Aunque el complejo subterráneo de Derinkuyu, situado en la Capadocia turca, ganó popularidad en los setenta, cuando el estudioso suizo Erich Von Däniken lo descubrió al mundo a través de El Oro de los Dioses, Derinkuyu, llevaba ya tiempo despertando interrogantes especialmente entre los arqueólogos de su país.
Los rumores sobre sus orígenes se pierden en la noche de los tiempos, que según crónicas históricas remontan su construcción, a miles de años.
Pero Derinkuyu oculta otros misterios paralelos, que esta escritora se propone también ahondar. Ajuste su cinturón lector, se avecina un viaje movido.
Derinkuyu – La Ciudad de los Pozos Profundos
“Capadocia. Región altamente magnética. Según las tradiciones, primera en emerger después del Diluvio Universal. Situada al norte de las montañas de Tauro, y no por casualidad, al este del gran desierto de sal de Axylon. Es cuna de grandes conocimientos”. Hania Czajkowski. La Conspiracion de los Alquimistas, 2000.
Existen varias versiones sobre como se halló Derinkuyu, sitio localizado a 29 km en la provincia de Nevşehir, Capadocia, Anatolia Central, Turquía. La más reconocida es la que narra como un local de la zona, mientras se encontraba haciendo refacciones en su casa, se encontró con la sorpresa, otras voces agregan, fue una gallina desaparecida que puso en alerta a su descubridor.
Lo cierto es que en 1963 Turquía se conmocionó cuando Omar Demir revelara, la existencia de una angosta galería subterránea de cuatro kilómetros de extensión, y de ochenta y cinco metros bajo el nivel del mar.
A estas pavorosas cifras, siguieron datos no menos alarmantes, señalando Derinkuyo, como un enorme complejo bajo tierra atravesado por veinte niveles, de los cuáles tan sólo ocho, fueron dados a luz.
Otra particularidad, es que en Derinkuyo se erigen cincuenta y dos conductos de ventilación, maravillando por su compleja arquitectura a los arqueólogos e ingenieros.
Retomando a Omar Demir, fallecido hace unos años, publicaría luego un libro esencial para el conocimiento del caso, Capadocia. Cuna de la Historia, donde señala la existencia de treinta y seis ciudades subterráneas en su país conectando con Derinkuyu, aunque se suponen existirían muchas más.
También Demir se interroga acerca de los escombros, nunca encontrados, y teniendo en cuenta la inexistencia de colinas aledañas. Dentro de Derinkuyu corre un río subterráneo, dato no menor.
Según los historiadores Derinkuyo, con sus pozos, lugares de reunión, bodegas, establos, entre otros elementos, y que en su tiempo fuera refugio de casi 10.000 habitantes, con una antigüedad que rebasa los 18 siglos, remontándose hasta la era paleolítica, se inscribe, al decir de los mismos, como acertijo de difícil resolución.
Las primeras hipótesis que se lanzaron a resolver la gran pregunta, sobre los verdaderos artífices tras esta construcción monumental, lejos estuvieron como luego ahondaremos, en aunar criterios.
Otra cuestión, es si Derinkuyu podía tener referencias en la antigüedad, en busca de pistas certificando su pasado.
Al rescate surgió un nombre importante, Jenefonte, 431-354 a.C., un historiador, militar, filósofo de la Antigua Grecia, discípulo de Sócrates y autor de una obra clásica, Anábasis palabra que significa Marcha Tierra Adentro, y cuyo título alternativo lleva el nombre de Expedición de los Diez Mil., datado del 368 a.C.
Allí Jenefonte narra la campaña del príncipe persa Ciro el Joven, en contra de su hermano Artajerjes II. Pero su vibrante relato esconde otra sorpresa, donde se apunta a Derinkuyu.
Escribe Jenofonte:
Sobre personas que vivían en Anatolia habían excavado sus casas bajo tierra, y vivían en alojamientos lo suficientemente grandes, como para albergar una familia, sus animales domésticos, y los suministros de alimentos que éstos almacenaban”.
