Un grupo de científicos rusos han descubierto esta semana en la región de Yamalia-Nenetsia, en la zona ártica de la Siberia occidental (Rusia), aproximadamente 200 lagos en cráteres producidos por explosiones de gas metano durante los últimos dos años, según informa The Siberian Times.

Imágenes captadas desde el espacio muestran los lagos azulados formados en las depresiones causadas por el derretimiento del permafrost en las penínsulas de Yamal y Gydan.

Según el profesor Vasily Bogoyavlensky, director adjunto del Instituto de Investigación de Petróleo y Gas de Moscú (Rusia), estos cráteres aparecieron en pequeñas protuberancias del terreno conocidas como pingos, cuyos núcleos están formados por hielo.

Tras estudiar las imágenes aéreas de la región donde aparecieron estos lagos en cráteres, que poseen un color azul celeste, los científicos concluyeron que se formaron por la liberación de gas metano en forma de explosión por el calentamiento de la superficie, a lo que se suman las características geológicas de la región.

Asimismo, los científicos advierten que estos fenómenos naturales pueden representar un peligro para las infraestructuras de transporte y energéticas de la zona, que vive un alto crecimiento industrial por sus yacimientos de petróleo, por lo que es necesario vigilar el comportamiento de dichos lagos y sus posibles explosiones de gases.

Una característica de estos lagos es que son cráteres o embudos en el suelo a través de los que son expulsadas emisiones de metano.

Los científicos dicen que estas fugas ocurren durante todo el año en los lagos donde el procesamiento de carbono y las emisiones de metano se producen incluso a temperaturas cercanas a cero grados centígrados. El estudio detallado de los datos de satélite de los años 2015-2016 ha identificado más de 200 lagos que son vistos como una fuente activa de las emisiones de metano.

El gas es tanto de carácter bioquímico, el resultado de la actividad microbiana resultado de la descongelación del permafrost, y catagénesis, formado en las capas profundas del suelo.

Los cráteres de las emisiones de gas de la región del Sur de Kara (C1, C2, C3, C4, C9). Crédito: Vasily Bogoyavlensky

El profesor Vasily Bogoyavlensky, subdirector del Petróleo con sede en Moscú y el Instituto de Investigación del Gas, que forma parte de la Academia Rusa de Ciencias, dijo: «Estos lagos tienen una serie de características, que pueden ayudar a identificarlos a distancia: el color azul anómalo de agua, la presencia de cráteres en la parte inferior y el gas que se filtra en el agua, las trazas de gas en la cubierta de hielo estacional, así como la erosión costera activa y el dilatamiento del permafrost cerca del borde del agua.»

El azufre presente en los gases que escapan dan a los lagos su color distintivo. Advirtió que «muchos de los sitios con emisiones de gases están situados cerca de los territorios de depósitos de petróleo y gas».

Por otra parte, él ve una «interrelación de las emisiones de gases y la actividad sísmica». Por ejemplo, más de uno de los yacimientos de gas (en Yamal), se encuentran a lo largo de dos líneas, que parecen formar una cruz gigante.

Esto sugiere una «conexión de cráteres con profundas fallas en la corteza terrestre, pero para confirmarlo se necesitará llevar a cabo una investigación sísmica a fondo».