Ya estamos en el año 2018, y tener un resfriado es algo que sufrimos muy frecuentemente. Ahora, una iniciativa científica podría poner fin al resfriado común para siempre.

Un equipo de científicos del Reino Unido han desarrollado una nueva molécula que previene que los virus causantes de la enfermedad se repliquen dentro de las células humanas. Si las pruebas futuras logran confirmar que el compuesto es seguro, entonces podríamos tener muy pronto una cura.

Aunque lo llamamos resfriado común, ese nombre no se ajusta a la realidad, una realidad de más de 200 cepas de virus diferentes que nos hacen pasar varios días muy molestos.

Debido a esta gran variación viral, los científicos tenían un difícil reto para lograr una sola vacuna que combata el resfriado común. Sin embargo, un nuevo enfoque liderado por investigadores del Imperial College de Londres podría obtener un nuevo medicamento que trate la enfermedad y no solo los síntomas.

El nuevo compuesto no perseguirá los muchos virus, de los cuales la mayoría son especies de rinovirus (uno 160 tipos reconocidos), sino que el nuevo compuesto, cuyo nombre en código es IMP-1088, se centrará en algo que los virus necesitan: nuestras células.

IMP-1088 (en amarillo) bloquea el NMT humano (en azul), evitando el despliegue de la cápside viral (verde). Crédito: Imperial College London

Para replicarse en el interior de su anfitrión, los virus secuestran una proteína en células humanas llamada N-miristoiltransferasa (NMT), que utilizan para construir una cápside (caparazón) para proteger su estructura genética.

Roberto Solari, biólogo celular,dijo a The Guardian:

Los virus secuestran al huésped para hacer más copias de sí mismos. Esta enzima es una de las enzimas del huésped que el virus secuestra”.

Este comportamiento de secuestro no es exclusivo del rinovirus. Otros patógenos y parásitos también son atraídos por la proteína, incluido el parásito humano de la malaria Plasmodium falciparum.

El descubrimiento, de hecho, se produjo mientras el equipo investigaba formas de inhibir el Plasmodium falciparum. Durante el proceso los investigadores descubrieron la estructura molecular del nuevo compuesto, IMP-1088, que inhibe la unión viral a la proteína con una efectividad devastadora.

Anteriormente, los científicos han investigado este tipo de inhibidores de NMT, pero no habían logrado este nivel de potencia.

De acuerdo al equipo:

El IMP-1088 es hasta 100.000 veces más eficaz para bloquear los virus que secuestran nuestras proteínas celulares que los esfuerzos anteriores, que según dicen llevan a una ‘supresión completa‘ de la replicación viral y la infectividad”.

Cabe resaltar que hasta ahora los resultados solo han sido demostrados in vitro, en experimentos con células humanas en el laboratorio, por lo que no tenemos aún una cura que podamos probar.

Sin embargo, hay buenas noticias: las investigaciones realizadas han sugerido hasta ahora que el IMP-1088 no es tóxico para nuestras células humanas, por lo cual podríamos estar ante un candidato muy prometedor para ensayos humanos potenciales, y que podría iniciar en poco tiempo, es decir, dos años.

Pero, ahora los investigadores han dicho que sería muy temprano hacerlo.

Solari agregó:

No hemos realizado ningún estudio con animales, y obviamente no hemos realizado ningún estudio en humanos, así que no puedo decirles formalmente cuál es la toxicidad animal de este compuesto. Todavía hay un largo camino antes de que esto se convierta en una medicina”.

Según sea el caso, el equipo ya está investigando formas de crear una versión de IMP-1088 que pueda inhalarse, de tal forma que llegue a los pulmones del paciente lo más rápido posible para bloquear la replicación viral.

También podría aplicarse para tratar otras afecciones que se complican con el rinovirus, como el asma y la fibrosis quística.

Ahora toca esperar los resultados de las pruebas a realizar, y a la vez esperamos que los millones de personas que sufren resfriados cada año por fin puedan tener un alivio a este mal, ojalá pronto.

El estudio científico ha sido publicado en la revista Nature Chemistry.

Artículo escrito por: Fernando T. para CodigoOculto.com

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