Otra pista tiene a Melengübü, palabra de origen árabe que significa a pozo profundo, sinónimo para referir a Derinkuyu. Pero de regreso Jenefonte, el excelso cronista griego no aclara porque el pueblo turco decide ocupar viviendas subterráneas, convirtiéndose aquellos habitantes en topos humanos.
Muchos investigadores sugieren en búsqueda de respuestas, que Derinkuyu sirvió como refugio para antiguos cristianos, perseguidos por sus creencias, en hechos acaecidos durante el siglo IV. Esta narrativa encuentra gran adhesión si pensamos el celebre apóstol Pablo de Tarso, protagonista de una de las conversiones más famosas de la Biblia, predicó en la región.
Como señalamos dos pueblos son citados con autores del laberíntico Derinkuyu, frigios e hititas. Vayamos a estos últimos.
Hititas, y la pista atlante
Los libros de historia parecen dedicar pocas páginas a la civilización Hitita, a pesar de sus monumentales obras aún presentes, deslumbrando visitantes extranjeros, y locales, por sus refinadas arquitecturas. Lo cierto es a la fecha, ignoramos muchos datos sobre los llamados reyes del mar. Su aparición remontaría la cronología al siglo XVIII a.C.
Sabemos fueron un pueblo de elevada inteligencia, demostrada a través de su escritura jeroglíficas, todo un rompecabezas para los lingüistas actuales, incapaces de descifrar su compleja escritura.
Excelsos herreros y sobre todo marinos avezados. Una discusión que mantiene alerta a los estudiosos, es acerca de sus orígenes, controversia que divide a los especialistas, ya que algunos no dudan en afirmar los hititas son hijos naturales de la antigua Turquía, aunque otros alegan Rusia como fuente migrante.
Ahora bien, de vuelta a nuestro tema, Derinkuyu aparece vinculada a los hititas, señalados en varios informes como sus constructores, aunque se supone pudieron haber adaptado estas residencias internas, y cuyos propósitos tras este asalto hacia las profundidades, ignoramos.
Ante la escasez de pruebas, podríamos descartar la cuestión hitita, sino fuera por una pista que hace algunos cuantos años llegara a mis manos. Ocurrió en 2008, mientras me encontraba en plena investigación sobre la Cueva de los Tayos, cuando me topé con el impresionante trabajo de un estudioso brasileño de origen italiano, Gabriel D’Annunzio Baraldi, fallecido en 2002. Su obra de inmediato captó mi atención.
Autodidacta nato, Baraldi supo incursionar en la arqueología, historia, epigrafía lingüística, además de dominar cuatro idiomas a la perfección, pintor premiado, su biografía asombra ante tantos conocimientos, que parecen rodear su figura.
Debo decir cuando abordé sus hipótesis, sobre la creencia en una protohistoria americana desconocida, quedé asombrada. Pero hay cuestión central querido lector, que convierten a Baraldi en una personalidad cercana a mis ideas, y que tiene como tesis principal la Atlántida.
Y es que Baraldi sostuvo la antigua escritura hitita, desarrollado en la Anatolia turca, podía encontrar semejanza con el antiguo tupí guaraní originario de Sudamérica. Atribuía este enigma lingüístico, conectando Oriente Mediterráneo con América, a la existencia de un legendario puente continental, no siendo otro que Atlántida.
Estos vestigios según creyó encontrar Baraldi durante sus exploraciones, estarían muy vigentes en Brasil. Incluso llegó a proponer el tupí guaraní, fue el idioma hablado por los desaparecidos atlantes. Baraldi también llego a pensar los hititas fueron una raza muy avanzada, que sabían manejar la energía geotérmica de los volcanes, tecnología quizás heredera de la perdida Atlántida.
Quiero recordarle al lector, Derinkuyu, según explican los geólogos, sus túneles y accesos subterráneos circundantes, se habrían formado debido a la acción de lava volcánica.
