Tomando su nombre de la mitología griega, Fobos y Deimos, los cuerpos que orbitan Marte, vienen siendo motivo de especulación desde hace décadas. Se habla de extrañas coincidencias en los escritos de Jonathan Swift quien pareció predecir ciertas cosas, algo similar a lo que se apunta sobre Julio Verne, pero también de que uno de estos satélites albergara un extraño monolito y hasta de un misterioso incidente en relación a una sonda espacial soviética que se aproximó a Fobos.
Como vemos, estas lunas marcianas han dado mucho que hablar pero dos importantes científicos plantearon una sorprendente posibilidad: que estos dos cuerpos no sólo estuvieran huecos sino que hasta esto, podría ser indicativo de que fueran artificiales.
Vida inteligente en el Universo
«Vida Inteligente en el Universo» es el título de una obra publicada en 1966 coescrita por dos grandes figuras del ámbito científico: Carl Sagan y Iósif Shklovski.
El primero, astrofísico, cosmólogo y astrónomo, galardonado con varias distinciones y conocido, entre otras cosas, por su labor de divulgación; quien colaboró en la redacción de la obra mencionada con un compañero también premiado astrofísico y astrónomo, en este caso, soviético.
En el trabajo conjunto, ambos autores decidieron dedicar un capítulo completo al tema que nos ocupa, titulado: «¿Son satélites artificiales las lunas de Marte?» en el que principalmente se explicaron y se realizaron una serie de consideraciones matemáticas sobre los satélites marcianos que ilustraron ciertas posibilidades que los astrofísicos se plantearon derivadas de sus cálculos. ¿A qué conclusiones llegaron?
¿Están huecos?
Efectivamente, la primera de las posibilidades que estos dos autores se plantearon basándose en sus cálculos es que los hijos de Ares estuvieran huecos:
“¿Pero cómo puede tener un satélite natural una densidad tan baja? El material del que está compuesto debe poseer cierta rigidez, por lo que las fuerzas cohesivas tienen que ser mayores que las fuerzas de mareas gravitatorias de Marte que tienden a romper el satélite”.
SAGAN, Carl y SHKLOVSKI, Iósif, Vida Inteligente en el Universo, ed. Reverté, 1981
Entre otras cosas, se habían basado en los movimientos de Fobos y en su baja densidad pero si ciertamente los satélites estuvieran huecos ¿significaría que se pueden formar cuerpos de este tipo de forma natural o que son artificiales?
“¿Podría ser Fobos efectivamente rígido por fuera y hueco por dentro? Un satélite natural no puede ser un objeto hueco. Llegamos pues a la posibilidad de que Fobos, y quizá Deimos también, sean satélites artificiales de Marte”.
SAGAN, Carl y SHKLOVSKI, Iósif, Vida Inteligente en el Universo, ed. Reverté, 1981
Los autores nos indicaron que no es posible que formaciones de este tipo surjan naturalmente por lo que, de ser verdaderamente huecos, se plantearon la posibilidad de que Fobos y Deimos fueran satélites artificiales pero, esta consideración abre forzosamente la puerta a que nos preguntemos quiénes serían capaces de llevar a cabo tal empresa.
¿Quiénes?
Estaríamos hablando, ya entrando en el terreno de la especulación, de que las lunas marcianas (sobre todo Fobos) deberían de haber sido el producto de una civilización mucho más avanzada que la nuestra que hubiera dejado tras de sí estos objetos de magnitudes considerables. En palabras de los autores:
“Una civilización técnica mucho más avanzada que la nuestra podría, efectivamente, construir y lanzar satélites masivos”.
SAGAN, Carl y SHKLOVSKI, Iósif, Vida Inteligente en el Universo, ed. Reverté, 1981
¿Qué podría haberles motivados a invertir tantos recursos en un proyecto de tal magnitud? Los autores expresan algunas posibilidades, por ejemplo, que fueran de utilidad como punto de partida en la exploración espacial, siendo que les resultó concebible la idea de que hubieran sido puestos en órbita desde Marte gracias a su reducida gravedad en comparación con la Tierra o incluso que hubieran sido cuerpos capturados, vaciados y puestos en órbita:
“De modo conceptible, la captura y vaciado de un asteroide pequeño puede ser técnicamente más viable que la construcción en órbita de un satélite artificial con material llevado desde la superficie”.
SAGAN, Carl y SHKLOVSKI, Iósif, Vida Inteligente en el Universo, ed. Reverté, 1981
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¿Podría ser así?
Desde luego, resulta difícil el imaginar una sociedad que contara con una tecnología tal como para poder manipular a su antojo o crear cuerpos celestes de millones de toneladas, pero si esto fuera así, Fobos y Deimos podrían representar uno de los últimos vestigios de una posible civilización ya consumida y desaparecida o que se hubiera trasladado a otro lugar. Tal vez, unos remanentes que hubieran sobrevivido a sus propios creadores…
Nuestra compañera Sonia Gupta del canal AEnigma nos explica estas teorías en detalle junto a otras cosas extrañas que han sido detectadas en los satélites de Marte en el siguiente video:
Fuente: SAGAN, Carl y SHKLOVSKI, Iósif, Vida Inteligente en el Universo, ed. Reverté, 1981
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