Nueva investigación informa la detección de movimientos nunca vistos en el Valle del Rift de África Oriental que podrían estar siendo impulsados por rocas sobrecalentadas procedentes de las profundidades de la superficie terrestre.

Un gigantesco penacho de roca sobrecalentada que se eleva desde las proximidades del núcleo de la Tierra podría ayudar a explicar misteriosas distorsiones relacionadas con un gigantesco desgarro en la superficie del planeta que parece estar partiendo África en dos, según un reciente estudio.

En todo el planeta, enormes grietas en la superficie terrestre, conocidas como grietas continentales, están separando masas de tierra. La mayor grieta continental activa es la de África Oriental, una red de valles de unos 3.500 kilómetros de longitud que se extiende desde el Mar Rojo hasta Mozambique.

Las grietas continentales se producen por la deformación de la litosfera, la capa rígida más externa del planeta. A medida que la litósfera se dilata, sus partes más superficiales pueden distorsionarse de diversas maneras, desde separarse como la masa hasta romperse.

La coautora del estudio, D. Sarah Stamps, geofísica de la Virginia Tech, en Blacksburg, compara estas respuestas con la plastilina: si se golpea la plastilina con un martillo, puede agrietarse y romperse, pero si se separa lentamente, se estira. A diferentes escalas temporales, la litosfera de la Tierra también puede comportarse de formas distintas.

La dirección en la que se deforma la superficie de la Tierra en las grietas continentales suele ser perpendicular a la longitud de la grieta. Imaginemos dos mitades de un continente que se separan, y la tierra se estira o se rompe donde se encuentran.

Desfiladero formado en la grieta del Rift de África Oriental, en Tanzania. Crédito de imagen: Ulrich Doering

Una larga investigación

Tras examinar el Rift de África Oriental durante más de 12 años, los investigadores descubrieron que la deformación es perpendicular -como era de esperar- y se desplaza hacia el este y el oeste. Sin embargo, también descubrieron una deformación paralela a la grieta, que se desplaza hacia el norte. Estos movimientos superficiales “son bastante inusuales y no se han observado en ningún otro lugar”, declaró Stamps.

En el estudio, el equipo descubrió que una gigantesca “superpluma” en forma de hongo de roca caliente y flotante que asciende por el manto de la Tierra puede ayudar a explicar estas misteriosas distorsiones.

Stamps afirma:

“Este trabajo sugiere que las plumas pueden desempeñar un papel activo en la deformación de la superficie terrestre, sobre todo en las grietas continentales donde la litosfera se ha adelgazado”.

Los científicos conocen desde hace tiempo la existencia de plumas del manto en la Tierra. Por ejemplo, Islandia y las cadenas de islas de Hawaii y las Galápagos se formaron cuando las placas tectónicas se desplazaron lentamente sobre las plumas del manto, que quemaron el material suprayacente como un soplete.

La superpluma africana

Los investigadores se centraron en la Superpluma Africana, que se eleva bajo el suroeste de África y se dirige hacia el noreste a través del continente, haciéndose menos profunda a medida que se extiende hacia el norte.

Las deformaciones son consistentes con el modelo Superpluma Africana, dicen los investigadores. Crédito de imagen: Rajaonarison et al., Journal of Geophysical Research: Solid Earth, 2023

Los científicos utilizaron tecnología GPS para controlar con precisión milimétrica los movimientos de la superficie en el Rift de África Oriental. También utilizaron instrumentos sísmicos para analizar las direcciones en las que la roca del manto fluía lentamente por una amplia zona.

Por último, Tahiry Rajaonarison, geofísico de la New Mexico Tech (Socorro) y autor principal del estudio, realizó simulaciones informáticas en 3D para analizar los datos GPS y sísmicos y determinar la actividad subterránea subyacente a la Falla de África Oriental.

Los modelos tridimensionales mostraron que las inusuales deformaciones paralelas al rift pueden estar impulsadas por el flujo del manto hacia el norte asociado a la Superpluma Africana.

Rajaonarison dijo:

“Imaginemos un Silly Putty más fuerte sobre un Silly Putty más débil, que representan la litósfera altamente viscosa y el material menos viscoso de la pluma, respectivamente.

Si mueves el Silly Putty más débil, se pegará progresivamente al Silly Putty más fuerte en su interfaz hasta que el Silly Putty más fuerte se mueva en la misma dirección”.

En definitiva, “para mí la implicación más importante de estos hallazgos es la mejora de nuestra comprensión de cómo se desintegran los continentes”, afirmó Rajaonarison.

Los hallazgos de la investigación han sido publicados en la revista Journal of Geophysical Research: Solid Earth.

[H/T: livesci]

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