro propio futuro distante y cómo evolucionará el sistema solar”.

Los hallazgos de la investigación han sido publicados en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.

Fuente: The Independent