Si los hititas se valieron de la lava volcánica como energía geomagnética, es una posibilidad que debería someterse estudio, aunque los datos por ahora sean insuficientes. Examinemos otra variante.
Yima. El Noé Persa
Antes que el cristianismo se extendiera por Turquía y regiones aledañas, una de las religiones más antiguas de la Tierra tenía allí su dominio, la de Zoroastro, fundada en el siglo IV antes de Cristo. El dios principal de este credo fue el gran Ahura Mazda, que revelara a Zoroastro, su misión como futuro profeta. Pero antes que esta revelación tuviera lugar con Zoroastro como mensajero, existió un iniciado anterior, y a quien Ahura Mazda impartió sus secretos, se llamó Yima, conocido como el monarca del Diluvio.
Sus hazañas se narran en el Zend Avesta, texto de carácter sagrado celebrado en la cultura indo-iraní, comparable con la biblia cristiana. Yima pertenece a las denominadas dinastías divinas, cuya autenticidad debido a su enorme antigüedad, se hace imposible datar.
Ahora bien, el lector preguntara qué papel juega Yima dentro del enigma de Derinkuyu, y es que el mítico rey, según se narran en estas crónicas, estuvo en poder de conocimientos asombrosos. La escritura de origen polaco Jadwiga Pasenkiewicz, atrapante estudiosa ya fallecida, en Los Soberanos de los Mundos Perdidos. Las Civilizaciones Aeronáuticas del Pasado, publicado en 1992, ahonda en uno de sus capítulos, en el misterio del legendario Yima.
Así se dice su reino promovió la ciencia, y educación entre sus súbditos. Sus arquitectos establecieron, edificios deslumbrantes, bien fortificados, dotados de baños, cañerías hidráulicas, molinos, puentes de madera y de piedra. Barcas veloces surcaban los mares.
Los dones de Yima parecían incluir la sanación, y bondad sin limites, alabado como un verdadero santo. Se rumoreaba, sus poderes personales eran capaces de derrotar la muerte. Otras referencias aportadas por Jadwiga, hablan de tecnología desconocida utilizada en aquellas eras remotas.
Así se cuenta, Yima, poseía un avión personal, una lámpara perpetua sin aceite en su interior, como si fuera una especie de cúpula semejante al actual televisor, con el cual se podía observar el mundo entero.
Otros elementos narran la existencia de una copa de rubidio, que habría permitido al rey descubrir los secretos científicos más ocultos, y también otra de carácter mágico que permitía dilucidad el comportamiento de las personas.
Todas estas consideraciones llevan a esta escritora a pensar si Yima, no fue parte de la legendaria sociedad secreta conformada por los llamados Nueve Desconocidos, que otro día prometemos comentar.
Sin embargo, este reino dorado, de pronto fue presa de un anuncio funesto, como se describe en el Zend Avesta.
Debido a un aumento excesivo de la población, las condiciones de la vida en la tierra se estaban deteriorando. Los mares crecieron. La Humanidad de aquellos días alcanzaba edades asombrosas, generando un problema, ya que eran demasiados”.
Se dice Yima fue advertido por los astrónomos de su corte, que el tiempo del Diluvio se acercaba, y debía buscar refugio para proteger a su pueblo.
Ahura Mazda le comunicó:
Bello Yima, sobre el avieso mundo serán disueltas las nieves de muchos inviernos, que antes caerán abundantemente desde las montañas más altas, hasta los bajos del río Adrevi. El agua se precipitará con inmensas olas que cubrirán todo. Construye, por lo tanto, a Var.
Allá llevarás el semen de todos los hombres y mujeres que sean más grandes, bellos y sanos entre los que existen en la Tierra. Llevarás también el semen de los mejores animales, de plantas nutritivas y perfumadas.
