Una extraña señal detectada años atrás y proveniente del núcleo de la Tierra está siendo investigada, y los científicos se están aproximando a entenderla.

En 2019, los científicos detectaron una extraña oscilación en las profundidades de la superficie de la Tierra que fluctúa aproximadamente cada 8.5 años.

Ahora, al mapear cambios diminutos en la rotación de la Tierra, el equipo ha encontrado una explicación: el núcleo interno de nuestro planeta puede en realidad estar en un ángulo con respecto al manto.

Este misterioso “Inner Core Wobble” o “Bamboleo del Núcleo Interno” les ha llevado a sugerir que el núcleo interno es más denso y pesado en el hemisferio noroeste, inclinándolo 0.17 grados lejos del manto del planeta.

La investigación, como se detalla en un estudio reciente publicado en la revista Nature Communications, podría cambiar la forma en que entendemos la estructura interna de la Tierra y cómo la actividad sísmica y el campo magnético influyen en el comportamiento del núcleo.

Pastel de capas

Los modelos convencionales sugieren que el núcleo de la Tierra gira a lo largo del mismo eje que el manto, gracias a una distribución uniforme de la densidad en ambas capas.

Una representación esquemática de la oscilación del núcleo interno inclinado. Crédito de imagen: Dr. Ding / Nature Communications

Hao Ding, coautor de la investigación y decano del departamento de geofísica de la Wuhan University en China, dijo en una declaración:

“Sin embargo, los resultados de la libre oscilación de la Tierra (oscilaciones naturales de la Tierra en su conjunto) indican que las estructuras de densidad del interior de la Tierra son muy heterogéneas, por lo que esta suposición no debería ser realista.

Esto implica un posible ángulo de rotación diferencial hacia el este del núcleo interno de menos de 1 grado y una desalineación en los ejes de simetría de la capa límite manto inferior/núcleo-manto con el manto superior”.

Los hallazgos desafían la forma en que entendemos el movimiento de las distintas capas de la Tierra. Especialmente donde el núcleo interno se encuentra con las capas circundantes, hay un cambio notable en la densidad, lo que hace que el núcleo de la Tierra se tambalee periódicamente.

La investigación también puede tener implicaciones de mayor alcance. La inclinación entre el núcleo interno y el manto “también puede conducir a un cierto cambio en la forma del núcleo líquido, lo que resulta en un cambio en el movimiento del fluido y un cambio correspondiente en el campo geomagnético”, agregó Ding.

Pero el equipo sólo está arañando la superficie, y todavía queda mucho por investigar antes de que podamos obtener una imagen más completa de lo que sucede en las profundidades de la superficie de la Tierra.

Los hallazgos de la investigación han sido publicados en la revista Nature Communications.

Fuente: Phys.org

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Crédito imagen de portada: depositphotos.com