Culturas antiguas muestran ancestrales conocimientos para ingresar a un estado espiritual elevado e incluso percibir al mismo «Dios». Esa es la llamada Molécula de Dios.

Es una molécula muy poderosa que se puede encontrar tanto en animales como plantas, la cual influye directamente a la conciencia y se cree, es la que otorga al ser humano la capacidad de acceder a dimensiones superiores a la terrenal.

¿Qué es la molécula de Dios?

Molécula DMT. Crédito: Sbrools / Wikimedia commons

Científicamente llamada dimetiltriptamina es un compuesto psicodélico que pertenece a la familia de las triptaminas. En pocas palabras, la estructura del DMT es similar a la de otras sustancias, como la serotonina. Sin embargo, posee funciones psicodélicas como la psilocibina. Muchas veces usado como «droga» por personas irresponsables.

Las tribus amazónicas la han  usado en el transcurso de la historia, ya que puede llevar a estados de conciencia inusuales en el ser humano, siendo utilizada sobretodo en rituales.

Recientemente se ha descubierto que la molécula DMT también se encuentra dentro de nuestro cuerpo, y es segregada por una parte del cerebro. Esto podría significar que el ser humano tiene una capacidad natural de alcanzar un estado espiritual.

El estado espiritual y su relación con la Molécula DMT

La relación entre la DMT y el plano espiritual. Crédito: Okan Caliskan / Pixabay

Es normal que muchas personas se pregunten cuál es la relación entre un estado espiritual y la mencionada molécula. La respuesta a esta interrogante se remonta mucho tiempo atrás, cuando nuestros antepasados ya mencionaban las diferentes dimensiones del espíritu y como podían acceder al mismo plano que Dios.

Sin embargo, el hallazgo actual sobre su relación nace gracias al trabajo del Doctor Rick Strassman, en la década de los 90, cuando propuso que la molécula era segregada por la glándula pineal del cerebro humano.

Esta glándula ha sido es considerada como la responsable de los diferentes estados inusuales del ser humano. Sin embargo, no había prueba alguna hasta que Jimo Borjigin lo descubrió en la Universidad de Michigan.

Con la confirmación de la molécula en la glándula pineal, se descartó la última como la responsable de los estados de conciencia inusuales en los humanos y el crédito pasó a la molécula que producía.

De hecho, los estudios posteriores han demostrado que es la responsable de los sueños, los diferentes estados de conciencia del ser humano, las imágenes que se ven en las experiencias cercanas a la muerte, las visiones y todo aquello relacionado con lo místico y espiritual del ser humano.

Por esa razón se le concedió el nombre de la «molécula espiritual» o «molécula de Dios», haciendo referencia al tercer ojo mencionado en algunas culturas o al acceso al estado espiritual que permitía a nuestros antepasados hablar con Dios.

Relación con la reencarnación

La molécula DMT puede relacionarse con la reencarnación. Crédito: Soothing Music Relaxing / YouTube

La reencarnación continúa siendo un tema polémico. De hecho, científicos han determinado que existen pruebas suficientes en ciertas personas que confirmarían vivencias personales ajenas en sus recuerdos como si ellos mismos la hubiesen vivido.

La razón del por qué estos seres humanos tienen recuerdos tan vívidos de eventos que afectaron las vidas de otros, en ocasiones, que vivieron siglos atrás, continúa siendo un misterio. Sin embargo, Strassman podría tener la respuesta.

El Doctor llegó al punto de vincular la molécula con la reencarnación y el lapso de tiempo, que se menciona en el Libro Tibetano de los Muertos, en el que un alma tarda en acceder a otro cuerpo humano.

Actualmente el científico continúa trabajando con la molécula, teniendo como próximo objetivo determinar si existe en el fluido cerebroespinal, ya que esto podría significar una ruta de síntesis del DMT pineal que afecte la función del cerebro.

Otras investigaciones de la molécula

Las pruebas provocaron visiones y emociones fuertes. Crédito: PxHere

Se han realizado otros estudios con esta molécula, y los voluntarios sufrieron visiones y sentían que su espíritu se alejaba de sus cuerpos.

También reportaron emociones sumamente fuertes y recuerdos de su vida llegaban en forma de «flashes» a sus mentes, al punto de que no podían pensar en otra cosa.

¿Podría ser esta la molécula que nos lleve a nuestros orígenes y muestre la conexión verdadera con aquellos seres que nos crearon? Llámese Dios, Alienígenas Ancestrales, Seres de Luz o como mejor se conozca según nuestras convicciones.

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