El Mando Estratégico de EEUU —USSTRATCOM— considera iniciar la preparación de los militares del país para el combate en el espacio abierto, según informa Space.com.

Según Charles Richard, subcomandante de USSTRATCOM y vicealmirante de la Armada estadounidense, una estrategia de «preparación sin provocación» podría proteger los activos espaciales del país además de ayudar a prevenir conflictos en el espacio.

Así como los activos nucleares disuaden de la agresión (…), tenemos que mantener una postura espacial que comunique el mismo mensaje estratégico”, apuntó Richard durante una presentación en el marco de una conferencia del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington.

El militar también agregó que «la mejor manera de prevenir una guerra es estar preparados para una guerra», por lo cual EEUU «se asegurará de que todo el mundo se dé cuenta» de su capacidad de vencer cualquier tipo de guerra, incluidas las llevadas a cabo en el espacio.

A juicio de Richard, la supremacía militar-espacial de EEUU se ve amenazada por Rusia y China que «desarrollan tecnologías antisatélite avanzadas (ASAT)». De esta manera, según prosiguió, el espacio dejó de ser un “ambiente benigno”.

Aunque no estamos en guerra en el espacio, tampoco se puede decir que estamos en paz”, expresó.

Asimismo, Richard indicó que la confrontación entre las mayores potencias «está de vuelta en la agenda de hoy». Por lo tanto, EEUU tiene que prevenir no solo el conflicto, sino también «el mal comportamiento» en el espacio, considera. El militar hizo referencia a las pruebas de ATAS llevadas a cabo en 2007 por China, que crearon 3.400 nuevas piezas de desechos orbitales rastreables.

Nuestro objetivo es promover el acceso seguro al espacio para que las generaciones venideras lo puedan explorar”, afirmó.

Las sondas estadounidenses se utilizan para el reconocimiento, la comunicación en regiones remotas, la navegación de buques y vehículos aéreos no tripulados, además de la gestión de misiles y bombas aéreas.

El Kremlin, por su parte, promueve la idea de la desmilitarización del espacio, pero EE.UU ha bloqueado el proyecto de su resolución en la Asamblea General de la ONU.