Docenas de agujeros han aparecido en el fondo del lago Michigan y científicos han quedado perplejos ante el hallazgo.
Como informa Live Science, los investigadores de una región protegida del Great Lake están menos seguros que nunca sobre los extraños agujeros después de hacer un estudio del lecho del lago con un robot sumergible.
Cráteres en el fondo del lago
Los extraños cráteres se detectaron por primera vez hace dos años durante un estudio del Santuario Marítimo de la Costa de Wisconsin (WSCMS), que abarca una zona protegida del lago Michigan conocida por albergar al menos 36 naufragios.
Con la ayuda del Great Lakes Environmental Research Laboratory de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), los científicos del santuario han podido observar más de cerca los agujeros, pero aún tienen muchas preguntas.
Russ Green, arqueólogo marítimo del santuario, dijo en un comunicado:
“Cualquier nuevo descubrimiento en los Grandes Lagos es emocionante. Pero estas características realmente se destacan – que están en aguas más profundas … y no se conocían antes, por lo que podemos decir.”
Los investigadores determinaron que estas salpicaduras en el fondo del lago Michigan son agujeros en el lecho del lago. Crédito de imagen: Wisconsin Shipwreck Coast National Marine Sanctuary
Casualmente, el investigador y buscador de naufragios local Brendon Baillod dijo al sitio web que también encontró los agujeros en el fondo del lago Michigan más o menos al mismo tiempo que los investigadores del santuario mientras buscaba un carguero naufragado. Descubrió que los cráteres medían entre 6 y 12 metros de profundidad.
Baillod dijo:
“Había docenas de ellos en nuestra cuadrícula de búsqueda. La mayoría tenían entre 152 y 304 metros de diámetro y formas irregulares”.
Expedición desciende cientos de metros
Los investigadores utilizaron un vehículo teledirigido para tomar esta fotografía del lecho lacustre dentro de uno de los agujeros del fondo del lago Michigan. Crédito de imagen: Brendon Baillod and Dusty Klifman
Aunque tardaron un tiempo en recopilar todos sus datos, Baillod, Green y sus colegas acabaron poniéndose en contacto con científicos de la NOAA para planificar una expedición. La misión se llevó a cabo finalmente en agosto, según informa Live Science, cuando un sumergible teledirigido descendió cientos de metros hasta las profundidades del lago Michigan para examinar los agujeros.
En una entrevista concedida a principios de este año al Milwaukee Journal Sentinel, el científico de la NOAA Steve Ruberg declaró que la primera incursión descubrió unos 40 “pequeños círculos perfectos” con gambas y otros animales marinos “haciendo de las suyas en la oscuridad ahí abajo”.
Por el momento, la teoría predominante es que los agujeros son una especie de sumidero, pero los científicos y los buscadores de naufragios no quieren llamarlos así definitivamente hasta que puedan investigar más a fondo.
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