Un evento destructivo de proporciones bíblicas podría haber aniquilado a las antiguas y llamadas «ciudades del pecado» Sodoma y Gomorra de la faz de la Tierra.

De acuerdo a la Biblia, las ciudades de Sodoma y Gomorra fueron destruidas por «azufre y fuego» debido al «pecado» que reinaba en sus calles. Ahora, un equipo de investigadores ha dicho que podría haber algo de cierto en la historia bíblica.

La investigación presentada en la reunión American Schools of Oriental Research, dice que un estallido de aire causado por una explosión de meteoros en la atmósfera destruyó instantáneamente una civilización que abarcaba una región de 25 kilómetros de ancho.

El equipo dice en su sitio web:

Estamos descubriendo el sitio más grande de la Edad de Bronce en la región, probablemente el sitio de la Sodoma bíblica en sí mismo”.

Según análisis realizados en Tall el-Hamman, al noreste del Mar Muerto, el área estuvo anteriormente ocupada durante 2.500 años antes de llegar a su trágico fin al terminar la Edad de Bronce.

La destrucción de Sodoma y Gomorra, John Martin, 1832. Wikimedia Commons

Sodoma y Gomorra: Final apocalíptico «venido del cielo»

La datación por radiocarbono determina que las paredes de adobe desaparecieron hace aproximadamente 3.700 años, dejando solo cimientos de piedra. Además, las capas exteriores de cerámica poseen signos de fusión y muestran cristales de circón que se habrían formado en 1 segundo a altas temperaturas.

También se encontraron  diminutos granos minerales que cayeron del cielo y que fueron hallados en la cerámica de todo el sitio. Estos granos fueron llevados hasta allí por los intensos vientos producidos por el estallido en la atmósfera.

Y si esto no te parecía tan apocalíptico, la explosión de calor no solo eliminó al 100 por ciento de las ciudades y pueblos de la Edad de Bronce Medio, también destruyó los suelos agrícolas de campos que eran fértiles, debido a que la salmuera del Mar Muerto empujó la tierra, haciéndola inútil para sembrar por un aproximado de seis siglos.

Además, el estudio indica que otros 100 asentamientos pequeños en el área también quedaron expuestos a la destrucción, terminando con la vida de aproximadamente 40.000 a 65.000 personas que vivían allí.

Este evento fue similar a otro más reciente: el evento de Tunguska en Siberia, que aplastó casi 2.000 kilómetros cuadrados de terreno y que fue generado posiblemente por un objeto que explotó en la atmósfera, entre 5 a 10 kilómetros de altura.

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