No permitirás que, entre ninguna enfermedad, ni diente cariado, ni otro mal. Se salvarán sólo aquellos acogidos en Var, porque el resto del mundo se convertirá en improductivo. De ellos nacerán las nuevas razas de hombres, animales y plantas”.
El término Var, alude a un arca, pero no como el navío utilizado por el Noé bíblico, sino que se trataría de un refugio.
Y aquí oro punto vinculante hacia el enigma de Derinkuyu, según transmite Jadwiga Pasenkiewicz:
Este Noé persa abandonó las tierras bajas de Irán y se encaminó hacia los altos montes, donde edificó una ciudad subterránea. En las profundas vísceras de la tierra hizo aprontar ambientes destinados a los estudiosos, como bibliotecas, laboratorios, depósitos del material de más valor y las máquinas voladoras. Las poblaciones utilizaron estas ciudades a lo largo de los siglos, como refugio durante las guerras y calamidades naturales.
Según el antiguo texto sánscrito, el Mahabharata, la morada de Yima resplandecía de un fulgor de luces artificiales. El hacia nutrir a su gente con alimentos no extraídos de cosas que crecían en los campos, y de animales que caminaban en los prados o en los bosques”.
Sabemos en Derinkuyu que oficialmente se abrió al público en 1967, existen muchos niveles que hasta el momento continúan sin conocerse. Quizás entonces las narrativas sobre el mítico Yima , y sus refugios prehistóricos hallen algunas respuestas.
Derinkuyu y la Era Glacial
Algunos autores alternativos como Graham Hancock y Collin Wilson, proponen que Derinkuyu pudo funcionar como un refugio, cuando la humanidad atravesó la era glacial. Cuando tratamos los misterios de Portasar, y teniendo en cuenta la cercanía de estas ruinas con Derinkuyu, esta posibilidad suma mayores argumentos.
Conexión Malta – Derinkuyu
Mientras llevo a cabo este estudio, surge una nueva pista sobre Derinkuyu que quizás arroje algo de luz al problema. Y es que este misterioso complejo subterráneo cuenta con un sofisticado sistema de megafonía, cuya función sirve para incrementar el volumen de sonido, repartido por varias de sus estancias, ayudando así a enviar mensajes, y monitorear alarmas.
Este tipo de tecnología no es solo propiedad de Derinkuyu, en el mediterráneo maltés, existen señales que apuntan a un mismo universo compartido. Y es que las similitudes son pasmosas. En 2015 entrevisté al estudioso alemán Hubert Zeitmair, que desde hace veinte años viene estudiando los enigmas de Malta, especialmente en lo referente a la cuestión subterránea.
- Göbekli Tepe «Año Cero de la Humanidad»
- El Tesoro Perdido de los Incas: Misterios del Tahuantinsuyo
- Chavín de Huántar: Secretos subterráneos de la «Jerusalem Andina»
Sus investigaciones apuntan a la Atlántida, y donde Malta habría sido una antigua colonia de gran importancia. Según pudo recoger Zeitmar durante sus pesquisas, la isla maltesa supo desarrollar en el pasado instalaciones energéticas de gran potencia, en base a los recursos existentes.
Una de esas misteriosas evidencias es el famoso Hipogeo de Hal Saflieni, que es considerado el templo subterráneo más antiguo del planeta, y declamado patrimonio de la humanidad. No voy a extenderme ahora sobre todas sus increíbles propiedades, remarcando tan solo una cuestión, que hace al caso comentado.
Es acerca de sus propiedades acústicas, considerada por los actuales expertos, como una auténtica maravilla de tecnología antigua. Se cree los antiguos arquitectos que edificaron a Hal Saflieni conocían el poder del sonido sobre la psiquis humana, ayudando en su ampliación cognitiva y desarrollo cerebral. Hasta aquí.
Conclusión
A través de este artículo, intentamos buscar respuestas a los enigmas que representa Derinkuyo. Desde ya la misma no puede subscribirse a hacia una vision individual, sino que encontramos pistas que llevan a pensar en una cultura prehistórica global, de insospechadas consecuencias. Hasta aquí.
