Bajo tierra en Australia se ha descubierto un artrópodo sorprendente que confirma de una vez por todas el nombre de “milpies”, ya que posee 1.306 patas, según recientes informes.
Aunque el nombre milpiés proviene del latín “mil pies”, hasta ahora no se había encontrado ninguna especie con más de 750 patas. Sin embargo, después del descubrimiento de un nuevo milpiés con 1.306 patas, este artrópodo finalmente está a la altura de su nombre.
La nueva especie es Eumillipes persephone – emillipes que se traduce como “verdaderos mil pies”, siendo Perséfone la diosa griega del inframundo. La criatura serpenteante fue encontrada a 60 metros bajo tierra en un pozo de perforación de minería en la provincia de Eastern Goldfields de Australia.
Según las cuatro criaturas analizadas hasta ahora, E. persephone tiene hasta 330 segmentos en su cuerpo y puede medir hasta 0.95 milímetros (0.04 pulgadas) de ancho y 95.7 mm (3.77 pulgadas) de largo. Este milpiés tiene una cabeza en forma de cono con antenas y pico, pero sin ojos.
Los investigadores escribieron en un artículo que describe el hallazgo:
“Entre los primeros animales en respirar oxígeno atmosférico, y con algunas especies extintas que crecieron hasta dos metros de longitud, los milpiés han vivido en este planeta durante más de 400 millones de años. Aquí informamos del descubrimiento de E. persephone, el primer milpiés súper alargado conocido en Australia, y el nuevo poseedor del récord mundial del animal con el mayor número de patas”.
El equipo de investigación cree que este nuevo milpiés está relacionado lejanamente con la especie Illacme plenipes, que había establecido el récord anterior de 750 patas. Este milpiés en particular se encuentra en la región central de California y, a pesar de sus absurdas piernas, tiende a crecer hasta una longitud de solo 25 a 40 milímetros.
Una nueva especie “milpies”
Además de tener tantas piernas y no tener ojos, E. persephone también se destaca por su apariencia alargada, similar a un hilo (similar a I. plenipes) y su exoesqueleto uniformemente pálido y de color crema. Estas características ayudan a distinguirlo como una especie distinta de otras.
Los cuerpos largos, múltiples segmentos y muchas patas que se encuentran tanto en I. plenipes como en E. persephone bien podrían haber evolucionado para permitir que estos milpiés empujen y excaven en el suelo de manera más efectiva, sugieren los investigadores.
Los investigadores escribieron:
“Esta locomoción telescópica, al deslizar segmentos del tronco junto con el empuje de las patas, impulsa al animal a través de un microhábitat subterráneo variado e impredecible, y el aumento en el número de patas probablemente contribuya con más fuerza de empuje para forzar a través de pequeñas grietas y aberturas”.
Todavía hay muchas incógnitas sobre la E. persephone – qué come, por ejemplo, y dónde más se puede encontrar – pero ya hay suficientes para marcarla como su propia especie y establecer que es un récord en términos de su recuento de piernas.
Los investigadores dicen que el descubrimiento de este nuevo milpiés es una prueba más de la biodiversidad que se encuentra en las profundidades de la Tierra en la provincia de Eastern Goldfields, y ayuda a defender la región para el futuro.
Si bien las condiciones sobre el suelo cambiaron significativamente a lo largo de miles de años, según los investigadores, el hábitat subterráneo probablemente se mantuvo estable: fresco y húmedo. Es posible que estén esperando muchos más descubrimientos.
Los investigadores escribieron:
“Estos hábitats subterráneos, y sus habitantes, están muy poco estudiados, a pesar de su importancia ecológica en la filtración de aguas subterráneas y la detección de toxinas ambientales”.
Los hallazgos de la investigación han sido publicados en Scientific Reports.
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