Cuando se descubrió el meteorito de Fukang, en China, nadie tenía ni idea de que estaban encontrando el objeto espacial más asombroso de todos los que se habían estrellado en la Tierra y de los que se tiene conocimiento.
Se cree que tiene aproximadamente unos 4.500 millones de años. De hecho, podría ser tan antiguo como el planeta mismo. El meteorito fue descubierto en las montañas cerca de Fukang en el año 2000. Con el pasar de los años, pasaría a ser conocido como el más asombroso de todos los tiempos.
El asombroso caso del meteorito de Fukang
Trozo del meteorito de Fukang exhibido. Crédito: Museo de Historia Natural de Vienna / Wikimedia Commons
Fue descubierto por un excursionista que, habitualmente, se sentaba en esa extraña protuberancia en la tierra para almorzar.
Extrañado por el misterioso brillo que emanaba de, lo que él creía, era una roca, tomó un cincel y un martillo y partió una muestra que fue enviada a Estados Unidos para su análisis. Demostrando que no era algo común.
Resultó ser un Palasito, una especie de meteorito con cristales traslúcidos y brillantes de color dorado. Este mineral es conocido como olivina, los cuales estaban incrustados en un panel plateado de níquel y hierro.
Los expertos en un laboratorio de Arizona explican que los Palasitos están compuestos de un 50% de olivino y cristales de peridoto, y un 50% de metales como los antes mencionados. Esto le da una apariencia única de mosaico.
Este extraño meteorito podría provenir de la formación de los planetas, convirtiéndose en ejemplares sumamente raros de encontrar ya que no llegan ni al 1% de la cantidad total de los meteoritos existentes.
Una muestra del meteorito de Fukang. Crédito: Museo de Historia Natural de Vienna / Wikimedia Commons
Todo parece indicar que los Palasitos que tienen 4.500 millones de años provienen desde la creación misma del Sistema Solar y su valor recae en que existen muy pocos ejemplares que sobrevivieron al descender a la Tierra y pasar por la atmósfera, ya que casi todos se desintegran.
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El meteorito original de Fukang pesaba alrededor de 450 kilos, sin embargo, son muchas las personas que han «tomado muestras» de él. Desde entonces, ha sido partido en piezas que develan su extraño patrón en forma de mosaico. Actualmente, estos trozos son subastados en todo el mundo por un gran valor.
El elevadísimo valor del Palasito
Marvin Killgore sosteniendo el trozo del meteorito en su poder. Crédito: Marvin Killgore / meteoritelab
La Universidad de Arizona posee un total de 31 kilos del misterioso meteorito. Marvin Killgore, de la Universidad del Centro de Meteoritos del suroeste de Arizona tiene una cantidad similar. Pero la porción más grande la posee un coleccionista anónimo.
Su valor es tan grande que los trozos más pequeños se venden entre 30 a 50 dólares por gramo. En abril del 2008, la porción más grande del meteorito fue subastada en Bonham, Nueva York.
El precio inicial era de 2 millones de dólares, sin embargo, nadie ofertó por la pieza. Curiosamente, toda la atención de la subasta se la llevó un estiércol de dinosaurio fosilizado de 130 millones de años.
El meteorito de Fukang es uno de los hallazgos sobre meteoritos más importantes de todo el siglo XXI, siendo considerado, incluso, como el meteorito más bello de todos los Palasitos encontrados.
Quizás, su único detalle es que no es el más grande; En 2005, el cazador de rocas espaciales, Steve Arnold, desenterró una pieza de 635 kilos en Kansas, Estados Unidos. Destronándolo de ese título.
Sin duda alguna, los misterios del Universo no dejan de sorprender a los especialistas y cada época que pasa, descubrimos algo diferente sobre el espacio ¿Qué nos depara el futuro de la exploración espacial? ¿Qué encontraremos fuera de nuestras fronteras terrestres?
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