Bibliografía
Libros
- Balboa, J. Enigmas y misterios de la Arqueología. Madrid: Alba Libros, 2013.
- Baraldi, G. Os Hititas Americanos. San Pablo: Edicon, 1997.
- Czajkowski, H. La Conspiración de los Alquimistas. Madrid: Grijalbo.
- Däniken, E. El Oro de los Dioses. Buenos Aires: Huella, 1977.
- Demir, O. Capadocia. Cuna de la Historia. Turquía: Ankara, 1992.
- Pasenkiewicz, J. Los Soberanos de los Mundos Perdidos. Las civilizaciones aeronáuticas del pasado. Buenos Aires: Kier, 1992.
Sitios web
- Collective Evolution
Hancock, G. The Zoroastrian Texts Of Ancient Persia, Underground Cities & What They Reveal About Advanced Ancient Civilizations.
‘https://www.collective-evolution.com/2016/10/18/the-zoroastrian-texts-of-ancient-persia-underground-cities-what-they-reveal-about-advanced-ancient-civilizations/ - Crónica Subterránea
Goldstern, D. Gabriele D. Baraldi. Explorador de Otras Eras.
‘https://cronicasubterranea.blogspot.com/2008/10/gabriele-dannunzio-baraldi-explorador.html
Goldstern, D. Malta Misteriosa, Hubert Zeitlmair. Entrevista Exclusiva.
‘https://cronicasubterranea.blogspot.com/2015/04/malta-misteriosa-hubert-zeitlmair.html - Cultura Inquieta
Derinkuyu, una antigua ciudad subterránea que en un tiempo alojó a 20.000 personas.
‘https://culturainquieta.com/es/inspiring/item/12754-derinkuyu-una-antigua-ciudad-subterranea-que-en-un-tiempo-alojo-a-20-000-personas.html - El origen del Hombre
Derinkuyu, la mayor ciudad intraterrestre.
‘http://www.elorigendelhombre.com/derinkuyu.html - Entre tanto Magazine
La Misteriosa Ciudad Subterránea.
‘https://www.entretantomagazine.com/2014/05/01/la-misteriosa-ciudad-subterranea-en-derinkuyu/ - Fib Haber
La muerte de Ömer Demir sofocó Capadocia.
‘http://www.fibhaber.com/m/turizm/omer-demir-in-olumu-kapadokya-yi-yasa-bogdu-h78600.html - Le Livre Penseur
Laurent Glauzy. Derinkuyu, los misterios de la ciudad subterránea más grande.
‘https://www.lelibrepenseur.org/dossier-sur-larcheologie-interdit - Próxima Parada la Luna
Ciudades Subterráneas de Turquía.
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The Study of Derinkuyu Underground City in Cappadocia Located in Pyroclastic Rock Materials.
‘https://www.researchgate.net/publication/309276135_The_Study_of_Derinkuyu_Underground_City_in_Cappadocia_Located_in_Pyroclastic_Rock_Materials - Tato’s Bear Cave
Capadocia Derinkuyu de unos 3,500 años de antigüedad.
‘https://www.jrzetina.com/429458958
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Me fascina la historia. Y al leer esta historia relacioné estás cuevas subterráneas en las profundidades de la tierra con las minas que aún en la actualidad se explotan en Potosí. Uno entra al Inframundo. La oscuridad es un negro negro sin luz. En lugares fríos a más de 4000 msnm con temperaturas de 0 grados en época invernal entrar en estás bocaminas desender sus niveles de explotación minera hacen sentir un calor que hace transpirar a la vez que se va sintiendo un faltó de aire y oxígeno. Pero aún así se sigue trabajando.
Me encantó su historia Saludos
Hola Sebastián, muchas gracias por su lectura y testimonio. ¡Un saludo!
Muchas gracias por informar me gustaría saber más