Aunque estemos en pleno siglo 21, no podemos explicar del todo cómo las civilizaciones antiguas lograron erigir los majestuosos templos en el remoto pasado. Lugares como Baalbek, Machu Picchu, Tiahuanaco hacen que nos preguntemos: ¿utilizaron algún tipo de tecnología olvidada para lograr mover las enormes piedras? ¿Utilizaron la levitación mediante ondas sonoras? En este artículo se trata desde un punto de vista científico para tratar de explicar las antiguas leyendas relacionadas y existentes alrededor del mundo.

En febrero de 2019, un grupo de investigadores de la Columbia University publicó los resultados de un experimento que mostró que las ondas sonoras pueden transportar masa gravitacional.

Durante el experimento, los científicos descubrieron que las ondas sonoras pueden generar un pequeño campo gravitacional.

El estudio científico determinó:

“Los cálculos muestran que las ondas sonoras tienen una pequeña masa negativa, lo que significa que en presencia de un campo gravitacional, como el de la Tierra, su trayectoria se inclinará hacia arriba. Se ha descubierto que las ondas sonoras también generan un pequeño campo gravitacional”.

Un ejemplo de levitación acústica.

Durante muchos años, los físicos creyeron que las ondas sonoras podían transportar energía, pero no pensaban que las ondas pudieran transportar masa. Sin embargo, los investigadores encontraron evidencia de que sus hallazgos anteriores estaban equivocados, según informó Phys.org.

El equipo de científicos descubrió que las ondas sonoras que atraviesan el helio superfluido tienen una masa pequeña. Lo demostraron matemáticamente, pero no midieron la masa transportada por la onda sonora.

Descubrieron que los fonones (cuasipartículas) interactúan con el campo gravitacional de tal manera que transfieren masa a medida que se mueven a través del material. En su nuevo trabajo, los científicos reportan evidencia de que los mismos resultados son válidos para la mayoría de los materiales.

Los investigadores han sugerido formas de probar su descubrimiento en el mundo real. Una opción es utilizar dispositivos sensores de gravedad para estudiar terremotos. Cuando un terremoto envía sonido a todo el planeta, los dispositivos pueden detectar «miles de millones de kilogramos de masa» transportados por el sonido.

En 2020, los científicos crearon un algoritmo para detectar señales de terremotos que deforman la gravedad, cambiando la densidad de las rocas por un corto tiempo. Estos cambios en la gravedad envían señales a la velocidad de la luz, lo que permite detectar los terremotos incluso antes de que comience la destrucción.

Un año antes de este estudio, el mismo grupo de científicos propuso la teoría de que los fonones tienen masa negativa y, por tanto, gravedad negativa.

El físico y estudioso de la teoría de las cuerdas, Michio Kaku dijo en un comunicado:

“Resulta que bajo ciertas condiciones, las ondas sonoras pueden comenzar a subir en lugar de descender. Y esta anomalía parece ser coherente con las leyes de la física, por lo que algunas vibraciones, en lugar de caer, en realidad pueden caer”.

Algunos investigadores de civilizaciones antiguas creen que este estudio sugiere cómo los humanos antiguos lograron mover piedras enormes. Quizás usaron ondas sonoras y vibraciones para esto.

Según antiguas leyendas, el sonido era parte del proceso y la gente construyó estructuras gigantes como las Pirámides de Egipto utilizando sonidos de una frecuencia específica.

Los científicos que participaron en la investigación esperan que tal vez algún día desentrañen el misterio de las ondas sonoras y, sobre su base, creen una tecnología para mover objetos de gran masa.

Los hallazgos científicos del estudio titulado «Gravitational Mass Carried by Sound Waves» fueron publicados en la revista Physical Review Letters.

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