El turismo espacial es una realidad hoy día y dentro de poco la computación cuántica se difundirá mucho más. Y si eso logró impresionarte, deberías saber que los científicos ya consiguieron introducirse a los sueños de las personas. Estos hechos, son una muestra clara de los grandes avances que la ciencia y la tecnología han logrado en años recientes.

Especialmente llama la atención, las nuevas técnicas que algunos investigadores han desarrollado para explorar los sueños y aprender de ellos. En este sentido se destaca un proyecto relacionado con los sueños lúcidos, y un método descubierto por los científicos para comunicarse con la persona mientras duerme.

¿Qué son los sueños lúcidos?

(Public domain)

Se trata de un estado de sueño, donde la persona tiene cierto grado de conciencia y de control sobre lo que sueña. Es decir, está consciente de que está soñando. De acuerdo con algunas estadísticas, la mitad de la población mundial entra en la categoría de tener esta clase de sueños.

Su principal característica es que la persona que sueña sabe que está experimentando un sueño, por lo tanto puede controlar el contenido, acciones y desarrollo del mismo. Un sueño lúcido, puede ocurrir de manera espontánea o se alcanza por medio de inducción con técnicas, prácticas o ejercicios.

En promedio se calcula que mensualmente aproximadamente, un 20% de nosotros experimenta el estado de sueño lúcido, mientras que un 1% lo hace semanalmente. Pero no es el tipo de sueño lo que está causando revuelo en la comunidad científica, porque el fenómeno se conoce desde hace mucho tiempo.

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La posibilidad de comunicarse con un soñador

Al principio de la década de 1980 Stephen LaBerge, un prominente psicofisiólogo norteamericano, planteó la posibilidad de establecer comunicación con un soñador lúcido. Para lograrlo, utilizaría los movimientos oculares para demostrar que efectivamente, en ese estado se pueden dar algunas respuestas.

Durante años se usó ese método, con relativo éxito, pero sin poder avanzar mucho en lo que los científicos ahora llaman “un sueño interactivo”. La historia es diferente ahora, sobre todo gracias al avance de la neurociencia en el campo de los sueños y al arduo trabajo de sus estudiosos.

Portada de la película Inception. Cortesía: Warner Bros. Pictures

Científicos aprenden a introducirse en los sueños

Los soñadores lúcidos tienen la particularidad de tener una conciencia residual y los investigadores supieron aprovecharla para llevar a cabo su proyecto. Por eso, varios colegas de diferentes laboratorios unieron esfuerzo, conocimiento y habilidades para desarrollar la investigación.

Fue así como decidieron hacer una selección de soñadores lúcidos para que fueran parte del programa. Por un lado reclutaron soñadores que estuvieran acostumbrados a vivir esa clase de sueños y también a otros con poca experiencia, para entrenarlos a estar en ese estado.

Luego de contar con las personas adecuadas, el siguiente paso consistió en aplicar a los reclutados un procedimiento que desarrolló la científica Michelle Carr junto con sus colegas. El método consiste en combinar frecuentemente algunos sonidos y luces durante la noche hasta inducir a los participantes al estado del sueño lúcido.

Si efectivamente los colaboradores del proyecto entraban al sueño lúcido, debían indicarlo haciendo amplios movimientos horizontales con sus ojos. Esto sería corroborado por los equipos que medían sus ondas cerebrales mientras se encontraban dormidos.

(Public domain)

Se establece el sueño interactivo

El grupo de científicos internacionales que se unieron para este gran proyecto, finalmente lograron algo inédito, comunicarse con los soñadores. Una vez que los participantes afirmaron estar dentro de un sueño lúcido, se procedió a plantearles unas preguntas de matemáticas, pero muy básicas.

Por ejemplo, se había acordado preguntar cuánto es 8 menos 6 y esperar la respuesta. Así fue que ocurrió algo sorprendente, pues los participantes dieron la respuesta correcta por medio de un código establecido con anterioridad. Para dar como respuesta el resultado 2, el movimiento de los ojos debía ser de izquierda a derecha.

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Uno de los encargados del proyecto, el psicólogo Ken Paller miembro de la Universidad Northwestern, señaló lo siguiente:

“Hemos descubierto que las personas estando en un sueño REM (Rapid Eye Movement) se pueden comunicar y al mismo tiempo interactuar con alguien fuera de sus sueño, en tiempo y espacio real. También logramos demostrar que los soñadores tienen la capacidad de comprender preguntas y dar respuestas.”

Ahora se abren nuevos caminos en la ciencia que acaba de tener una comunicación bidireccional con un soñante lúcido.

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